◇•10•◇

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-Jisung subió lo mas rápido que pudo a su habitación, ignorando a sus amigos, cuando llego cerro la puerta tras de si, y le puso seguro.

-don.. donde..- Jisung no sabia donde podía tener algún supresor, ya que le hicieron dejarlos cuando firmo el contrato- baño...- las  piernas le temblaban pero como pudo llego al baño- N.. no tengo- busco donde normalmente guardaría pero no habia... el calor era insoportable, habia comenzado a jadear y se apoyo en el marco de la puerta del baño- Dios. Se sentía igual de doloroso que su primer celo, sentía como se humedecía sus pantalones.

-Jisung- se escucho la profunda voz de Minho al otro lado de la puerta y algo en su cuerpo hizo click, sus piernas no dieron mas y callo de rodillas al piso- Abre..- solo salían jadeos de sus bocas... esta por perder la poca cordura que le quedaba pero se acordó de algo y gateo hasta la mesita de noche, sabia que el iba a entrar en cualquier momento, abrió el cajón y saco el collar que le habia dado Lia- Jisung.. abre YA-  un escalofrió  recorrió su espalda, sus manos temblaban pero como pudo se puso el collar.. el aroma de Minho se hacia mas fuerte y hacia chillar a su omega, no soportaba mas y aun en el piso apoyo su cabeza en la cama , mientras sus manos se hundían en su entrepierna- Min...Minho..- dijo el rubio casi en susurro y entre jadeos.. pero lo suficiente para que el pelinegro lograra escuchar.. ya la razón los abandono y lo siguiente que se escucho fue el tronar de la madera partiéndose, Jisung volteo a ver la puerta.. Minho habia roto el cerrojo de la puerta y entraba lentamente - Minho...- el pelinegro con todas sus fuerzas habia destrozado la cerradura y cuando entro como una ráfaga el aroma a canela lo golpeo de lleno en la cara... su boca se lleno de saliva, cuando por fin vio al peliazul en el piso junto a la ama con la cabeza apoyada en esta, los ojos llorosos, la cara sonrojada, sudando y con las mano en la entrepierna.. joder que vista.... tan indefenso, trago grueso y entro " cerrando" la puerta.. camino  con la mirada fija en esos ojos azules que lo veían suplicantes.

Cuando llego donde el se agacho hasta quedar a la altura de la cara del peliazul, puso una mano en la barbilla del contrario para que elevara el rostro, hundió su nariz en el cuello del omega, inhalo profundo para después soltar un gruñido que hizo soltar un leve gemido al peliazul.. deslizo su nariz desde el cuello hasta la oreja del menor.. su aliento chocaba con la piel del contrario, el aroma del peliazul era fuerte, vicioso, nunca habia olido algo así, su alfa interior rugía, tenia ganas de arrancarle la ropa y empotrarlo ahí en el piso, embestirlo tan fuerte que se le destroce la cadera... pero no.. tenia que ser cuidadoso, era la primera vez de ese mocoso y no lo iba a traumar..

-Mocoso...- fue lo único que dijo antes de rodearlo por la cintura para alzarlo, ante esto el peliazul rodeo el cuello del pelinegro con sus brazos, el calor se acumulaba donde el mayor lo tocaba y se sentía también. Soltaba gemidos sin pudor en el oído del pelinegro- Joder Jisung..- lo tiro en la cama- Si sigues así.. no me podre controlar... y te juro mocoso de mierda que no caminaras en un mes- Jisung lo veía desde la cama mientras el pelinegro se desabotonaba la camisa, dejando al descubierto su pálida  piel y su espectacular y trabajado cuerpo .... La cordura de Jisung habia volado a la mierda, solo quería que ese alfa le aliviara y lo sometiera.

-A-alfa- extendió los brazos hacia el pelinegro el cual gruño aun mas fuerte  antes de subirse encima del peliazul y besarlo con hambre, era el primer beso de Jisung y con torpeza trato de seguirle al pelinegro, pero este era un experto, le mordió el labio al omega sacándole un gemido y aprovecho para meter la lengua y así saborear la tibia y húmeda cavidad del contrario, sus mano paseaban en las curvas del omega hasta que llego al borde de la camisa, deslizo las manos bajo esta, acariciando la suave y bronceada piel, Jisung  se retorcía por las caricias, se aferro con fuerza al cuello del pelinegro.

Minho levantaba de apoco la camisa del peliazul, dejando a la vista los preciosos botones, los cuales no dudo en pellizcar, logrando que Jisung terminara el beso con un grito, que hizo sonreír al pelinegro. Comenzó a besar el cuello bajando cada vez mas, dejando marcas a su paso, llego al dichoso collar y joder que si lo maldecía  en ese momento, bajo mas hasta llegar a los pezones que no demoro en chupar, mientras le quitaba la camisa al peliazul. Jisung se sentía desesperado, quería mas, mas caricias, mas contacto, así que apenas le quito la camisa, comenzó a mover la cadera rozando al contrario que gruñía entre dientes.

•Alquilado• minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora