Peligrosa Obsesión +18

Tonta y sumisa

Point of View: Yui Funami.

Si alguien me viera lo primero que me preguntaría es porque le estoy quitando la ropa a una compañera de la secundaria, es un sentimiento extraño que no tengo con nadie mas que ella y mientras le aplico una loción en sus partes intimas para hacer todo mas fácil, recordare lo que me llevo a esa situación.

Estamos en la edad donde nos descubrimos sexualmente como personas, siempre tuve la curiosidad de que eran esas publicidades lascivas que aparecían en las paginas de Internet a las cuales recurría. Mujeres exhibiendo grandes pechos desnudos era un pequeño incentivo a una gran pagina de contenido sexual o pornografía en esas paginas dedicadas.

Hace días había encontrado una pequeña botella de fragancia a un bajo precio en una tienda de dudosa procedencia, tenia un olor inusual pero no desagradable. Rocié mi departamento un poco para comprobar si podía acostumbrarme y note diferencias claras a un ambientador cualquiera, este se disfrutaba mas.

Sentada en mi escritorio busque esas paginas ya con el ambiente mas relajante y decidí ver el primer vídeo que encontré. Al ver esa promoción en esas paginas pensé que seria algo mas placentero de ver, al contrario era aburrido y monótono escuchar a esa mujer repetir palabras aun concentrándome en sus partes intimas, era aburrido...

Al acostarme a dormir una llamada de una amiga llego a mi buzón de voz, era Sugiura Ayano la vicepresidenta del consejo estudiantil. Mi cuerpo se estremeció al escuchar el sonido de su hablar sin motivo, temblaba mientras temblaba sin dejar de escuchar el comunicado que tenia para darme esa noche.

No podía dejar de escucharla decirme que faltara a clases por algunos problemas con la electricidad, mi respiración aumentaba constantemente y mi oído se derretía del placer solo con su voz encantadora. Al terminar la llamada esa sensación no se quitaba, note que había comenzado a tocarme ahí abajo inconscientemente sin detenerme por mas que quisiera.

Sabia que estaba haciendo algo malo pero no podía detenerme recordando la voz de ella en mi oído, me levante con las piernas temblorosas y mis sabanas estaban algo mojadas de un liquido pegajoso extraño. Como pude llegue a la laptop buscando esas paginas nuevamente, bajaba rápidamente buscando un vídeo que me hiciera olvidar todo, encontrando algo que solo lo empeoraba, una mujer se parecía a Ayano por su cabello y peinado.

Pase no se cuantas horas de la noche viendo el vídeo y tocándome sin parar hasta caer desmayada.

[Sugiura Ayano despertaba confundida por donde estaba, las paredes indicaban que se encontraba en el departamento de una de sus amigas, Yui Funami.

No se podía mover y sus brazos estaban atados a la pared de alguna forma, notando también que no tenia ropa interior...]

-¿D-donde estoy? Mi cuerpo me duele y estoy cansada.

[Era una sensación extraña la que podía sentir ahí abajo, como si algo rosara sus piernas con intensidad y suavidad a la vez. Miro el mechón negro de Yui Funami quien estaba lamiendo sus muslos bajo su uniforme con una mirada lasciva]

-¿Q-que haces? S-suéltame. - [Sugiura Ayano estaba inmóvil sintiéndose cada vez mas cansada como si la lengua de su amiga le drenara la vida]

Ella apretó las piernas instintivamente cerrándome el paso hacia el mas allá, era placentero ser aplastada por esos muslos adictivos. No importaba si me desmayaba, ella era mi éxtasis personal.

-T-tengo miedo...¿Q-que te sucede Funami-san?

Abrí sus piernas con mas fuerzas viendo su rostro un poco temeroso de su primera vez, era lo normal que estuviera así.

-No me sucede nada, solo estoy expresando lo que siento por ti abiertamente.

Me sentía cada vez mas fogosa cuando la beso sin su permiso y me encanta ver esa mirada de confusión que todas tienen, las piernas de la correcta vicepresidenta del consejo estudiantil estaban apretándome con fuerza la cara. No quiero que se detenga nunca.