Capítulo 7

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Jinyoung debía admitirlo, estaba extremadamente confundido, no sabía por qué había sucedido ese beso, tal vez estaba muy vulnerable en ese momento y por eso terminó besándolo pero la verdadera pregunta era, por qué le había gustado tanto, por qué se había sentido tan bien, tan correcto, tan intoxicante. Seunghun debía ser un muy buen besador como para tener a Jinyoung repitiendo esa sensación una y otra vez en su cabeza.

De algo estaba seguro igualmente, no sentía nada en particular por Seunghun, no era como que le gustara, obviamente Seunghun era atractivo, eso era innegable, pero también era mandón, vengativo y burlón.

Y más importante, Jinyoung no podía evitar sentir esa sensación de que aún tenía oportunidad con Woojin, cada vez que repetía la escena en su cabeza o pensaba en Seunghun, sentía que le estaba fallando a su novio.

Bueno, ex novio, porque Jinyoung tampoco era estúpido, sabía que Woojin estaba enojado pero una parte de él solo podía pensar que lo perdonaría, que cuando volviera del centro a su casa, podrían volver a estar juntos y todo sería como antes. Pero eso no podría pasar si continuaba pensando en Seunghun.

Tomaría eso como un momento de debilidad emocional, le podía pasar a cualquiera. Por lo que no esperaba que fuera Seunghun el que lo estuviera evitando y no al revés.

Por ejemplo, se despertaba temprano a desayunar solo; ya no le asignaba tareas a Jinyoung, el que lo hacía era Byounggon, con la excusa de que ahora Sungbin era responsabilidad completa de Seunghun por lo que no tendría tiempo para más subordinados.

Cuando se lo encontraba en el campo o en los pasillos simplemente desviaba la mirada y ahora incluso parecía que tenía en cuenta los tiempos normales en los que Jinyoung iba a ver a Gordis para no encontrarselo en el establo al ir a montar a Ace.

Realmente hizo todo lo posible por no encontrarse con él, y Jinyoung no iba a mentir, lo lastimaba un poco, sentía esa extraña sensación de rechazo, como si hubiera hecho algo mal, pero ¡Seunghun lo besó de vuelta! Él también tenía sus culpas.

—Es decir, si yo lo hubiera besado y él me hubiera rechazado, simplemente le pediría perdón para que no fuera tan incómodo —le dijo al poni mientras compartían fruta— pero él también me besó, por un largo rato ¿qué le pasa? es un pervertido si me preguntas.

¿Quién le iba a decir a Jinyoung hace unos meses que su única compañía sería un caballo enano y que compartirían fruta?

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La yegua Happy afortunadamente había terminado su parto de forma segura y natural sin ningún tipo de ayuda extra y ahora estaba feliz con su potrillo. Jinyoung la visitaba en las mañanas para darle algunas frutas extra, a ella y a Lluvia, la bebé, bautizada de ese modo por la situación en la que nació.

Jinyoung nunca lo confesaría pero luego de que le dijeron que estaba bien todo, se había sentido infinitamente aliviado, incluso le dió las gracias a Yonghee que lo miró extrañado.

Las semanas transcurrieron normalmente y Jinyoung no lo había notado antes, o tal vez sí pero no le había prestado atención. Byounggon y Seunghun eran muy cercanos, normalmente antes los veía bromeando entre ellos y también riendo de bromas internas, entre otras cosas, pero sentía que últimamente los veía juntos más seguido, o podía ser que antes no prestaba atención.

Durante esa semana sentía que era mucho más frecuente para él verlos juntos. Cada vez que buscaba a Byounggon para hablarle del trabajo, estaba con Seunghun que enseguida lo veía salía a correr.

Los dos a veces montaban caballos juntos y normalmente hacían las compras juntos también. Era muy extraño para Jinyoung que pasara de no darse cuenta a estar completamente enterado de que realmente estaban mucho tiempo juntos.

Aprende del trabajo duro | BAEHUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora