Bonito día para actualizar 😊😊
xxxxxxx
Miró su reloj de muñeca y comprobó la hora, nueve treinta de la mañana. Con una taza de café en las manos, se acercó a la ventana de su apartamento observando un cielo despejado, sin nubes, un cielo tan azul como el de......................... suspiró profundamente .......................
Se giró para ver su cama, esa cama vacía ahora , pero que el fin de semana anterior había vivido muchas cosas, sonrió al pensar, no solo en lo que había hecho sobre ella con Clarke, sino en casi todas las habitaciones de ese apartamento, la cocina, la ducha, el suelo del salón, en el sofá......... atesoraba cada momento con su bonita doctora como si fuera único.Clarke y ella ya llevaban un par de meses en donde se veían algunos fines de semana o días entre semana que alguna de las dos tenía libre y cogía un coche para pasar unas horas juntas. Por supuesto, hacer el amor era una de sus prioridades para recuperar esos días que no podían verse, pero también salían a pasear, ir al cine, de compras, tomarse algo en la cafetería de Abby cuando ella iba a Filadelfia, o quedar con los chicos del equipo cuando era Clarke la que viajaba a la capital.
Había algo que todavía no habían hecho............... quedar con Constance y Adam. Sí había llevado a la doctora a conocer a sus padres y, por supuesto, se habían quedado encantados con Clarke. Al principio estaban algo reticentes a la relación, hacía poco de la separación con Constance y no estaban seguros de que comenzar una relación tan pronto fuera bueno para su hija, pero en cuanto pasaron un rato con Clarke y observaron la interacción entre ellas, se dieron cuenta que estaban hechas la una para la otra. Hacía mucho tiempo que no veían a su hija tan feliz, al menos desde que murió Guillian, y ahora, era una bendición verle sonreír de nuevo.
Lexa no le tenía miedo al encuentro entre Clarke y Constance, sabía que la doctora tendría paciencia con ella, por su trabajo sabía como tratar a gente con problemas de autoestima o con tendencia a la depresión y su futura exmujer ya estaba bastante estable, sin ninguna crisis, pero ella y Clarke no podían evitar las muestras de cariño cuando estaban juntas y no esta segura de cómo eso afectaría a Constance. Además, estaba Adam, el pequeño, con solo unos instantes con Clarke en la exposición, ya había caído rendido a los encantos de la rubia, pero ahora tenía más competencia para tener la atención de su tía y por eso quería ir poco a poco.
Lexa seguía haciéndose cargo de algunas cosas de Adam, llevarlo al fútbol, recogerlo algunos días del cole, y si no podía, al menos se pasaba un momento por su casa para desearle buenas noches. En el acuerdo de divorcio iban a establecer un régimen de visitas porque era una norma por si hubiera futuros conflictos, pero no haría mucha falta. Su relación con Constance había mejorado mucho en ese tiempo, y no habría problema para poder verlo siempre que quisiera y se pusiera de acuerdo con su futura exmujer. Por fin Constance parecía haber encontrado la estabilidad mental que necesitaba, reconociendo sus errores, y con la ayuda de Lexa y las sesiones de terapia, potenciar todo lo bueno que tenía. A pesar de todo, había criado a un niño que era una bendición, bien educado, cariñoso, con unos valores que no mostraban la gran pérdida que había tenido y que entre su madre, Lexa y el resto de la familia, incluidos los amigos más allegados, había hecho que asimilara esa falta como un adulto, eso sí, Adam era algo travieso, pero era algo propio de la edad, pronto cumpliría los once años y empezaría con esas cosas de preadolescente, pero el psicólogo del colegio les había dicho que no era probable que eso fuera a suponer un problema y que se estaba adaptando perfectamente a la separación de su madre con Lexa.
Se acabó su café y dejó la taza en el fregadero con el resto de cosas que había utilizado en el desayuno. Normalmente lo dejaba todo en orden, puesto que no solía comer en casa, pero ese día acudía a su apartamento una chica que le hacía una limpieza general. No es que le hiciera falta puesto que ella era una persona ordenada y se arreglaba bien, pero la mujer era una de sus vecinas que se había quedado sin trabajo y el sueldo de su marido era escaso, además tenía un par de adolescentes que mantener, eran buenos chicos y su madre prefería que siguieran estudiando a ponerse a trabajar para ayudar en casa, así que Lexa le dio la posibilidad de hacerle las tareas de la casa una vez a la semana por un dinerillo que a la mujer le vendría muy bien.
ESTÁS LEYENDO
CALL OF DUTY AND LOVE (Clexa AU)
RandomClarke Griffin pertenece a una ONG que centra su atención humanitaria en los paises de centro África. Su trabajo es enseñar a los médicos nativos y promover la salud entre las mujeres y niños del lugar. Todo se complica cuando una revuelta militar p...