FOREVER

✴ 13 ✴

—Sabes que daría la vida por ti sí fuera necesario ¿Verdad?—expreso Min con melancolía y viendo a su príncipe a los ojos.
Ambos estaban en la terraza disfrutando del clima qué a pesar de ser frío y nuboso, era reconfortante.

Saeng lo miró por unos segundos y frunció su ceño. —Yo se que tu amor por mí es Incondicional, y también sé que yo también daría la vida por ti. —dijo tomando asiento en sus piernas y enredando sus brazos en su cuello.
—Pero también sé que todos ustedes andan muy raros. Cada uno me ha expresado lo mismo y eso me ha estado haciendo sentir raro, incluso Yun Ho lo ha hecho y el no es más que un amigo.— expresó mirándolo a los ojos. Necesitaba ver la verdad detrás de esas palabras. —Min, tú jamás me ocultarías algo ¿Cierto? —hablo viendo como Min bajaba la mirada. —Park Jung Min jamás… jamás romperías la promesa que tenemos …¿Verdad?— susurro titubeante ante el nudo que se le formaba en la garganta. No quería pensar que Min pudiera estarle ocultando algo. Pero ver que Min no lo miraba le hacía sentir triste. Y sin dudarlo se alejó de él.

Min al ver que su príncipe se alejaba, se levantó de su asiento y se acercó a él. —Mírame— pidió tomándolo de su cara para que lo viera. —Jamás …te ocultaría algo y lo sabes. —dijo depositando un beso en su nariz y luego lo sostuvo entre sus brazos.

“Saeng Perdóname por favor, pero es por tu bien!” dijo en sus pensamientos, Min.

Min y Saeng estuvieron abrazados por unos minutos. Ambos lo necesitaban desde hace tiempo. Min miro el cielo y luego a la lejanía pudo ver a Zadquiel, quien los observaba con detenimiento. Y luego vio como llego el abuelo Heo, quien resulta que no era más que Rafael, un arcángel que cuidaba a su príncipe desde su nacimiento.

Incluso Zadquiel que también era un arcángel, se sorprendió de saber que Rafael había estado entre los humanos, cuando eso no se les permitía a ellos.

—Es mejor que entremos y comiences a ponerte guapo para tu cena con Hyun.— mencionó Min, mirándolo fijamente.

—¿Cómo sabes que saldré con Hyun?— preguntó con un puchero en los labios.
Min soltó una carcajada. —Bueno, talvez porque Hyun a estado presumiendo sobre eso, según sus palabras quiere que estés relajado para tu evento de mañana.— dijo.

—No puedo creerlo!. Aunque me alegra saber que siempre esta preocupándose por mí.— dijo tímidamente. —Aunque jamás pensé que la semana pasará tan rápido. Solo espero que la exposición fotográfica salga bien.— pronunció mirando a su alrededor. Buscando como siempre a quien lo observaba.

—¿Otra vez?— Min miro a Saeng.

Saeng asintió. Pero aún buscaba con la mirada a ese alguien que le ponía de puntas sus nervios y tranquilidad.

Min al ver que persistía, lo tomo de los hombros y lo llevo para poder entrar o de lo contrario no lo haría.

Cuando estuvieron adentro Heechul se acercó a ellos y le pidió a Saeng que lo siguiera. Él simplemente lo hizo hasta llegar a su oficina y adentrarse en ella. —Saeng, ¿Confías en nosotros?— Heechul pregunto pasando a su lado para tomar asiento.

Saeng no contestó inmediatamente porque no sabía a qué se debía esa pregunta. Al parecer todos habían escogido hacerle preguntas extrañas ese día. —Tal vez la pregunta sería ¿Qué tan honestos han sido conmigo?—declaro mirándolo a los ojos.

Heechul no se espero aquello. Sin duda Saeng y Yun Ho eran hijos de ellos.

—Siempre hemos sido honestos contigo. Cada uno de nosotros daría todo por ti, incluso la vida.— exclamó Heechul con un nudo en la garganta.