Algunos años atrás-¿Ya haz ido por tu traje, amor? -Katya entró a la habitación, viéndose como una aparición. Su melena rubia caía en ondas suaves hasta su espalda. Se había puesto un vestido color rojo, con transparencias en la espalda y pecho, se veía espectacular. Sus labios carmesí llamaron mi atención de inmediato, adora besarla.
-Seras la envidia de todas las otras mujeres. -Me acerque hasta ella y la tomé por la cintura, pegando su cuerpo completamente al mío. -Eres perfecta -, susurro en su oído.
-Ay Julián, tú siemprre tan encantador. -Me dió unas palmaditas en el pecho y se alejo un poco. -Vamos, cámbiate ya querido. No queremos llegar tarde. -Le di una ligera nalgada y ella pego un brinquito pero se siguió hacía el vestidor. - ¿Haz visto que ya estuviera todo listo para la cena? -Me pregunto.
-Sí, de camino para acá pase al restaurante. Me dijeron que ya estaba todo. -Partimos a la universidad.
Cuando llegamos, había hermosas guirnaldas de narcisos blancos adornando la entrada del auditorio de la universidad. El lugar se encontraba con cascadas de tul en oro y beige que caían desde el techo. Todo el auditorio se veía magnífico.
La celebración se llevó acabo, cuando llamaron a Ambrose, no pude sentirme más orgulloso. Katya estaba llorando, él era nuestro orgullo, había trabajado tanto y ahora estábamos aquí. Le otorgaron mención honorífica y su diploma.
Él se acercó hasta donde estábamos nosotros, junto con los padres de dos de sus amigos. Los tres lo habían hecho muy bien.
-Muchachos, muchas felicidades. Estamos orgullosos. -Ambrose abrazo a su madre y yo palmee su espalda.
-Los esperamos para cenar, ¿ya saben que restaurant es? -Preguntó Sarah, la madre de Michael, el mejor amigo de nuestro hijo.
-Sí mamá, iremos en el auto de Ambrose. Así que ahí los veremos.
-No tarden muchachos. Queremos festejar.
-Recuerden que tenemos la fiesta de la facultad después, así que cenamos y nos vamos. -Finalizo mi hijo.
-Bien, bien, pero dejen que pasemos una buena noche con nuestros graduados. - Añadió el padre de Michael.
Todos nos fuimos antes, para que estuviera todo listo y esperar a que llegarán los muchachos. Pero pronto se pasó una hora y no llegaban, de pronto mi celular comenzó a sonar, ya me estaba preparando para regañar a Ambrose, cuando escuché una voz extraña del otro lado.
-¿Señor Dimitri Sardena?
-Sí, soy yo. Disculpe ¿quién habla? -mi corazón se había comenzado a acelerar sin ningún motivo. Todos los que estaban en la mesa me miraban atentos. Katya me hacía señas preguntándome quien era. Yo simplemente negué.
-Señor Sardena, tenemos muy malas noticias.
-¡Hable, que pasa! -Me levanté de la silla y comencé a aflojar mi corbata, que de pronto sentí me estaba asfixiando.
-Señor, siento tener que darle esta noticia. Pero su hijo ha perdido la vida en un accidente automovilístico...
Ahí, justo en ese momento deje de escuchar lo que me estaban diciendo. Me deje caer en el asiento y todo se vio en cámara lenta, como si yo solo fuese un expectador. Katya se levantó de su asiento de inmediato, preguntándome qué me pasaba, pero yo no encontraba mi voz, había olvidado como era hablar. Alguien tomo el teléfono que yo había dejado caer. Sarah y Katya comenzaron a llorar desconsoladas.
Todo paso frente a mí, era como un autómata que solo se movía sin razón. Llegamos a la morgue para ver el cuerpo de Ambrose, pero no nos lo permitieron, dijeron que no había un rostro al cual reconocer. Se habían estrellado contra un trailer que había frenado de repente. Y por la velocidad que ellos llevaban el auto había quedado totalmente bajo la caja del tráiler. En mi desesperación trate de llegar hasta el cuerpo de mi hijo, necesitaba verlo, saber que realmente era él. Quizá se habían equivocado y Ambrose estaba de vacaciones.
![](https://img.wattpad.com/cover/219362291-288-k823756.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Dimitri
RomanceDespués de la partida de Elisa, Dimitri se sume en una profunda depresión. Al pasar de los días se da cuenta de que probablemente no la podrá olvidar, está decidido a encontrarla y luchar por su amor. Pero en el camino encontrará grandes obstáculos...