T R E I N T A Y D O S

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— ¡Jimin! ¿Quien es este apuesto muchacho que te busca? — Jungkook estaba en frente de la mamá de Jimin, que al principio había pensado que era su hermana.

Sin mentiras, la mamá de Jimin era muy bonita para los ojos de Jungkook.

— Es Jungkook. — Su madre alzó sus cejas al no escuchar ese nombre como uno de los amigos de Jimin que siempre le hablaba. — Es mi novio, mamá.

— ¿Que le viste? Así, sinceramente. — Jungkook soltó una pequeña risa que desapareció al ver la vista de Jimin sobre el como si quisiera descuartizarlo ahí mismo.

— Su hijo es muy lindo señora Park, cualquiera cae en sus encantos. — Jimin sonrió sintiéndose halagado.

— Tienes razón. — Aún con su sonrisa hacia Jungkook susurró algo en el oído de su hijo. — Limpiaras todo ese rancho que tienes como habitación si no quieres que le muestre las fotos de cuando era pequeño.

— No te atreverías.

— Pruebame.

— Mi propia sangre traicionandome, quien lo diría. — Su mamá le dio una última sonrisa a Jungkook antes de dejarlos solos y que Jimin dejara pasar al chico. — ¿Quieres comer?

Jungkook asintió.

— Comeme esta, puto. — Jungkook rodó sus ojos y sonrió cuando la mamá de su novio apareció frente a ellos.

— El almuerzo está listo, Chae no vendrá por que esta con una amiga. Así que solo seremos nosotros. — Y Jimin ahí se arrepintió de invitar a Jungkook.

Jimin y Jungkook se encargaron de poner la mesa mientras que Dami se encargaba de poner los platos con la comida servida. Cuando todo estuvo listo los tres se sentaron a comer.

— ¿Que estás estudiando Jungkook? — El chico miró a Dami con su comisura manchada de salsa, y Jimin como buen novio, se encargó de limpiarlo.

— Diseño gráfico. — Dami alzó sus cejas.

— Eso es genial. — Jungkook asintió dándole la razón. — ¿Cuando conociste a mi pollito?

— Mamá.

— Hace unos meses, específicamente 3. — Jimin comía en silencio pidiéndole a todos los dioses que Jungkook supiera que responder a todas las preguntas que le hacía su madre.

— ¿Y hace cuánto que están juntos?

— Dos semanas. — Jimin le dio una mirada de reojo sonriendole, algo que para Jungkook significó que lo estaba haciendo bien. — Las dos semanas más linda junto a mi bebé.

— Aww pero si eres un amor. No como esta sabandija que no hace un culo en esta casa. — Jimin dio una patada en la pierna de su madre haciendo que esta se quejara. — Es broma, mi bebé me ayuda mucho.

— Claro que si, mami. — Jungkook aguantó si risa y siguió comiendo.

Las preguntas siguieron y Jungkook supo como responder a todas. Jimin sin duda estaba feliz de que no la cagara, después Jungkook tendría su recompensa.

Cuando terminaron de comer ambos chicos se ofrecieron a lavar los trastes mientras que la mamá de Jimin descansaba de su duro día de trabajo.

— Lo hiciste bien. — Dijo Jimin mientras recibía los platos que Jungkook le daba después de lavarlos. — Me sorprende que hayas podido responder todas sus preguntas.

— ¿Me vas a dar algo como premio? — Jimin entendido aquella indirecta.

— ¿Quieres ocupar uno de tus besos? — Jungkook no respondió y solo lo besó. jimin obviamente le correspondió abrazando su cuello y pegándolo más hacia el para profundizar el beso.

(No daré más detalles, un beso es un beso, con lengua, saliva, agarrónes y manoseos)

Cuando ambos se separaron siguieron lavando los trastes con sus mejillas sonrojadas y ambos con una sonrisa.

Sin saber que Dami los había visto y grabado para mostrarle a Chae en lo que su hermoso andaba metido.

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Su mamá también es chismosa?

¿𝘑𝘪𝘮𝘪𝘯 𝘰𝘳 𝘨𝘪𝘳𝘭𝘴?〔 ☁️ 〕// Kookmin AU Donde viven las historias. Descúbrelo ahora