FUCKING AND PERFECT ME; mgc #2

― [8] ; ocho

La imagen de Michael furioso observándonos desde mi ventana logró causarme un escalofrío que recorrió mi espalda de punta a punta, haciéndome remover en el asiento.

Ed logró cautivar mi mirada con una sonrisa resplandeciente, logrando sacarme una a mí también. Por algún motivo no lograba reconocer esta faceta de él, se veía más... ¿rebelde? ¿extrovertido? ¿atractivo? Sí, todas las anteriores. Pero era llamativo ya que nunca lo había visto antes así, siempre se veía extremadamente adorable vestido informalmente. Aunque cualquier estilo le quedaba bien, para ser sincera.

—Te ves bellísima —interrumpió mis pensamientos cuando se detuvo en un semáforo en rojo.

—Tú también, te ves estupendo —le respondí con otro cumplido. Para cuándo arranco nuevamente con la luz verde, Lose Yourself de Eminem empezó a sonar por el estéreo y no pude evitar reír, ya que me acordé de todas las veces que con Ashton habíamos dejado nuestros pulmones sin aire intentando cantarla.

—¿Te sabes la letra? —Preguntó, alzando una ceja. Esto me olía a karaoke. Lo vi subirle el volumen y prepararse para comenzar a rapear a la par de la voz de Eminem—. Look, if you had one shot, or one opportunity / To seize everything you ever wanted, one moment / Would you capture it or just let it slip? Yo

—His palms are sweaty, knees weak, arms are heavy / There's vomit on his sweater already, mom's spaghetti / He's nervous, but on the surface he looks calm and ready to drop bombs / But he keeps on forgetting what he wrote down / The whole crowd goes so loud / He opens his mouth, but the words won't come out / He's choking how, everybody's joking now / The clock's run out, time's up, over, bloah! —Comencé a cantar a la par de Ed, mientras nos sonreíamos mutuamente. Esto me recordaba mucho a Ashton, pero no era lo mismo. Seguimos cantando el resto de la canción a puro pulmón, pero no pude evitar perderme viendo la facilidad con la que mi acompañante rapeaba y lo bien que lo hacía, mientras que yo me reía hasta que sentí que mis mejillas comenzaban a doler y entonces me pregunté por qué no podía aferrarme a este tipo de momentos en vez de seguir amargandome por lo pasado con Michael. ¿Por qué no lo olvidaba y comenzaba otra vez? Y este momento no sería nada malo para hacerlo, estaba feliz. ¿Cuantas veces había estado feliz desde que fui arruinada? No muchas, pero esas veces coincidían en un factor: la ausencia de Michael. Me había vuelto tan vulnerable estando con él que ya no podía sentirme segura a su lado porque no sabía si era real, sí él era sincero conmigo. Por otro lado, estando con él me sentía más viva que estando con cualquier otra persona. Así que en este momento me encontraba en algún lugar en medio de sin Michael Cliford y con Michael Clifford pero no sabía cuál era peor.

—Hey, ¿estás bien? —Preguntó Ed, dejando de reírse por el pésimo karaoke que habíamos hecho minutos antes.

—Sí, sí. Últimamente tengo estos profundos pensamientos sobre qué hacer con mi vida demasiado seguido, lo siento.

—¿Puedo darte un consejo acerca de eso? —Pidió permiso, estacionándose frente a su casa en la playa.

—Por favor —accedí.

—No lo hagas. No pienses en dónde esta tu vida, ni a dónde te diriges. Sólo dejate llevar y déjale el resto al destino.

Sonreí. Una sonrisa que decía gracias por mí ya que no quería abrir la boca. ¿Ed tendría razón? Debería comprobarlo.

Luego de unos minutos, llegamos a su casa. Estar nuevamente en este lugar me traía recuerdos. Recuerdos que debía bloquear si de verdad quería empezar de cero. Me concentré en toda la gente que se comenzaba a ver desde el ventanal en la playa. Habían instalado un equipo de DJ y la música resonaba en las paredes. Ed me pasó un brazo por los hombros, llevándome con él hacia la multitud.