kneel | Tom Riddle

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4|Los Gaunt

-Tom, ¿por qué te ves tan sorprendido?- Seraphina frunció el ceño cuando lo vio leer atentamente las notas que escribió sobre su familia.- Ya sabías que tu padre no era el que poseía magia.- miró alrededor del Gran Comedor, aliviada de que estuvieran casi solos en su período libre.

-Lo sospechaba.- la corrigió mirando el papel.- Así que encontraste a alguien llamado Marvolo y es mi abuelo. ¿Está vivo?

Seraphina se encogió de hombros mirando los nombres que escribió en el pergamino esa mañana.- No estoy segura, pero tu madre tenía un hermano y todos pertenecían a una familia de magos muy antigua, los Gaunt.

Los ojos color avellana de Tom brillaron, no ante la posibilidad de tener una familia, sino ante la idea de tener un linaje poderoso.-Es difícil creer que mi madre fuera una bruja. ¿Por qué moriría dándome a luz, entonces?- Cuando frunció el ceño, Seraphina quiso sonreír por lo humano que se veía en ese momento. Era raro verlo mostrando una expresión genuina.- Eso es demasiado débil para una bruja, ¿no crees?

-Bien, no estoy segura de los detalles, Tom. Pero hay algo más que debes saber.- levantó las cejas y miró su rostro asustado.

-¿Qué?

Seraphina sabía que la información que estaba a punto de darle podría cambiarlo todo, pero él tenía derecho a saber.- La herencia de tu madre y el linaje de los Gaunt están conectados con alguien realmente importante.- la impaciencia estaba escrita en su rostro cuando escuchó lo que ella tuvo que decir.- Salazar Slytherin.

Tom se levantó de la mesa con los ojos muy abiertos. Una vez más, era raro que mostrara algún tipo de emoción, pero la información que acababa de escuchar le hizo perder la cabeza. Seraphina lo vio salir precipitadamente del Gran Comedor, haciéndola hundir la cabeza entre las manos y gemir. Ella podía sentirlo. Se acercaban cosas malas.

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Tom se perdió el resto de las clases ese día, no almorzó ni cenó y Seraphina no pudo evitar preocuparse por él. En el momento en que dejó el Gran Comedor, ella pudo ver algo en sus ojos. Algo que la asustó por lo que Tom tenía en mente.

Pero no estaba segura de lo que estaba pensando y sentía que era su obligación averiguarlo y ayudarlo.

Seraphina nunca entendió realmente por qué siempre estaba al lado de Tom, incluso cuando se dio cuenta de que solo la estaba usando a ella. Pero sintió que era lo correcto. A pesar de todo lo que hace, cuando ella estaba con él se sentía completa. A diferencia de todos los demás, él siempre la entendió, incluso si rara vez mostraba algún tipo de emoción, pero escuchó.

Le debía mucho al chico, pensó. Cualquiera encontraría estúpida su devoción por él, pero a ella no le importaba.

Al salir de la clase de Encantamientos, por fin, no perdió el tiempo yendo hacia la Sala Común, donde esperaba encontrar a Tom. En su camino hacia las mazmorras, encontró a Avery con Rosier.- Oh, princesa, ¿tienes prisa?- Rosier inclinó la cabeza hacia un lado cuando se movió entre los dos niños aristocráticos, por lo que estaba caminando entre los dos.

-¿Has visto a Tom?- ella preguntó.

Negaron con la cabeza.- Si Riddle se esconde, la única persona que podría saber su ubicación serías tú.

Seraphina puso los ojos en blanco cuando Avery habló. Los chicos sabían lo cerca que estaban la chica y su señor, no podía ir inadvertido.- Se perdió sus últimas clases.

-Eso es una sorpresa.- dijo Rosier, obviamente sorprendido de que Riddle se perdiera sus clases, nunca hace eso, ni siquiera cuando el resto de la pandilla abandonó el día de clases para ir a Hogsmeade.- Qué pasó?- preguntó.