ʀᴏsᴀ ʏ ɴᴇɢʀᴏ - 𝑇𝑟𝑢𝑒𝑝𝑙𝑖𝑘

𝟎𝟐🌸

Hace días que Mateo venia con una idea en su cabeza, aun que pensaba que era algo momentáneo, honestamente sentía ganas de hacerlo. Se encontraba con Valentin en el living de su casa, sentados sobre el sillón mientras tomaban mates y hablaban de cosas no tan importantes, pero necesitaba la opinión de su amigo.

-Valen.- Lo miro mientras le pasaba el mate haciéndole entender que siguiera hablando.- Estuve pensando en algo y quiero que me digas que te parece, pero decime la posta.-

-Que vueltero que sos, decime de una vez.- Contesto riéndose.

-Me quiero hacer un tatuaje.- Hablo sin estar completamente seguro.

No sabia de donde venían esas ansias de querer hacer algo distinto, pero por alguna razón quería sentir que esto era algo que dependía de su propio control. Por otro lado su amigo entendía pero al mismo tiempo no, porque Mateo suele ser el "nene bueno" a la vista de sus padres, no era secreto que esto podía traerle algún problema con lo estrictos que suelen ser.

-¿Estas seguro, Teo? Sabes como son tus viejos.- La desconfianza se notaba en su forma de expresarme.

-No importa eso, soy mayor, no necesito su autorización.- Muy en el fondo Mato, necesitaba creerse esas palabras.

-Se que no la necesitas, pero no se, ¿por que tan de repente?- Tenia dudas de un cambio tan drástico viniendo de su amigo.

-Por que estoy cansado de todo esto.- Resaltaba la molestia en su tono de voz.- Mi vida se volvió tan monótona que me cansa, necesito hacerlo por mi, para sentirme libre por una vez.- Respondió realmente agotado de la situación.- Además la vida es una sola y nadie la va a vivir por mi.-

-Esa frase siempre termina mal.- Contesto riéndose mientras comía galletitas.- Esta bien, ¿Cuándo te lo queres hacer?

-¿Hoy?- Hasta la decisión del dia era tan repentina.

-Le mando mensaje a Manu y vamos, ¿Dale?- Eso sorprendió al menor.

-¿Por que a Manuel?- Pregunto jugando con sus manitos.

-Te dije que el abrió un local de tatuajes.- Hablo con obviedad.

-Si, pero...-

-Me dijo que en un rato esta libre, ¿Le digo que si?- Valentin, ya le había mandado mensaje a su hermano, porque sabia que como es Mateo, podía pasar un momento y cambiar de opinión.

-Eh, si, si.- No podía negar que estaba nervioso, en sus planes no estaba que Manuel fuera quien lo tatuara.

-Bueno, anda a bañarte.- Dijo como si fuera lo mas casual del mundo.

-¿Me estas diciendo sucio, gil?- Su amigo trataba de aguantar la risa mientras que recibía golpes sin tanta fuerza en el brazo.

-Si, mugriento.- Termino de soltar una carcajada.

-Me voy a bañar, pero no porque vos me lo digas.- Dijo mientras se levantaba del sillón.

-Apúrate, por que tardas un montón y me voy a cansar.- No era mentira lo mucho que el morocho podía tardar bañándose, era solo un aviso.

-Pelotudo.- contesto mientras caminaba hasta su habitacion.

No le gustaba esa sensación de no saber que le pasa, estaba acostumbrado a tener todo bajo su control y parecía que desde hace un tiempo estaba todo dado vuelta. No era tonto, sabia que desde que Manuel llego, era muy constante verse y que lo pusiera nervioso. Porque el mayor cada que puede le dice cosas que lo hacen ponerse muy rojo, termina por insultarlo como respuesta. Sumándole los constantes "Rosita" que por mas que fingiera molestia, una parte de ese apodo, le encantaba.