Capítulo 29

100 11 0
                                    

Hubo un momento en el que Reborn se quedó quieto al ver a Tsuna, se recordó el día que lo vio hace unos meses atrás peleando de una forma nueva, ahora estaba igual, solo que tenía la oportunidad de hablar con él.

Solo que tendría que darle una lección a su estúpido alumno.

Bianchi que vigilaba de cerca que Tatiana no se acercara tanto a su Reborn, el amor de su vida, apenas se dio cuenta sobre la destrucción que se realizaban, hasta que vio un hombre que voló donde estaba, encontrándose a un hombre que la sonrojo por completo.

Era bastante guapo, tenía un cuerpo robusto con hombros anchos, su camisa azul podía verse algunos de sus músculos, parecía un modelo de revista, su quijada cuadrada y al ver su rostro un poco más se dio cuenta que reconocía a alguien.

-Tsuna. -susurro recordando ese cabello rebelde castaño además de sus ojos avellana, sintió un escalofrió por su espalda.

Bianchi se sorprendió mucho cuando supo que Tsunayoshi había desaparecido aun fue más el hecho que estaba Reborn cerca y fuera el ultimo de verlo, si hubiera sido en otras circunstancias, ya tendrían un lugar donde buscar y sospechar.

Pero durante mucho tiempo sintió frustración de no saber nada de él, hasta luego de unos meses que supo gracias a Gokudera que se había vuelto loco por la desaparición de su jefe, Bianchi podía verlo en las noches que no descansaba y solo lo veía dormir por dos horas para seguir buscando.

Estuvo a la par de Nana para poder consolarla y ver a cada uno de los miembros de su familia preocupados que ella misma sentía que algún momento se quebraría por toda la tensión que se había hecho, solo rezando al cielo con la esperanza que apareciera.

Poco a poco la tensión disminuyo conforme el tiempo y ahora había aparecido una jovencita que se decía ser servidora de Sawada y había sido enviada para reunirlos con él. Luego de mucho tiempo pudo respirar en paz.

Aun cuando supo sobre sus apariciones en diferentes partes del mundo, Bianchi sabía que no habría paz hasta que él apareciera nuevamente en Namimori. Ahora podía descansar en paz, sus piernas flaquearon y la derrumbaron en el suelo.

-Hola. -saludo Tsuna algo alejado de Bianchi al reconocerla, su típico cabello rosa, parecía mucho a las Bianchi del futuro que conoció hace mucho tiempo atrás. El tiempo realizaba de las suyas sin duda alguna.

-Tsuna-ni. -salió Fuuta de la pequeña tienda que estaba cerca de la carretera, estaba comiendo unos bocadillos con los otros niños, se asustó cuando escucho unos ruidos fuertes y al salir pudo reconocer al instante su hermano mayor.

Había pasado muchas cosas cuando su querido hermano, desapareció, la soledad que sintió cuando solo tenía ocho años emergió nuevamente como si nunca se hubiera esfumado. El miedo y la desesperación la conoció a una edad muy temprana por diferentes razones, la principal era su habilidad de dar puestos a cualquier cosa que llamaba la atención de muchos grupos de la mafia que ponían su vida en riesgo y estaban dispuesto de asesinarlo en cualquier momento.

Busco alguien que pudiera protegerlo, nunca se imaginó que sería alguien asustadizo, pero lo ayudo en alguna manera, no solo encontró alguien que pudiera protegerlos, obtuvo una familia a cambio que tuvo sus malos momentos y peligrosos, que pudieron superarlos juntos gracias por tener un líder muy considerado, de una forma independiente vivieron de forma pacífica.

Hasta que desapareció su hermano Tsunayoshi que la brillante familia se desmoronó por completo cada quien había tomado su camino y el solo tuvo que aprender a ser independiente y esforzarse lo mejor para ser un adulto, estudio una y otra vez siendo el mejor para sentir orgulloso a Sawada el día que regresara y en tu interior sabia mejor que nadie que regresaría.

Nuevo Terra (Katekyo Hitman Reborn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora