Hasta que la suerte nos separe

2: 𝓒𝓪𝓼𝓽𝓲𝓰𝓸

Harry sintió demasiadas emociones al ver a ese precioso ángel ¿Qué debía decir? Harry definitivamente quería hablar con ese ojiazul, Harry NECESITABA hablarle. Harry quedo tan deslumbrado con su belleza que ni si quiera había notado que estaban haciendo contacto visual. Los ojos de el joven bajo se veían mucho más brillantes y azules, eran azules con suaves destellos de amarillo.

-¿Necesitas algo?. Pregunto el bello joven.

-Umm s- si. Tartamudeo, se sentía como el ser humano más tonto y pequeño del mundo. Harry debía hacer algo, rápido ¿Qué se supone debería de decir? -¿Donde esta la biblioteca?- una pregunta muy torpe considerando que Harry estudiaba en ese colegio desde los 9 años.

-¿Te parece un buen lugar para preguntarle a alguien donde esta la biblioteca?- Bromeó el bello hombre
-Umm, no, creo que no.- Harry jamás se había considerado una persona tímida, al contrario normalmente era una persona muy social.

-Me llamo Louis ¿y tú tienes nombre? O ¿te debería llamar rizado tartamudo?.

-Ha-Harry pero mis amigos suelen llamarme Hazza.- había salido mejor que el peor escenario que Harry había imaginado.

-Lindo nombre "Hazza" y bueno respondiendo tu pregunta la biblioteca esta al final del pasillo a la izquierda, al lado del salón de Matemáticas .- Harry asintió y salió del baño. Se dirigió hacia la biblioteca ¿porque lo hacía? Ni siquiera necesitaba algo de ahí. Si no se daba prisa no llegaría al lugar acordado con Niall. Olvido su mochila fuera del baño, regresaría por ella y tendría que correr para llegar a tiempo.

Después de llegar a la biblioteca pasó unos minutos dentro, aprovechó para saludar a la Srita. Williams, una amable mujer que le había tomado bastante aprecio a Harry desde que era un pequeño curioso que siempre resultaba furioso al notar que "Él malo" del cuento parecía el ganador. Después de una corta charla con la Srita. Williams, Harry salió hacía el baño en busca de su mochila.

-No esta. Dijo Harry preocupado. En esa mochila estaban sus libros, pero obviamente eso no era lo que más preocupaba. Había un diario. Su diario, ahí escribía todo lo que sentía y su más profundo secreto. Busco y busco, en los pasillos, incluso logro abrir algunos lockers. No estaba.

-No puede ser, no, no. Harry sentía un gran peso, si esa mochila llegaba a manos equivocadas podría haber consecuencias fatales.

-Entonces no eres tartamudo.- Una voz dulce y familiar. Harry volteó ahí estaba Louis.

-Um- a -Um no, no soy tartamudo pero necesito encontrar mi mochila. La necesito encontrar ya.

-¿Necesitas mi ayuda?

-Si-si por favor. Es una mochila azul cielo y tiene grabado kindness en la bolsa de adelante. Ambos jóvenes buscaron por todo el instituto sin pista alguna.
-Harry, ¿tú mochila es tan importante? Le puedes pedir a algún profesor que te ayude el Lunes.

-Um- es bastante importante pero si ya quieres irte yo seguiré buscando.

-No no, nada de eso, solo que la escuela sola da un poco de miedo ¿No crees?.

- JAJAJAJA. Rió inmediatamente cubrió su boca, su risa era un poco fuerte y eso lo avergonzaba bastante.

-Lo siento no quería reírme pero no pensé que fueras miedoso.

-No lo soy pero vamos, admite que es algo tétrica. Eres nuevo entonces voy a contarte una historia de aquí. Volteó hacia Harry indicándole el piso - Toma asiento y escucha. Harry llevaba años en esa escuela y había 2 opciones el asesino de Tance o el Payaso y La Niña, Harry nunca había creído ninguna de las dos historias.

-Y así es como el payaso acabo con la vida de la niña. Harry ¿escuchaste mi historia? He visto las muchas caras del miedo y créeme lo último que parece es que estás asustado.

-No lo estoy, nunca me han dado miedo ese tipo de historias.- Harry estaba impresionado. Era la primera vez que no tartamudeaba. Eso hizo que soltara una pequeña sonrisa la cual marco sus hoyuelos. Louis miró pero no dijo nada. Esos hoyuelos eran bastante lindos. Harry sentía el tiempo correr. Miro su reloj. 4:30pm definitivamente no tendría tiempo de ir a casa a comer algo.
-Pfff- suspiró Harry -Necesito encontrar mi mochila.- No era solo el diario, esa mochila se la había hecho su abuela antes de fallecer.

-Harry. Dijo Louis dirigiéndose hacia los bellos ojos verdes del rizado.
-Podemos buscar mañana, le puedo pedir ayuda al conserje el nos pu...

-Hola Harry ¿esto es tuyo?. Era Patrick. Solía molestar a la mitad del colegio.

-¿Buscabas esto?- Harry no se metía con nadie. Pero eso realmente no le importaba a Patrick. -Veamos que hay dentro ¿les parece?...libros, cuadernos, libretas- oh- ¿Qué es esto?- Patrick saco la pequeña libreta de cuero enlazada por un listón del mismo material. -¿Leemos? Querido diario. Empiezo a saber quien soy y que me gusta estoy aterrado de que mis padres se enteren y me odien. Pero lo peor que puede pasar es que alguien te encuentre, lo bueno es que esto es entre tu y yo. ¡HARRY ES MARICÓN, HARRY ES MARICÓN! Y supongo que el pequeño es su novio. Patrick tomo a Harry por el cuello del suéter que traía puesto -Supongo que es hora de castigar a Harry como el maricón que es.