Blueberry Eyes [HongHwa/Seongjoong] (en Edición)

Blueberry pt. 1

Los minutos avanzaban, el inicio de clases se encontraba cada vez más cerca y ambos ya estaban sentados en sus respectivos asientos.

-dime que si hiciste la tarea esta vez - dijo el mayor de cabellera oscura.

-como crees que lo voy a olvidar... Bueno casi la olvido, así que al menos dame crédito por eso. - le revolvió el cabello al más alto.

-no me despeines, me tomó mucho tiempo hacer este peinado y deja de tratarme como un bebé!

-pero si eres tan lindo con ese rojo en tus mejillas y esos grandes ojos azules.

-deja de mencionar mis ojos, sabes que no me gustan, llaman mucho la atención.

-a mi me encantan, los ojos de Seonghwa son los más hermosos que existen.

-no tanto como los tuyos, HongJoong.

Las miradas de ambos se juntaban con amor, estaban perdidamente enamorados y no era un secreto para sus compañeros de clase.

-ahí viene el maestro! - gritó Kim JongIn, el delegado de clase, quién estaba al tanto de que la relación de sus compañeros debía ser secreta.

Los dos se separaron en seguida y cada uno se dedicó a hacer otra cosa.

El maestro entró y todos se fueron a sus asientos, la clase inició normalmente como todos los días, tratando de esconder su relación del mundo y amandose con la misma intensidad que el primer día.

Con 17 años, ya tenían una relación estable de 3 años y podían decir que eran los mejores años de sus vidas, a pesar de los problemas que aveces tenían y del echo de que tenían que esconderlo del mundo, eran felices juntos.

Park Seonghwa era el típico chico bueno de la escuela, calificaciones perfectas, simpático, amigable, el alumno modelo. Sus padres eran la típica familia religiosa la cual siempre era elogiada por ser perfecta, él amaba a su familia, no lo negaría, pero no le gustaba los comentarios homofobicos que aveces soltaban, sabía la postura de sus padres acerca del tema y por eso no debía dejar que se enteren de su relación con HongJoong.

No debía dejar que se enteren que era gay.

Por el lado contrario estaba Kim HongJoong, el típico "bad boy" de la escuela, el que se metía en problemas y le gustaba vagar siempre, aunque sus notas no eran malas tampoco eran tan altas como las de su novio. No era para nada extraño ver a Kim con muchas personas tras él, ya que era un tipo atractivo en demasía y tenía un ejército de admiradores. Su familia era más abierta de mente, sabían que a HongJoong también le iban los hombres y lo aceptaban, también sabían de su novio y su familia, por eso siempre trataban de ayudarlos a verse en secreto.

Era un tanto cliché esa relación, pero era muy linda de ver y sus compañeros de clase estaban de acuerdo, todos sabían que los dos se amaban, por lo que los ayudaban a esconderlo incluso de los maestros.

Ese día después de clases debían ir a la iglesia, los padres de Seonghwa estarían ahí y habían invitado a ambos para ir a comer después de rezar ya que los padres de Park pensaban que los dos menores eran mejores amigos.

Habían llegado a la iglesia, estaba vacía, al parecer los señores se tardarían un rato más y a ambos no se les ocurrió mejor idea que colarse al confesionario para darse unos cuantos besos.

-HongJoong, ya debemos salir, que pasa si alguien viene y nos ve.

-nadie va a venir, a esta hora siempre este lugar está vacío, ni siquiera el padre está. - volvió a besarlo con intensidad mientras el más alto, quien estaba sentado a orcadas en el regazo de su novio, ya temblaba por los toques que le daba en todo su cuerpo.

-Hong... No me toques así...

-como? - preguntó con una sonrisa ladina, apretando una de sus nalgas y haciendo que su novio suelte un jadeo. - quiero hacerte el amor aquí mismo.

-que? No! Estás loco!

-shhh te van a escuchar. Vamos mi amor, además tu también ya estás duro en esta parte. - una mano se coló entre sus pantalones, apretando el miembro del más alto, quien soltaba leves gemidos.

No pasó mucho tiempo para que ya se encontrarán con algunas prendas en el piso y en medio del acto sexual, el mayor saltando sin control en el miembro del otro mientras luchaba por acallar sus gemidos.

Ambos terminaron corriendose para luego vestirse lo más rápido posible y salir del confesionario como si nada hubiera sucedido.

-que dirían todos si se enteran que al grandioso Park Seonghwa le gusta montarme como un loco.

-o te callas o te golpeo.

El menor de cabellos rubios se rió mientras abrazaba al otro.

-sabes que te amo verdad? Ahora que dios fue testigo de nuestro amor ya puedo casarme contigo? - le dijo HongJoong con una sonrisa.

-ja ja ja, no veo el anillo en mi dedo, así que, no.

-solo me alcanza para comprar uno de dulce.

-no no, yo quiero uno de oro blanco incrustado con zafiros y diamantes.

-eres un idiota Seonghwa.

Se marcharon de ahí cuando los padres del mayor llegaron. 

Pasaron toda la tarde juntos, riendo y dándose uno que otro beso fugaz sin que nadie los viera, así eran los días cuando estaban juntos.

Las noches eran parecidas cuando Seonghwa se quedaba en casa de Hongjoong, noches en las que lo último que querían era dormir y lo que más anelaban era amarse hasta que terminaban rendidos en la cama. 

Siempre tratando de esconder su amor por el otro.

Seonghwa amando cada vez más a Hongjoong y Hongjoong perdiéndose en la mirada azul de Seonghwa.

Este fue el prólogo de mi próxima historia, espero les haya gustado y puedan apoyar este fic también.

❤

-Pinky Unicorn 🎶