Capítulo 10

43 11 3
                                    

✨Editado✨

"Recuerda quién eres R.B"

Silencio. Un tenso silencio se hace en el medio del bosque, lo único que puede oírse es el sonido del viento chocando con los árboles y los suaves sollozos que escapan de la boca de Noreen. Puedo sentir como mi vista comienza a nublarse y mis ojos ya no ven ni sienten lo que sucede a mi alrededor, ya no siento miedo, solo enojo, ya no siento los tres pares de manos apretándome para evitar que escape, solo siento la enorme oleada de algo desconocido, correr por cada parte de mi cuerpo, cada musculo, cada poro, cada vena. Por todos lados.

Ya no veo a las decenas de sombras blancas entre los árboles, ya no veo a Noreen, solo a Elia, ella es a la única que veo y lo único que siento es ira. Ira pura y exclusivamente hacia ella.

Ella despertó lo que, por muchos, muchos años estuvo dormido en el fondo de mi mente. Se atrevió a tocar a Noreen, a mi sobrina, a mi Roja. Se atrevió a tocar lo que amo. Y pagara por eso.

Puedo sentir como mi cuerpo comienza a temblar, pero no es por los nervios ni mucho menos por el miedo, sino por la ira. No puedes temerle a una criatura que tú misma creaste. Ya no más.

De repente, el viento se enfurece y comienza a caer agua del cielo, una enorme tormenta cae justo encima de nosotros, y su fuerza es tanta que hace que mantenerse de pie sea difícil. Y es entonces que puedo ver el miedo es esos oscuros y vacíos ojos; esos ojos que se suponen no deberían tener emoción alguna, me tienen miedo. Y debería tenerlo, ahora, mi cuerpo no es consciente de todo el poder que posee.

Se suponía que ella sería creada para hacer el bien, para alertar a los protectores del pueblo cuando el mal se acercara a Meshlock, se suponía que su propósito aquí era proteger el pueblo cuando nosotros no estuviéramos, pero algo hice mal. Décadas atrás, pensé que su creación sería simple y no dejarla poseer un alma buena fue el peor de los errores, y todo por mi culpa.

En menos de un segundo, Noreen y yo estamos empapadas por la lluvia, debo concentrarme, este cuerpo no tiene la experiencia y no está pudiendo controlar tanto poder.

—Es un honor tenerla aquí, señora mía —dice Elia en tono burlón para ocultar el miedo que comienza a crecer es esos negros ojos, se burla de mi haciendo una desastrosa reverencia.

—Suelta a la niña —repito en un gruñido que reverbera por todo el lugar —. Ahora.

—Aquí la que tiene el cuchillo soy yo, no lo olvide —mueve el cuchillo por el aire, peligrosamente cerca de la mejilla de Noreen, el viento la hace tambalearse un poco.

No dejo pasar el hecho de que comienzo a hablarme de "usted" y es que no puede evitarlo, su naturaleza la obliga a hacerlo cuando esta frente a su creadora, o sea yo. No la Rowan que controló hace varias noches, esa no era su creadora, al menos no por completo, ahora he vuelto. Suelto un suspiro dejando que mi cabeza caiga y los cortos mechones de cabello, para lo que estaba acostumbrada antes, caen en mi rostro dificultándome la vista, me muevo bruscamente para poder ver.

Me mata ver el miedo en los ojos celestes de Noreen, esos que una vez le pertenecieron a mi mejor amiga, su pecho sube y baja por su inestable respiración y no sé cómo lo haré, pero haré que ella salga de aquí, es mi prioridad. Las señales siempre estuvieron allí.

Intento no concentrarme en el delgado hilo de sangre que corre por su pálida mejilla, porque sé que, si lo hago, las cosas van a acabar peor de lo que lo harán justo ahora. Despertar lo que estaba oculto de esta manera no fue una buena decisión.

—Como tú creadora, Elia, te ordeno que nos dejes en paz y que regreses a tu guarida junto con todos tus peones, ahora —digo con voz autoritaria, Elia es solo un títere si su creadora esta frente a ella.

Vuelve a Mi  (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora