El caso de las muñecas

Capítulo 9: Bitácora de muerte

16 de Octubre

Usualmente no suceden cosas muy llamativas aquí, es un pueblo pequeño después de todo, pero ayer pasó algo horrible.

Escuche a mis padres hablar en la sala de estar mientras se supone estaba durmiendo. Me escondí en la parte superior de la escalera, donde la oscuridad me cubría y bajé descalza para que nadie me escuchara. Escuché como mamá le pregunta a papá si es cierto lo que dicen los rumores sobre la muerte de la pequeña Tsubaki. Papá es policía, así que él sabe todo lo que sucede aquí, o casi todo.

Papá le confirmo los rumores a mamá. La niña había sido asesinada, y no solo eso. Encontraron a Tsubaki-chan en un salón vacío de la escuela y le habían cosido los ojos y la boca. Al parecer solo la dejaron de ver por unos veinte minutos. Yo no la ví, y aunque la curiosidad es fuerte, por respeto no lo hice.

Las personas del pueblo dicen que hicieron brujería con ella, magia negra. Dicen que una bruja es la culpable, pero hasta ahora no se sabe de ninguna bruja o brujo. Lo más cercano a esto es la familia que vive en el bosque, aunque todos sabemos que ellos solo son yerbateros, así que dudo que sean culpables.

La verdad es que me cuesta mucho escribir esto, si alguien lee esto lo notará de inmediato, mi mano tiembla así que la letra me sale distorcionada. Solo espero que nadie más muera
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05 de Noviembre

Después de dos semanas desde que Tsubaki-chan murió, pensé que no volvería a suceder, estoy segura que todos lo pensamos, pero pasó otra vez.
Hace una semana se encontró a Sumire-chan en su casa del árbol y en las mismas condiciones que a la niña anterior, con sus ojos y boca cosidos.

La verdad es que fuimos mi amiga Sumiko y yo quienes la encontramos. Estabamos paseando por ahí cuando la mamá de la niña nos pidió ayudar a buscarla. La pobre mujer solo la había perdido de vista media hora más o menos.

A Sumiko se le ocurrió buscar en la casa del árbol, donde no se pudo revisar debido a la condición del cuerpo de la mujer y porque el padre de la niña estaba en el trabajo. Subí primera y la encontre. No hay forma de describir como me sentí en ese momento, recuerdo haber perdido la fuerza de mis piernas, un escalofrío tan fuerte que pensé que el calor no volvería a mi cuerpo. Realmente estaba horrorizada y por lo que ví luego de al fin poder girarme a ver a Sumiko, ella estaba pasando por lo mismo.

Aún tengo pesadillas con esto, a veces repito la escena de cuando encontramos a Sumire-chan, y otras veo a la niña arrastrarse hasta mi, como cadaver.

Sé que a Sumiko también le ha estado afectando, y se ha hecho notorio a través de nuestras calificaciones.

Espero que no vuelva a suceder...
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18 de noviembre

Han pasado tres semanas desde que encontramos Sumire-chan y no ha muerto nadie. Quiero pensar que no va a pasar más nada, pero está presente el sentimiento de que algo va a suceder.

Los niños ya no salen solos, solo los mayores de quince años pueden hacerlo, incluso si las dos niñas fallecidas tenían nueve y diez años. Todos están muy tensos y paranoicos, hasta ahora la policía no tiene ningún culpable, solo a la familia Akimori como sospechosos, los únicos que viven en el bosque. Parecen ser inofensivos, pero se debe admitir que es extraño que no han aparecido desde que Sumire-chan fue asesinada.

Aún siguen mis pesadillas y las de mi amiga, pero intentamos que no nos afecte mucho porque ahora cuidamos de Ritsu-chan, la hermanita de Sumiko, que tiene nueve años. La llebamos con nosotras a todos lados para que pueda salir de la casa, ya que nosotras tenemos diesiseis años. Ahora nos moderamos más en nuestros paseos, además de que ya no vamos al bosque, donde han estado desapareciendo personas.