chapter forty-six

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A pesar de que Alcina dejó claro que iba a volver a casa, Renata seguía sintiéndose ligeramente preocupada, simplemente porque pensaba que todo estaba resultando demasiado fácil

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A pesar de que Alcina dejó claro que iba a volver a casa, Renata seguía sintiéndose ligeramente preocupada, simplemente porque pensaba que todo estaba resultando demasiado fácil. Después de años y años en los que su madre tenía que ser siempre la que tenía razón y tratar de mantener a sus hijos en el camino que ella y su marido habían armado, parecía demasiado fácil que se rindiera y volviera a casa. ¿Realmente dudaba tanto de la capacidad de Renata para encontrar un trabajo y un hombre que la hiciera feliz hasta el punto de creer realmente que Renata podría volver a "casa" más pronto que tarde?

Estaba claro que Alcina creía que Renata era incapaz de hacer nada por sí misma porque, a ojos de su madre, se había convertido en una puta niñera. Definitivamente, a Renata le dolía oír a su madre decir esas cosas sobre ella, sobre todo porque Renata no había hecho realmente nada para justificar esa reacción. Pero a Renata le enfurecía más que nada que Alcina hubiera ido a por James de una forma tan insensible. Sacar a relucir a Lily como si ella culpara a James de la muerte de su esposa, no necesitaba eso en absoluto. Había sido tan irrespetuosa con James, que realmente resultaba desconcertante para Renata.

A lo largo de su infancia, Renata recordaba que sus padres siempre se mostraban muy elegantes y sofisticados a los ojos de los demás, especialmente de los invitados. Eran la familia perfecta y ciertamente lo hacían notar con su forma de comportarse. Pero lo que Renata había llegado a presenciar, su madre había caído de las gracias de la perfección tan rápidamente, sólo para estrellarse y arder como los restos de Ícaro. Tal vez su madre quería que su familia volara cerca del sol para que les bañara siempre la luz, pero volar demasiado cerca no había resultado nada agradable.

Renata no quería verlo antes, sin embargo, no tuvo más remedio que darse cuenta de que su madre podía ser todo un monstruo cuando no se salía con la suya. Se las había arreglado para hacer que todos se sintieran absolutamente miserables y sólo había estado de visita durante dos horas. ¿Qué habría pasado si se hubiera quedado todo el tiempo que había planeado para su visita? Renata no quería ni pensarlo, ya sabía que Adelmo había bajado varios peldaños en su confianza debido a la visita de su madre.

Por suerte, Alcina sólo se había burlado de la presentación de su piso, si se hubiera enterado de lo que estaba ocurriendo entre él y Sirius, Renata podría haber esperado una tormenta infernal y Renata no creía que su hermano fuera lo suficientemente fuerte como para afrontar eso todavía. Iba a necesitar tiempo para recuperarse porque, una vez más, le recordaban que era una decepción, por la falta de una esposa y el inicio de una familia. La única manera de que se le considerara realizado sería volver a casa con una esposa e hijos para que sus padres supieran que no había manera de que se desviara hacia los hombres.

Con suerte, Renata podría estar allí para él, así como para Sirius, porque aunque no estaba segura de lo que realmente estaba pasando entre los dos hombres, estaba segura de que Sirius estaría allí para Adelmo sin importar qué. Eso le dio a Renata la oportunidad de centrarse en James porque realmente sentía que su madre había cruzado tantas malditas líneas en tan poco tiempo. A James le había ido muy bien con su curación, llevaba días sin ningún tipo de problemas y ella no quería que eso terminara para él.

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