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Niki no fue a trabajar ese día, claro, era fin de semana, se la pasó llamando a Sunoo toda la noche, llamada tras llamada, hora tras hora, todo pasaba tan rápido y lento a la vez, se acababa de enterar que sería padre.

-Entonces fue ese día- en automático pensó en la broma que le hizo a Sunoo. -Voy a ser papá- la prueba de embarazo no se despegó de su lado en ningún momento, Yuna estaba tan ansioso y preocupado por Sunoo como él, lloraba levemente mientras veía la puerta.

El pequeño perro se subió al sofá con algo de esfuerzo y ayuda de Niki, la mascota se acurrucó en el regazo del alfa, para brindarle al menos un poco de confort.

-Tranquilo... siento que está bien, sino, mi lobo lo sabría- y ahí se dio cuenta que no llamó a esas dos personas a la que Sunoo siempre recurría cuando algo malo pasaba.

Jay y Jungwoon.

De inmediato marcó el número del alfa y esperó a que contestara, a los dos timbres fue atendido.

-Jay! Jay, ¿Sunoo está allí? estuve intentando contactarlo toda la madrugada, por favor, dime que est--

-¿Qué fue lo que hiciste?- La voz de Jay era molesta, se percibía aún a través del teléfono. -Llegó aquí poco antes de la una, todo su cuerpo estaba frío, estuvo llorando desde que llegó, ¿Qué fue lo que hiciste que lo dejó tan mal que ni tiene su anillo?

-Está en cinta...

-Eso es muy bueno, pero entonces ¿Qué pasó?

-Antes de que me lo dijera... yo... yo le dije que no quería un cachorro- y antes de que Jay comience a regañarlo volvió a hablar -pero no es que no quiera uno... solo estaba preocupado, asustado, hay muchos omegas que mueren a causa del embarazo, entiende, yo no sabía que estaba en cinta y no quería perder a mi omega.

-Tienes media hora para llegar aquí con la mejor escusa del mundo... rápido, antes de que me arrepienta y no te deje pasar.- y colgó la llamada.

Niki se paró y fue a alistarse, se duchó muy rápidamente, se colocó una camisa, un pantalón y unos zapatos cualquiera antes de salir con Yuna en el asiento trasero de su movilidad.

Yuna era macho, como le compraron ropita y traía vestido una clase de chaleco con cuello de tortuga.

-Espérame- paró frente al centro comercial hablándole a Yuna, tardó 5 minutos y volvió con un ramo de claveles rosas, rojas y rosas blancas, si, era chiché, pero a Sunoo le encantaban esas cosas. -Ahora si, vamos.

Una vez llegaron a la casa de sus amigos se sintió nervioso, estaba con Yuna en sus brazos y un ramo de flores, ¿Qué es lo que diría? agh, no tiene tiempo para pensar, tocaría de una vez por todas.

El timbre de esa casa sonó dos veces, pasaron unos cortos minutos hasta que Jungwoon le abrió la puerta, este al verlo frunció su seño.

-Solo quiero disculparme... si quiere volver a casa hoy, será su decisión- ambos sabían que había venido a ver a Sunoo.

-Si quiere verte bajará... pero no te confundas si no viene- le dejó pasar indicándole que se sienta en el sofá, dejó a Yuna en el suelo, Wonwoo estaba durmiendo en su habitación.

-Esperaré lo necesario- se sentó donde le indicaron y pasaron aproximadamente 30 minutos en los que no se movió de su lugar, le invitaron desayuno ya que eran las 10 de la mañana y no había comido nada.

Pronto sintió las feromonas de su omega, y lo vio bajar las escaleras, se paró y agarró el ramo de flores, aclaró su garganta, eso le recordaba a la primera vez que fue a la casa de sus abuelos, que trataban a Sunoo no como su nieto, sino como su hijo.

-Cariño...- no sabía qué hacer -en verdad lo siento.

Jay y Jungwoon estaban arriba, Jay quería quedarse a ver el drama, pero Jungwoon le obligó a darles privacidad.

-Está bien, no necesito de un alfa para mantener a mi cachorro.

-Pero yo si te necesito a ti... y a nuestro cachorro.- intentó acercarse, pero su omega dio un paso atrás.

-Dijiste que no querías un hijo- tenía tantas ganas de ir y darle un gran abrazo.

-Sé lo que dije... pero eso no es lo que quiero, yo en verdad quiero una familia, pero tengo miedo... viste las noticias conmigo, cada vez mueren mas omegas embarazados a causa del embarazo, no quiero perderte...

-Niki...- entendía eso, si algo pusiera en riesgo a su alfa, también evitaría ponerlo en esa situación -Amor...- rió - al parecer no escuchaste bien, esos son omegas recesivos, yo soy... uno normal, no hay nada de malo con mis feromonas o mi útero, yo soy fuerte.

-Solo no quería arriesgarte- miró el suelo -te traje esto- le ofreció el ramo de flores -en verdad no quise hacerte llorar, pero te prometo que cuidaré bien de nuestra familia.

-Mm... déjame pensarlo- sostuvo el ramo, amaba esa clase de cosas.

-Por favor, no fueron ni 12 horas en las que no supe cómo y dónde estabas y te juro que casi me vuelvo loco- un pequeño ladrido de Yuna se escuchó atrás -ambos nos volveríamos locos- se refería a él y Yuna.

-Yo también lamento haberte empujado y tirado el anillo- jugaba con sus manos.

-No te preocupes, Cariño- sacó la misma cajita de terciopelo negra con el mismo anillo de plata bañado en oro dentro -prometí que cada que te pierdas, yo iría a encontrarte- como si fuera su boda otra vez, colocó el anillo en el dedo anular de su amado.

-¿Vamos a casa?- su sonrisa volvió, su mano se entrelazó con la de su alfa.

-Vamos- reafirmó el agarre.

Se despidieron de sus amigos, Niki se llevó una amenaza de parte de Jungwoon, ya saben, lo normal.

-Seré padre- y ahora que sabía que su omega estaba fuera de peligro todo era felicidad, fueron al parque a pasear a Yuna y comer un helado antes del almuerzo.

-Sip, serás padre- colocó su mano derecha en su vientre.

-¡Seré padre!- es como si toda la emoción acumulada por la preocupación fuera liberada en ese momento -Te amo, te amo mucho- abrazó a su menor levantándolo del suelo sin importar que estén en medio del parque, con Sunoo en sus brazos dio unas vueltas cayendo al verde pasto que estaba bajo ellos.

-Tendremos una familia- Niki hizo que Sunoo caiga en su encima para que no se lastime.

-Te prometo- besó su mejilla - que seré el mejor padre que pueda ser- unió sus frentes.

-No lo puedes malcriar.

-Eh, ¿Cómo que no? sea el género que sea, sea omega, alfa o beta, me encargaré de que no le falte absolutamente nada, si quiere un vestido, lo tendrá, si quiere una pelota, la tendrá.

-Lo vas a malcriar- seguía abrazado a su alfa, pensó que no quería uno, pero solo estaba asustado, un pequeño gran malentendido.

-¿Tienes algún antojo? o ¿Quieres pintar su habitación? tenemos dos habitaciones sobrantes en casa donde solo hay cosas viejas, podemos vaciar cualquiera, la que tu quieras- estaba emocionado - también tenemos que comprar pañales y talco y cremas y--

-Cariño- Sunoo lo cortó -aún faltan nueve meses, vayamos poco a poco.

-¿Ya dije que te amo?

-Muchas veces.

-Es para que no lo olvides.











Cami~


I Want a Baby!- Sunki♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora