Epilogo:
Ambos bajaron rápidamente del auto, para entrar de la misma manera al hospital. Hacia media hora que Zayn los había llamado, diciéndoles que Ashley había entrado en trabajo de parto.
Todo había pasado tan rápido. Exactamente 4 meses desde que Justin había desistido de irse a Londres. Exactamente 4 meses que ambos habían decidido comenzar algo, juntos. Y exactamente hacia un mes que ambos habían comenzado la Universidad. Para la dicha de ambos, habían conseguido entrar a la misma Universidad… aunque claro distintas carreras.
Todo era perfecto… bueno no todo. Justin era visto en la Universidad como el hombre más sexy que todas las chicas hubieran visto jamás. ______ era muy conciente de ello, y sus celos no podían quedarse sin saltar y provocar una que otra pelea. Es más en ese preciso momento en el que Zayn había llamado, estaban discutiendo…
Divisaron a una enfermera y se acercaron a ella.
- Una pregunta, ¿La sala de maternidad? – preguntó algo agitada la morena.
- Sigan por aquel pasillo todo derecho – le contestó la mujer. Ambos le dieron las gracias y siguieron corriendo. Ella lo miró de reojo. Aun tenía ganas de decirle unas cuantas cosas más…
Justin la miró de costado, sonrió levemente. Ella era tan terca, no entendía que él solo tenía ojos para ella.
Divisaron a Zayn caminando de aquí para allá. Este se giró a verlos y se acercó a ellos para abrazar a ______.
- Tengo miedo, tengo mucho miedo – le contó él.
- Tranquilo hermano, todo saldrá bien – lo calmó Justin.
- Es que… es que olvidé todo lo que hemos practicado. Y… y creo que voy a desmayarme en cualquier momento – habló nervioso.
- ¿Dónde está Ash? – le preguntó ______.
- Están haciéndole una última ecografía para ver la posición de la bebe – respondió y miró hacia la puerta – Voy a tener que entrar y creo que me esta por dar un ataque de pánico.
- Tranquila, respiremos juntos – dijo el azulino y apoyó una de sus manos sobre el hombro de su amigo. Ambos respiraron como si ellos fueran los que estaban por dar a luz.
- Señor Malik… ya puede pasar – le dijo una mujer ataviada de blanco asomando la cabeza por la puerta. Zayn miró a sus amigos.
- Deséennos suerte – les pidió. Los ojos de ______ se llenaron de lágrimas.
- Mucha suerte – dijo con la voz temblorosa – Y por favor dile a Ashley que la amo y que todo va a estar bien.
- Y que no se preocupe que estaremos aquí hasta que todo termine – agregó Justin.
Zayn sonrió y se armó de fuerza para entrar a la sala. ______ soltó un suspiró y miró a su alrededor, sintiéndose repentinamente nerviosa. Durante todos esos meses había visto crecer el vientre de su amiga, y ahora dentro de algunos minutos vería la cara de su sobrina.
Comenzó a moverse frenéticamente por el pequeño espacio en el que los dos estaban parados. Sin darse cuenta cruzó mirada con su NOVIO, él parecía estar tan tranquilo que eso la perturbó más aun. Tenía esa cara de cínico que ponía siempre cuando ella estaba enojada.
- Ya no me mires – le dijo y cruzó sus brazos sobre su pecho.
- ¿Estas enojada? – preguntó él con una leve sonrisa.
- ¡No, para nada mi vida! – dijo sarcástica – Para nada me molestó que le coquetearas a la chica de la caja registradora del supermercado.
Justin no pudo reprimir una carcajada, que hizo que ______ se pusiera roja del enojo. Levantó su mano y lo golpeó en el brazo.
- Oye, oye – le dijo él y le tomó la mano para luego de un solo tirón acercarla a su cuerpo. Su bello y perfecto rostro le quedó bien cerca – Yo no coqueteé con nadie…
- ¿A no? Pues la rubia teñida esa estaba demasiado sonriente para mi gusto, y no dejaba de mirarte con cara de boba. Solo hacía falta llamar a alguien de mantenimiento para que viniera a limpiar la baba que la arrastrada estaba soltando – exasperó nerviosa.
- ¿Acaso aun no lo has entendido? – preguntó él con tono suave y acomodó un mechón de su cabello que caía desordenadamente por su frente – La única dueña de mi corazón eres tú…
- Mentira – susurró ella bajando la mirada – Por ejemplo, no creo que a ti te agrade la idea de que un baboso me este mirando como si yo fuera un trozo de carne al horno…
- No, porque si eso fuera así tendría que golpearlo – habló él con tono divertido.
- ¿Entonces porque dejas que te miré así? Es más le sonríes, la provocas hablando así con esa voz profunda que…
Ella dejó de hablar al darse cuenta, que inconscientemente ya estaba pensando en eso. Con una sonrisa en los labios Justin se acercó un poco a ella, hasta quedar cerca de su oído.
- Sabes que solo me gusta hablarte a ti de esa forma… mucho más cuando estamos solos – le habló profundamente, con la voz baja y algo rasposa. Ella sintió como un escalofrío le recorría el cuerpo.
Lentamente Justin se alejó de ella para mirarla a los ojos. Tomó su rostro con ambas manos y la sostuvo firma para él, con cuidado se acercó para rozar sus labios…
- ¡La que te faltaba! – exasperó ella haciendo que él se alejara – ¿Ahora me quieres comprar hablándome profundamente al oído? No querido… así no van las cosas. ¿Acaso piensas que con una sonrisita devastadora voy a caer rendida a tus pies? Y además de que…
Justin la cayó besándola rápidamente. ______ intentó protestar pero se vio totalmente afectada por las sensaciones que él le provocaba. El azulino colocó la mano detrás de su pequeña nuca y la acercó más a él.
- Te amo tonta – le susurró agitado soltando levemente sus labios – Eres única para mí… y no hay otra en mi cabeza, ni en mi corazón.
Ella hizo un leve puchero y colocó sus brazos detrás de su cuello, lo miró fijo a los ojos y luego sonrió levemente.
- ¿Me lo juras? – preguntó.
- ¿Acaso tú no escuchas como late mi corazón cada vez que me besas o que me miras de esa manera cautivante, o simplemente cuando dices mi nombre? Soy tuyo ______, total y completamente tuyo – le dijo y volvieron a juntar sus labios. Desde lo lejos ambos escucharon un interminable llanto. Se alejaron y miraron hacia la puerta que estaba frente a ellos.
- ¡Nació! – dijeron los dos al unísono mientras se miraban entre ellos.
______ soltó un par de lágrimas y se abrazó a Justin. Él la apretó con fuerza, mientras escuchaba como aquel sonido de nueva vida se hacía cada vez más fuerte. La puerta se abrió y un transpirado y agitado Zayn los miró bien. Sus ojos color café claros estaban llenos de lágrimas. ______ se acercó a él para abrazarlo.
- Tienen que entrar a verla… es hermosa – les habló él.
La morena de alejó y los tres ingresaron al lugar. Con cuidado se acercaron hasta Ashley. La rubia levantó la cabeza y los miró con una sonrisa dibujaba en el rostro. Justin y ______ dirigieron sus miradas a la pequeña bola rosa que estaba entre los brazos de la blonda.
Soltando un par de lágrimas un agotada Ashley descubrió el rostro de su hija. Era tan pequeña, y tan rosadita que parecía de mentira. ______ se acercó un poco más y tomó la mano de su amiga. Soltó otro par de lágrimas más… eran tan increíble ver aquello. Justin se asomó por detrás y le sonrió a su amiga.
- ¿Quieres cargarla? – le preguntó Ashley.
- No… no lo se – dijo con duda ______.
- Vamos, cárguenla juntos – les dijo Zayn. _______ miró a Justin y él asintió con la cabeza. Con cuidado se inclinó hacia ellas y con mucho más cuidado tomó a la pequeña. Eran tan pequeña que tuvo miedo que se le escapara de las manos. La pequeña se movió un poco y arrugó la pequeña nariz que adornaba su pacifico rostro.
La morena sintió como los brazos de Justin se colocaban a su alrededor y su pecho se apoyaba contra su espalda, para luego ayudarla a sostener a la bebe frente a ellos. Él apoyó su cabeza sobre el hombro de la morena, y la miró, miró fijo a su sobrina. La pequeña hizo un bostezo y luego abrió los ojos. Aun no tenían un color definido, pero su pequeña mirada se posó en ellos. Ambos le sonrieron bobamente.
- Hola pequeña – la saludó ______.
- Bienvenido al mundo mini-teletuvi – le dijo Justin.
Zayn se acercó a Ash y se sentó a su lado para luego besarla cortamente en los labios. Ambos los miraron con la pequeña en brazos y sonrieron. Tenían que decirle como habían decidido llamarla.
- Pueden llamarla Connie – les dijo Ashley. ______ levantó la vista y miró a su mejor amiga. Sus ojos se humedecieron de nuevo.
- ¿Qué? – preguntó la morena.
- Eso, que puedes llamarla por su nombre amiga – dijo con una sonrisa Ash – Connie.
- Connie – susurró ______ mientras bajaba la cabeza hacia la bebe y veía el alma de su madre.__________________
¡Muchas Gracias a las personitas que la leyeron!
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