1, 2, 3 Harry sentía los golpes en su rostro y su ahora débil cuerpo, intentaba defenderse pero cualquier intento parecía inservible, parecía que Patrick quería acabar con su vida ahí mismo. Tal vez no solo lo parecía Patrick daba golpes fuertes y precisos. Harry se estaba quedando sin aliento.
Louis intento quitar varias veces a Patrick a lo que el respondía quitando a Louis de su espalda y arrojándolo al piso, cuando Louis vió que cualquier intento de alejarlo eran inútiles, decidió pedir ayuda.
-¡AYUDA! ¡ALGUIEN AYUDA POR FAVOR!. Louis gritaba por ayuda pero en ese momento el pequeño pueblo parecía ciudad fantasma. Nadie atendía el pedido de auxilio de Louis.
Después de 30 minutos al parecer Patrick se había aburrido, dedicó una mirada de odio, escupió a Harry y se fue con una desagradable y burlona sonrisa en el rostro. Louis observo al alto joven irse el cual regresó la mirada, se veía soberbio, como si hubiese cometido un acto heroico, estaba a punto de cruzar la calle pero regresó hacia Louis.
-Prepárate para mañana marica. No creas que tu novio es el único en recibir un castigo. Dios detesta a todos los de su tipo que te quede claro.
-Yo no soy gay Patrick, Harry tampoco es mi novio y además tu como sabes lo que Dios odia o no, el ha hablado contigo. Además ¿no se supone que Dios no comete errores?.
-Ugh- Muévete marica.
Patrick cruzo la pequeña avenida. Louis fue hacía donde se encontraba Harry, estaba en el piso se veía demasiado débil, no movía ni un músculo esto preocupaba enormemente a Louis, eso definitivamente no era normal acababan de conocerse.
-Harry, Harry, Hazza por favor dime algo, se que sigues aquí, Harry vamos yo se que estas con-
-Estoy bien tranquilo me duele todo pero aquí estoy. Bueno, encontramos la mochila ¿no?. Harry río suave realmente no se sentía bien pero no podía mostrarse débil ante Louis.
-Al parecer Patrick sirve de algo ¿puedes levantarte? No, no, mejor no te muevas ¿sabes el número de tu casa? Levanta tu cabeza. Louis puso la mochila bajo la cabeza de Harry. -Dame un segundo.- Louis se levanto. Fue al baño por algo de papel mojado para intentar limpiar las heridas de Harry, sus manos temblaban, Louis no se reconocía. No era una persona insensible pero nadie le había preocupaba tanto como ese extraño.
-Traje un poco de papel, no te muevas ¿ok?. Louis limpió con delicadeza el rostro de Harry, era bello, sus ojos eran alegres, un tono verde esmeralda perfecto o al menos así lo percibía Louis.
Harry se quejo un poco al sentir el agua arder entre sus heridas, su mente al parecer estaba en otro universo, se debía preocupar por Niall y el parque o por lo que sus padres le dirían al verlo en tal estado pero el solo veía a ese ángel con ojos más bonitos que el mismísimo cielo. No sabía quien los había creado, que artista había esculpido semejante escultura pero lo agradecía profundamente.
-Creo que deberíamos irnos, cerraran la escuela pronto. Tomó su mano -Vamos te ayudo. Louis logro poner en pie a Harry. -Nos conocemos hace unas horas y ya se tu más profundo secreto, admito que me siento algo culpable.- Dijo el joven de ojos azules mientras caminaba con Harry apoyándose en el. -Vaya y ni siquiera se tu apellido.
-¿No me odias? Logro decir Harry débilmente.
-Por supuesto que no ¿quieres saber un secreto mío? Dijo el joven mientras sentaba a el ojiverde en las escaleras frente el colegio.
-Me parece justo. Harry soltó una sonrisa coqueta.
-Yo también lo soy, no se lo he dicho a nadie por miedo a tener el mismo final que los demás.
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Hasta que la suerte nos separe
FanfictionHarry Styles, típico muchacho gay en 1961. Un trasfondo familiar algo disfuncional pero claro que más da, eran los 60's donde era totalmente aceptado engañar y maltratar a tu esposa ¿Golpear a tus hijos para desquitarte? ¡Claro! Si no, para que otr...