;;⚘ ❝𝐌𝐢𝐧𝐚𝐫𝐢❞ ◌ ⁺ ˖˚ Prince Zuko

ᒪIᗷᖇO I: ᗩᘜᑌᗩ

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Era otra mañana en la tripulación del príncipe Zuko, no podía calcular que fueran más de las 9 am por la posición en la que los rayos de sol caían sobre mi rostro, a través de una rendija de la madera.

Me puse de pie con mi pereza habitual de las mañanas, hoy decidí por fin quitarme el vendaje de la herida pues cicatrizó del todo y no había riesgo de que perdiera en brazo o algo parecido.

Me volteé a una pared lejana a mi posición, allí vi mi reflejo con cuidado.

No soy una egocéntrica ni mucho menos, pero suelo cuidar constantemente de mi aspecto físico y gracias a esto me di cuenta que algo en mi había cambiado.

Mi piel era naturalmente bastante pálida, pero la constante exposición al sol hizo que su matiz cambiara a un tono bronceado que realmente se veía bien junto a las pequeñas pecas dispersas por mis mejillas. Había un nuevo brillo en mis ojos, como si se hubieran encendido repentinamente dos pequeñas llamas en ellos. Las espesas pestañas estaban naturalmente inclinadas hacia afuera y me daban un aire felino, deslicé mi vista hasta mis labios deteniendome en ellos para notar como estaban pintados de color coral pese a que llevaba más de un año sin usar maquillaje.

Se veía a sí misma hermosa, y sabía que tenía que aferrarse a su belleza cuanto pudiera.

Era más que una cara bonita, esto no lo dudaba. Fui entrenada para ser letal, usar mi ira para atacar pues quien ataca primero tiene ventaja sobre su enemigo.

Yo no nací para ser señora de nadie, soy una guerrera.

Extrañaba los baños con aceites esenciales, en este barco tenía que conformarme con agua y un pequeño tarro con crema que había comprado en el último puerto. No era el producto más puro pero mi piel lo agradecía.

Pensaba en esto mientras terminaba de cepillar mis dientes con la pasta de mentol y arcilla de no-sé-que-cosa.

Desenredé mis cabellos usando mis dedos para así tratar de recogerlo en una coleta alta, para finalmente ajustarla con el broche que Zuko me había regalado el día de mi cumpleaños, tenía un pequeño león adornando este.

Sonreí con brevedad recordando el momento en que me hallaba apenada por el hecho de que no sabía que hacer mientras la tripulación aparecía con un pastel con enormes cantidades de crema batida.

✦; 𝑭𝒍𝒂𝒔𝒉𝒃𝒂𝒄𝒌

ShaiMin se encontraba leyendo un libro en la mesa que servía de comedor para todos los tripulantes de la embarcación, esperando a que todos abordasen para poder poner en marcha el barco y que así estuvieran mar adentro nuevamente.

Comezaba a aburrirse un poco al frustrarse por la estúpida decisión que había tomado el protagonista del libro, cuando un murmullo se escuchó algo lejos de la cocina, seguido del ruido de un plato rompiendose.

-¡Tengan cuidado, nos va a oír!
-Príncipe Zuko, realmente estaba entretenida en la lectura. Dudo mucho de eso.

La muchacha intrigada esperaba a que la cuenta regresiva que llevaba uno de los soldados del barco terminara. Una vez lo hizo, comenzó a escucharse la típica canción de cumpleaños mientras el tío Iroh llevaba un pastel de tamaño moderado en comparación a los montones y montones de crema batida en su superficie. Pudo ver una carita feliz dibujada con pequeñas cerezas y dieciséis velas acomodadas alrededor de estas.