Si buscas buenas obras históricas has llegado al lugar indicado, aquí en este apartado tendremos reseñas de esas historias que nos han gustado y que creemos podría gustarte.
Las entradas publicadas aquí serán realizadas por el equipo de ficción hist...
Célestine odia a las monjas que se encargan de educarla; le dicen cómo tiene que vestir, andar, hablar, escribir y hasta cómo y qué pensar. Hace todo lo posible por desobedecerlas y enfadarlas constantemente. Le gusta hacerse preguntas y divertirse, pero eso no es lo que se espera de ella.
Sin previo aviso, debe trasladarse desde Lyon hasta París por razones que no comprende del todo, para acabar encerrada en un correccional mixto. Un lugar donde aprenderá los valores esenciales que nunca le han enseñado antes: amistad, empatía, independencia.
Allí se hará mayor y tendrá que plantearse renunciar a su libertad o desentenderse de la sociedad para siempre. Pasar por el aro o caminar por un camino frágil que podría romperse y enviarla al vacío.
Célestine es una joven que no ha logrado adaptarse a las normas de la escuela religiosa donde estudió. La presión ha hecho que ella incluso sienta aversión hacia la religión católica, y que no dude en cuestionarla o burlarse. Todo cambiará cuando llegue a Puentes de cristal, una escuela correccional mixta donde todo es distinto. Donde, lejos de la rigurosidad de un internado católico, aprenderá otros valores y otra forma de relacionarse con los demás.
Puentes de cristal es una historia ambientada en Lyon y París a inicios de 1949. No solo conoceremos Célestine, también a varios personajes con una vida y tramas propias, quienes poco a poco empezarán a convivir en la correccional, formando vínculos de amistad entre ellos. O tal vez algo más.
La historia tiene pinceladas de una historia juvenil contemporánea, pero adaptada a la realidad de 1949 y representando las normas y costumbres de aquel entonces, inclusive la normativa educativa, importante para dar realismo a la historia.
En Puentes de cristal podrás disfrutar de algunos momentos memorables y divertidos de la mano de Célestine y sus compañeros, pero también reflexionar acerca de la condición de la juventud en la década de los 50s. De las normas que debían de seguir, y de cómo cuestionarse aquello que les fue impuesto puede acarrear problemas. O al contrario, ser un paso más para conseguir la ansiada libertad.
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¿Han leído, puentes de cristal? Si aun no lo haces, te invitamos a que te animes.
