Boyfriend 💞 Karma Akabane

💞 7

[Museo Nacional de Kyoto]

– Qué bonita fuente...

– Cierto.

– Luego de esto podríamos ir a beber algo a Gion, ¿Qué dices, Presidenta?

– Claro –sonrió Tn.– ¿Asano? –lo miró.

– Es una buena idea –sonrió.

[Gion]

– ¡Nagisa-kun, Sugino-san! –llamó Okuda.– ¿Están bien?

Sugino se sentó con la espalda contra una pared, sujetando su adolorido estómago. Nagisa se incorporó con dificultad.

– Gracias al cielo estás bien, Okuda-san.

– Lo siento. Sólo corrí y me escondí.

– No, hiciste lo correcto –dijo Karma incorporándose.– Esos chicos saben de crimen. Incluso la policía hubiera tenido problemas con ellos. Y como sea... –esbozó una pequeña sonrisa, con malicia y furia.– Me gustaría encargarme personalmente de su ejecución.

– Pero... ¿Cómo los encontraremos?

[Más tarde]

El cielo se tornó anaranjado ya que el sol estaba bajando. Koro-sensei salió de la bodega junto a aquel grupo de seis al cual acaba de rescatar de esos desagradables alumnos de preparatoria.

– Por un momento no supe qué iba a pasar.

– Si hubiéramos sido sólo él y yo, estoy seguro que hubiera funcionado –dijo Karma.

Todos sonrieron, ya aliviados.

– ¡Gracias al cielo! –miró a la pelinegra.– ¿Estás bien, Kanzaki-san?

– Sí, estoy bien.

– ¿Qué pasa, Kanzaki-san?

– ¿Eh?

– Nadie te culparía por nada después de ese terrible evento. Pero parece que la única cosa perturbada es esa duda.

– ¡Es cierto, Koro-sensei! Y gracias –sonrió.

– De nada –rió.– Entonces, ¿Podemos continuar con nuestro viaje escolar?

Los seis comenzaron a caminar, junto a Koro-sensei. Karma sacó su cuchillo anti-profesor y trató de clavárselo a aquel pulpo.

– Oigan, nuestro grupo nunca pudo completar nuestro intento de asesinato.

– N-No era el tiempo ni el lugar.

– Todo está bien. Simplemente intentaremos mañana.

El pulpo profesor rió.

– ¡Espero que puedan hacerlo!

[Hotel]

El grupo entró al hotel, y los ocho se detuvieron en el lobby.

– Quiero ir a descansar –dijo Tn. Se giró, mirando al pelinaranja.– Nos vemos en la cena, Asano, chicos.

– Claro.

– Nos vemos luego.

Asano se dirigió hacia uno de los elevadores junto a sus amigos, para subir a su piso.

Tn comenzó a caminar, junto a sus amigas.

– Vamos, Presidenta. Quiero darme un baño –dijo mientras estiraba los brazos.