Capítulo cuarenta.
Justin se escondió un poco detrás de la morena. Ronald iba a matarlo si lo agarraba. Sintió fuego en su pecho ante la vista desnuda de la espalda de ella. A su mente vino todo.
- ¡Voy a matarte maldito ñoño! – rugió Ron y se acercó a la cama.
- ¡ALEJATE RONALD! – le gritó su hermana haciendo que su paso se detuviera.
Ron vio como él estaba detrás de su hermana, y ella casi desnuda sentada sobre él. Su sangre hirvió.
- ¡No la toques! – le advirtió.
El castaño alzó sus manos al aire, para demostrar que no tenía ningún tipo de contacto con ella. Aunque quisiera.
- Ronald, sal y espérame afuera – dijo ella.
- ¡No claro, que no! – dijo Ron.
- ¡Que salgas te digo!
Ronald le gruñó a Justin y comenzó a caminar hacia fuera.
- Tú no te salvas Einstein – le afirmó antes de salir del todo – Tú me las pagas por haberte disfrutado la noche con mi hermana.
- ¡SAL! – le gritó _______ y tiró una almohada para que la puerta se cerrara.
Ronald salió al fin. Ambos suspiraron aliviados.
_______ giró la cabeza para ver al castaño. Sus mejillas se enrojecieron rápidamente.
Él la miró fijo y luego miró sus labios.
Ella sintió como el aire la abandonaba ante aquella profunda y azul mirada. Su cabello estaba excitantemente desordenado. Mordió levemente su labio inferior y luego lo miró a los ojos. Ella estaba media envuelta con las sabanas…
- ¡_______ si no sales ya mismo de ahí, voy a entrar a matarlo y a buscarte! – advirtió desde afuera su hermano.
- Voy…..a ir a calmarlo. Tú….
- Me visto – dijo él rápidamente.
- Eso mismo – dijo ella y se envolvió bien con la sabana, para ponerse de pie y salir de la habitación.
Ronald estaba rojo de la furia y caminaba de aquí para allá, cuando ella salió se giró a verla.
- ¿Qué? – dijo _______.
- Encima tienes el descaro de preguntarme, ¿Qué?
- Ronald, ya no tengo 13 años.
- No, lo se. Pero aun eres una niña. Además ¿Por qué con el ñoño?
- ¡Ese ñoño me hizo pasar la mejor noche de toda mi vida! ¡Estoy completamente segura de que tú ni eres tan bueno como él! – dijo nerviosa pero en voz baja para que el castaño no la escuchara.
Su hermano la miró sin poder creerlo.
- Lo mato – dijo y se acercó a la puerta para entrar.
_______ se puso en su camino y lo miró desafiante.
- No y no. No te metas en esto Ronald. No tienes derecho. Además……solo fue un favor.
- ¿Un favor? – dijo él y la miró – O sea que solo te acostaste con él solo por hacerle el favor…….
- No, no lo entiendes. Él también me hizo el favor a mí. Y no fue solo eso, ¿No te has dado cuenta de que….? – dejó de hablar.
- ¿Qué? – le preguntó su hermano – ¿Estás enamorada de él?
_______ pestañeó varias veces y la sangre volvió a concentrarse en sus mejillas.
- Vete a tu cuarto y no te metas. Él ya se va. Y si le haces algo, jamás en mi vida voy a volver a hablarte – lo amenazó.
Ron la miró con ojos venenosos y rugió por lo bajo.
- ¡ESTA VEZ TE SALVASTE ÑOÑITO! ¡PERO CUANDO ELLA SE DESCUIDE TE ASESINARE! ¿ENTENDISTE? – le gritó desde afuera.
_______ lo empujó un poco para que se fuera de una buena vez. Cuando vio que su hermano entró a su habitación, suspiró levemente y entró al cuarto.
Se quedó quieta al ver como Justin terminaba de abrocharse la camisa. El deseo recorrió su cuerpo y la hizo estremecerse.
El castaño la miró fijo y deseó con todo su ser poder entrar de nuevo a esa cama con ella. Terminó de acomodarse y acomodó su garganta.
Ninguno de los dos dijo nada por varios segundos.
- Lo siento – habló ella – No contaba con que Ronald llegaría.
- Tranquila – dijo él y sonrió por lo bajo – Fue divertido.
Ella rió levemente.
Ahora como seguía todo eso? ¿Qué iba a pasar con ellos?
Lo que pasó, solo pasó porque ambos necesitaban pasar por eso. O eso era lo que ellos querían creer.
- Creo que va a ser mejor que te vayas, antes que el desquiciado de mi hermano quiera entrar a matarte de nuevo.
- Si, creo que va a ser mejor que me vaya por el balcón.
- Está bien – dijo ella y caminó hasta el ventanal para abrirlo.
Justin caminó hasta allí y se giró a verla.
- Mmmm, hablamos……más tarde.
- Ajá – se limitó a decir ella.
Entonces él se acercó un poco para saludarla. ¿Qué debía hacer? ¿Besarla en los labios o simplemente en la mejilla?
Pero ella fue más rápida y se acercó despacio a su mejilla. Depositó sutilmente sus labios cerca de la comisura de su boca. Justin cerró levemente los ojos.
Ella se alejó y él la miró.
El castaño se acercó e hizo exactamente lo mismo que ella. ¡Rayos de verdad era un imbécil!
- Adiós – dijo él antes de salir al balcón.
- Adiós – dijo ella y vio como el bajaba por el árbol.
Cuando ella vio que el castaño llegaba sano y salvo al suelo cerró la puerta y giró para apoyarse en la misma y suspirar. Otra vez sus mejillas tomaron color al darse cuenta de que lo había despedido envuelta en una sabana. Se acercó a la cama y se dejó caer pesadamente en ella, sin dejar de mirar al techo. Se sentía tan bien, tan plena.
Levemente mordió sus labios y al cerrar los ojos cada cosa que vivió ayer vino a ella. Había sido tan dulce la forma en la que él le había hecho el amor. Había sido tan suave y cuidadoso. Se encontró deseándolo de nuevo.
Rápidamente se sentó en la cama y miró el teléfono. Tenía que llamar a su mejor amiga. Lo tomó y marcó lo más rápido que pudo. Sonó una, sonó dos…
- ¿Hola? – la atendió.
- Hola tonta – dijo ella.
- _______, cariño. ¿Dónde estas? – preguntó la castaña – Ayer te estuve llamando pero tu teléfono estaba apagado.
- Estoy en casa – dijo ella y volvió a recostarse en la cama.
Giró hacia su derecha y una almohada estaba allí. Respiró profundamente y el aroma de Justin invadió su cuerpo. Sonrió como si fuera una niña y se abrazó a la almohada.
- ¿Qué pasa? – le preguntó su amiga.
- Nada, ¿Por qué? – dijo ella con tono medio bobo.
- Porque suenas idiota.
- Para nada – le dijo y rió por lo bajo.
- Justin también tenía el teléfono apagado, ¿Estaba contigo?
- Si – dijo la morena mientras volvía a sonreír.
- Dime ya mismo, ¡¿Pasó lo que estoy pensando?!
- ¿Qué estas pensando?
- Que tú y Justin tuvieron una noche de su pasión y de placer – contestó rápidamente ella.
- No Ashley, ¿De que estas hablando? – preguntó haciéndose la tonta.
- ¡¿Cómo que no?! – preguntó sin poder creerlo – ¡Pero si yo hablé contigo _______! ¡Y me tomé la delicadeza de hablar con él también! ¿Vas a decirme que no te dijo nada?
- ¿Tú hablaste con Justin? – dijo la morena soltando la almohada.
- Mmmm, bueno…..si. Hablé con él. Le dije que dejara de hacerse el tonto y te dijera que se moría de ganas de hacerlo contigo. Pero veo que es más lento de lo que parece – dijo ella.
_______ no pudo evitar reír por lo bajo.
- No, no es ningún lento – aclaró.
- _______ ________, dime la verdad.
- Me parece que es claro mi querida amiga. Influenciaste en mí y también en él ¿Cómo crees que terminaríamos?
- Entonces, ¿Si lo hicieron? – preguntó entusiasmada.
- Si – dijo algo tímida.
Escuchó como Ash gritaba y alejó el teléfono de su oreja.
- Y ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Por qué? ¿Cómo? – preguntó desesperada por saber.
- Tranquila – dijo divertida _______ – ¿Qué? No sé. ¿Cuándo? Ayer después del baile. ¿Dónde? Aquí en casa. ¿Por qué? Porque tú tienes la culpa. Y ¿Cómo?......Pues, ¿Cómo va a ser Ashley?
- Me refiero a ¿Cómo te sentiste? ¿Te cuidó? ¿Fue bruto?
La morena sonrió levemente, y sintió un escalofrío bajar por su espalda al recordar su mirada, sus caricias, sus palabras.
- No – dijo por lo bajo – Él no fue bruto, todo lo contrarió. Él……..fue más dulce que yo.
- ¡Te lo dije! – sentencio su amiga – Te dije que no ibas a encontrar alguien mejor que Justin para hacerlo.
- Y si, nadie es como él – musitó.
- Ay, me haces creer que estás enamorada de él – dijo risueña.
- No, no para nada. Solo que…. No sabes – dijo la morena para cambiar de tema – Ronald entró al cuarto cuando estábamos durmiendo.
- ¿Los descubrió? – dijo sin poder creerlo.
- Por poco y golpea a Justin.
- Y no es para menos, se acostó con su hermana.
- Tuvo que irse por el balcón.
- Aaaw, como Romeo que luego de hacerle el amor a su Julieta huye por el balcón.
- Eres exagerada – dijo divertida.
- Y ahora, hablando de mujer a mujer. ¿Lo disfrutaste? – preguntó intrigada.
- Ashley… – se quejó _______. Sabía que ahora venían las preguntas capciosas y detallistas de su amiga.
- Anda _______, dime. Soy tu mejor amiga y tengo el derecho de saber todo lo que pasó. Así que respóndeme ahora mismo.
- Si – dijo por lo bajo la morena.
- Si, ¿Qué? – le dijo la castaña.
- Si lo disfrute – dijo revoleando los ojos. Ashley rió divertida.
- ¿Recuerdas cuando yo te conté la primera vez que lo hice, que hay un momento en el que te sientes abrumada y necesitas que lo haga muchas veces?
_______ no pudo reprimir su risa, haciendo que Ashley también riera.
- Ashley, ambas sabemos como se llama eso – dijo divertida la morena.
- Si, pero su nombre es como muy………crudo.
- Orgasmos, Ashley – dijo _______.
- Es una palabra demasiado……cortante – dijo sin dejar de reír – Dime, ¿Tuviste uno por lo menos?
_______ volvió a estallar en risas. Su amiga no iba poder creerlo. A causa de la risa no puedo hablar. Ashley se tentó por su amiga.
- ¡Dime! – dijo sin dejar de reír.
- No, no tuve uno – dijo cuando al fin logró dejar de reír.
- ¿No tuviste ninguno? – preguntó decepcionada la castaña.
- Tres – dijo _______.
- ¡¿Tres?! – dijo sin poder creerlo Ashley – ¡¿Tuviste tres orgasmos?!
- Ashley, es una palabra demasiado cortante – dijo divertida.
- ¡No puedo creerlo _______! ¿Me estas diciendo que el tranquilo, pasivo y dulce Justin Drew Bieber te hizo tener tres……ya sabes?
La morena rió divertida.
- Si – dijo ella asintiendo.
- _______, dime la verdad – le habló su amiga – ¿Cómo quieres que sigan las cosas entre tú y Justin?
- Y como tiene que seguir. Somos amigos. Lo que pasó fue………lindo, pero lo hicimos porque….ya era hora. Como tú dijiste.
- ¿Estás segura? – preguntó.
- Muy segura.
Justin se dejó caer en su cama pesadamente. Miró fijo al techo y se preguntó si era posible que lo que pasó con _______, solo hubiese sido un sueño. Había llegado a su casa y se había bañado y cambiado.
No, no había sido un sueño. De verdad había pasado, y fue lo mejor que le pasó en la vida. Sonrió y escuchó como la puerta de su habitación se abría. Levantó la cabeza y lo miró.
Su padre, se acercó con cuidado a la cama y se sentó a su lado.
- Me dijo mamá que llegaste hace un rato – le dijo él.
- Si – le dijo y sonrió tontamente – Lamento no haber llamado, para avisar que no vendría a dormir…
- Tranquilo, se porque fue – dijo y sonrió cómplice.
Justin se sentó sobre sus codos y lo miró.
- ¿Cómo lo sabes?
- ¿Acaso crees que no fui joven? – le preguntó y palmeó su hombro – Hijo, yo también tuve mi graduación…
- Ya – dijo Justin sonriendo divertido – No quiero saberlo…
- ¿Cómo se llama? – dijo el Sr. Bieber.
- ¿Quién?
- La chica.
Justin tragó sonoramente. No podía decirle a su padre que… lo había hecho con _______. Eso no sería apropiado, ni de caballero.
- Eso… no tiene importancia – le dije.
- Claro que la tiene, ¿la conozco?
pensó el azulino.
- No, no la conoces – le contestó.
- ¿Te cuidaste, verdad?
- Claro que si.
- Bueno, entonces todo esta bien. Todo está en orden. Y mejor no le digamos nada a mamá. Ya sabes como es, se pondrá insoportable y querrá saber todo – dijo divertido.
- Si, por dios. No le digas nada – le pidió el azulino.
Su padre sonrió y se puso de pie. Caminó hasta la puerta, pero antes de salir se giró a verlo.
- ¡Ah, casi lo olvido hijo! Ya tengo tus pasajes para Londres, te vas dentro de 2 semanas.
Justin se sentó rápidamente en la cama y lo miró fijo.________________________
Faltan 10 capitulos para terminar!!!!
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