Eres la elegida (Parte 1)

13. Despedida

Cuando pude abrir los ojos de nuevo la tenue luz de la enfermería seguía en el mismo tono, pero Snape ya no estaba a mi lado. Como Cedric y yo estábamos completamente solos en la sala me levanté de la cama, estiré todo mi cuerpo y salí al pasillo para despejarme un poco. Dejé que la luz de la luna se posara suavemente sobre mi cuerpo y me apoyé en la barandilla de mármol del castillo observando cómo los alumnos iban entrando poco a poco a sus aulas. A lo lejos visualicé a los gemelos, los cuales me saludaron haciéndome sonreír como siempre, especialmente Fred. Draco se dio cuenta de eso y al verme abandonó a sus amigos de Slytherin y subió corriendo hacia el piso de la enfermería para hablar conmigo.

-¿Dónde has estado? -me preguntó andando desde lo lejos del pasillo. -Te he estado esperando en... 

-No llores; ayer te estuve esperando yo y tampoco apareciste. -Se paró delante de mí y me cogió de la mano, pero se la aparté. -No me toques. 

-¿Cómo?

-¿Dónde estuviste ayer?

-Ya te lo conté.

-No me contaste nada, tan solo te encontré en el baño hecho una mierda con la camisa llena de sangre sin apenas poder respirar, pero no me has contado que he hiciste durante todo el día.

-¿Desde cuando nos pedimos explicaciones mutuamente?

-¿Desde cuando nos mentimos? -Frunció el ceño e intentó acercarse a mí pero me aparté de nuevo. -¿Quieres saber donde he estado yo? Bien, hoy he estado todo el día en enfermería porque haber bebido alcohol puede ser peligroso para mi corazón, el cual está bastante débil y tengo que quedarme en observación.

-¿Cuando pensabas decírmelo?

-¿Y tú? -insistí. -¿Cuando pensabas contarme dónde has estado tú? -Negó con la cabeza sin saber que decirme y abrió sus brazos a modo de confusión. Lo miré fijamente a los ojos y entonces fui yo quien se acercó a él amenazantemente.

-No entiendo a que estas jugando ni a dónde quieres llegar, Kira. Yo...

-Ayer cuando te dije que fuéramos a enfermería te pusiste extremadamente nervioso, no querías ni oír hablar de venir aquí. ¿A que le tenías miedo?

-A nada.

-Odio que me mientan.

-¿Te crees que no lo sé?

-Pues deja de hacerlo.

-No lo estoy haciendo.

-Draco... 

-¿Que? 

-Sé lo que hiciste.

-Sigo sin saber de qué estás hablando.

-¡Estoy hablando de Cedric! 

-¿Que le ha pasado a Cedric? 

-Pero... ¿Tu me has visto la cara de estúpida o algo así? -Se quedó en silencio sin saber que responderme. -Te lo estoy advirtiendo, deja de mentirme de una puta vez. ¿Crees que no te conozco? ¿Crees que no sé de lo que eres capaz? 

-¿Que estas insinuando? 

-¡No te hagas el estúpido conmigo! He escuchado la conversación que has tenido con Crabbe y Goyle en tu habitación. -Draco cerró sus ojos y suspiró profundamente pasando sus ambas manos por la cara lentamente. 

-Eso era una conversación privada.

-Mira, ¿sabes que? No quiero verte. Lárgate de aquí.

-Tranquilízate y escúchame.