6. Torneo de los 3 Magos

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Al día siguiente me desperté nerviosa después de haber pasado una noche horrible dando vueltas sin apenas poder dormir. De todas maneras puse incienso para tranquilizarme, me tomé una ducha fría y me arreglé un poco. Cuando ya estaba vestida alguien llamó a la puerta y al abrir me encontré con Draco.

-Buenos días, tesoro -dije aun con voz somnolienta.

-¿Qué te pasa? -dijo cogiéndome la cara con suavidad.

-He dormido fatal. -Entró en la habitación y cerró la puerta detrás de él.

-¿Quién crees que saldrá seleccionado para concursar? Ojalá tuviera los 18, me gustaría tanto participar...

-Cállate la boca, no digas estupideces -dije pegándole una colleja. -Menos mal que los cumples en unos meses. No me gustaría verte allí, lo pasaría muy mal.

-Nada puede salir mal si te tengo cerca -me dijo abrazándome. -Te quería decir algo, Kira. -Nos separamos, se sentó en un lateral de la cama cogiéndome las manos y me senté a su lado pero mirándonos a la cara.

-Dime, ¿qué ocurre?

-Mira, todo el tema de Pansy... No sé porqué me pasa lo que me pasa con ella, pero me alegra que no te enfadaras y no cortaras tu relación conmigo... Me daba mucho miedo.

-Por encima de todo somos familia, Draco. -Nos volvimos a abrazar e hizo fuerza para ponerme encima de él. Justo en ese momento alguien nos interrumpió abriendo la puerta de mi habitación y vimos a Lucius entrar. En seguida nos levantamos de la cama algo nerviosos.

-¿Que estabais haciendo?

-Hablando y solucionando unas cosas, papá -respondí. Frunció el ceño y nos hizo un gesto con la cabeza dándonos a entender que saliéramos de la habitación. Nos dirigimos hacia el gran salón el cual poco a poco se fue llenando de gente algo emocionada por todo lo que iba a ocurrir a lo largo de ese día.

-Recuerda lo que te dije ayer -susurró Lucius colocándose detrás de mí y agachándose sutilmente para que nadie más nos escuchara. -Eres una mujer de los pies a la cabeza; compórtate como tal.

-¿Alguna vez no lo he hecho? -pregunté sin mirarle. Sonrió disimuladamente fue junto al resto de profesores y representantes de Hogwarts.

-¿De qué habla? -preguntó Draco.

-Ahora lo verás. Vas a flipar, Draco.

-¡Silencio! ¡La ceremonia va a empezar! -gritó Dumbledore desde lo alto de un estrado. Todos los alumnos nos pusimos en pie haciendo dos filas paralelas formando un enorme pasillo en medio de la sala. -Como ya sabéis hoy es un día muy especial para Hogwarts, ya que hoy se tomará la decisión de quienes serán los afortunados que tendrán la suerte de participar en el torneo de los tres magos. Aquí a mi lado se encuentra el cáliz de fuego, el cual decidirá el nombre de tres magos aptos para participar. Antes de empezar con la selección os quiero pedir un aplauso muy fuerte para el instituto invitado a este torneo... ¡El instituto Durmstrang! -La puerta del gran comedor se abrió y los primeros en pasar fueron los escoltas, después el director de la escuela y detrás de él los posibles participantes.

-No puede ser -dijo Draco gesticulando con asco al ver a Viktor Krum. -¿Y tú cómo sabías que iba a venir?

-Me avisó papá ayer. Cambia la cara, por favor. No quiero que piense que nos provoca ninguna emoción; ni positiva, ni negativa... Nada.

-¿Cómo puedes estar tan tranquila?

-No lo estoy, Draco. Es mi ex, evidentemente no me apetece verle la cara, pero tampoco voy a permitir que me vea afectada -susurré.

Eres la elegida (Parte 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora