[34] Un hijo

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GyuHin insertó la llave de la casa con sumo cuidado, abrió con lentitud y entró casi que en puntillas, no prendió la luz de la sala de estar, se quitó los zapatos con cuidado y los dejó en el recibidor.

—Tienes tres segundos para explicar porque la tarjeta que te di la pasaste por un tatuador, Kang GyuHin —la chica soltó un grito cuando las voz de su padre sonó a sus espaldas, prendió la luz de la sala de estar y observó a TaeHyun y a BeomGyu frente a ella, con el ceño fruncido.

—Y otros tres segundos para explicar porque llegaste tan tarde —completó el omega moviendo su pié insistentemente.

GyuHin rió nerviosa y empezó a jugar con su cabello.

—U-uh... Me encontré a una amiga y-y fuimos a pasear un rato y se me hizo tarde, papá —contó mirando con una sonrisa nerviosa a GyuHin, TaeHyun se acercó más a su hija y la olió.

—Hueles a alfa, ¿quién es ese? —preguntó con el ceño fruncido.

—U-un amigo, papá —dijo apretando los ojos cuando BeomGyu alzó su camisa, en la parte de su espalda.

—¡Kang GyuHin! —gritó con el ceño fruncido— ¿Acaso pediste permiso para esto? Me haces el favor y te vas a quitar eso, ¡ahora! —BeomGyu señaló el baño y miró a su hija que negó con su cabeza.

—N-no sé quita... Se cae en un tiempo —explicó dándole a entender que era un tatuaje temporal.

—No me importa, te vas a bañar y bajas ya-...

—Pero-...

—¡Pero nada, GyuHin! —la chica soltó un quejido y subió las escaleras resonando sus pasos, dando a entender que estaba molesta.

BeomGyu fue directo a la cocina y vertió agua en una pequeña olla, la empezó a calentar sintiendo la molestia de TaeHyun por la marca.

—Más nunca le vas a dar esa tarjeta, ¿me escuchaste? —dijo cruzando los brazos.

—Yo no se la di, tú no quisiste salir a comprar —señaló bufando cuando TaeHyun le dio la espalda. A los minutos GyuHin bajó con el cabello mojado y el ceño fruncido, BeomGyu dejó el agua tibia en la mesa y buscó un pañuelo, remojó el mismo en el agua y empezó a pasarlo por el tatuaje temporal, que era una flor de loto.

Mientras BeomGyu se dedicaba a eso, TaeHyun miró a su hija.

—¿Quién es ese alfa? —preguntó de brazos cruzados, GyuHin rodó los ojos.

—¡Es un amigo, papá! Nada más —dijo, ignorando que BeomGyu estaba pasando el pañuelo con algo de insistentecia en su espalda.

—Yo no nací ayer, GyuHin. Que sea la última vez que hace esto, no sabes lo preocupados que estábamos, éstas no son horas de llegar y no sé para qué carajos tienes un teléfono que no vas a contestar —regañó TaeHyun con el ceño fruncido— Estás castigada, dame tu teléfono.

—¡Pero papá, ya estoy grande! —se quejó casi que llorando, hacía mucho tiempo que no la castigaban y además que le quitaran su teléfono era algo demasiado grande para ella. TaeHyun gruñó y le dio una mirada severa a la chica que tomó su teléfono y se lo dio a su padre— Sólo es un tatuaje temporal, papás... —murmuró levantándose cuando BeomGyu se lo indicó el tatuaje no se había borrado del todo pero era suficiente como para que la chica no lo mostrase por lo feo que había quedado con el agua caliente.

— A tu habitación, ahora —BeomGyu siquiera miró a su hija que bufó antes de subir a su habitación a dormir, molesta.

El omega ordenó todo en la cocina y miró a TaeHyun que miraba el fondo de pantalla que tenía su hija, el teléfono no tenía patrón de bloqueo, con simplemente deslizar hacia arriba podía ingresar a todo, pero sería un abuso de su parte.

Sweet Sunoo || SooJunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora