Daniel y Johnny todavía no se llevan bien, cualquier pequeña diferencia y quieren empezar una pelea haciendo que los niños de sus dojos elijan un bando.
Pero esto cambia cuando Johnny ve una foto de hace años que le hace recordar que no siempre La...
- Papá? Es cierto que ellos nunca cambian?- preguntó Sam a Daniel ayudándolo a acomodar más cosas en sus maletas.
- No Sam, las personas si pueden cambiar, tus amigos lo hicieron, ahora están con nosotros...
- Pero el sensei Lawrence no ha cambiado mucho o si? Digo, ustedes todavía tienen problemas y él era un Cobra Kai...
- Sam - dijo Daniel interrumpiendo a su hija- recuerdas que yo también era Cobra Kai? un tiempo corto pero lo fui.
La menor se quedó callada por un momento, mirando con curiosidad a su padre, ya le había contado la historia de como fue Cobra Kai y la historia de Ali, pero siempre evitaba hablar del bravucón de Lawrence.
- El te hizo la vida imposible...tu mismo lo dijiste papá- dijo Sam preocupada por su padre, estaba segura que había algo en esa historia que no sabía - creo que estaríamos bien sin él, algunos chicos también piensan eso.
- No, Johnny...él ha hecho lo que pudo y yo...
-Papá, estas bien?- ahora Sam es la que interrumpe a su padre al verlo perder la voz tratando de hablar. "Qué le está pasando?, Es por el divorcio?..." pensaba la chica observando como su padre respiraba con pesadez, algo estaba mal y no podía ayudarlo.
- Johnny es bueno Sam, yo me equivoqué desde un inicio y les vendí una historia que no es totalmente cierta- respondió viendo a su hija sintiendo que podrían salir lagrimas de sus ojos.
- Entonces tienes que hacer algo al respecto papá, tal vez después de dejar tus cosas en el dojo- dijo Sam con una ligera sonrisa en el rostro-te quiero papá.
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Johhny regresó a su departamento realmente enojado, azotó la puerta de la camioneta y abrió la puerta con más ganas de irse que de entrar, todo lo que hacía estaba destinado al fracaso, no importaba cuanto se esforzara o sus buenas intenciones, todo iba en contra suya y no lo dejaba ser feliz. La felicidad en su vida se había ido desde el fallecimiento de su madre, se había vuelto todo negro y sin salida, una pequeña luz fue cuando conoció a Miguel y este le demostró gran cariño y confianza, pero ahora LaRusso podría haber arruinado todo eso, otra vez.
Johhny estaba harto de todo esto, se quitó la chaqueta de mezclilla que tenía puesta, y movió su cabello pensando en que hacer, se iría claro, pero que cosas se llevaría en la camioneta?, primero la televisión, la computadora, las cervezas... <toc, toc > no quería abrir, se tomó un tiempo para ignorar lo que había escuchado, pero no pudo.
-Hola Carmen- dijo el rubio con voz cansada y triste.
-Hola Johnny, Miguel me contó lo que pasó en el entrenamiento y... él...quiere saber si estás bien.
- Enserio?- suspiró el rubio viendo como Carmen asentía con la cabeza- bueno...no estoy bien, pensé que hacía lo correcto y ahora, no sé que hacer, supongo que todos los chicos me odian.
-Johnny ellos no te odian, mira - sujetó el brazo del rubio con ternura - todos hemos tenido un pasado del cuál nos lamentamos, pero ese pasado nos recuerda que queremos evitar hacer en el futuro.
-Traté de cambiar mi futuro Carmen, ser buen maestro y ser mejor persona, pero les he fallado a todos- Johnny estaba conteniendo lagrimas, llorar era para nenitas.
- Aún puedes cambiar John, sé que puedes, Miguel también lo sabe - dijo sosteniendo el rostro del rubio con las manos - ellos te necesitan, los chicos y LaRusso igual, todos pasamos por malos momentos, solo haz lo mejor que sabes hacer y pateale el trasero a la vida.
Ambos rieron y se miraron a los ojos por un momento, Carmen le dio un beso en la mejilla, provocando otra sonrisa al rubio , y se fue a su departamento, Johnny logró decir un "gracias" mientras la veía cerrar la puerta aún sonriendo.
Él se quedó un rato respirando y observando el entorno, Carmen tenía razón, los chicos lo necesitaban y no podía abandonarlos, ni siquiera podía dejar a Robby, ya no huiría de sus problemas, sería un badass y saldría victorioso de esto.
No importaría lo que digan mañana en el dojo, y menos que todos estén del lado de LaRusso, él daría lo mejor de si, y vería como Cobra Kai y Kreese serían historia, iba a volver a su departamento pero en eso vio a lo lejos, a un Daniel fuera de sus cinco sentidos acercándose.
- LaRusso que diablos haces aquí? - preguntó molesto el rubio.
- Johnny, yo... - se tambaleó y casi cae al suelo.
-Estas ebrio?- dijo sorprendido Johnny, jamás había visto a LaRusso en esta condición, bueno no tan ebrio.
- Un poco, se acabó la cerveza en el dojo y la que compré después, recordé que tenía que decirte algo, a todos en realidad.
- Creo que ya hablaste demasiado, sabía que eso de unir dojos no iba a funcionar.
-Johnny- dijo Daniel acercándose un poco más al rubio.
- Los pusiste en mi contra!!!- le gritó al pelinegro- Y dividiste a los chicos más de lo que ya estaban, algunos fueron Cobra Kai...
- Lo sé, soy un idiota!!- Daniel interrumpió al rubio, apoyando su cabeza en el pecho de este - lo siento Johnny, no sé que me está pasando.
El pelinegro empezó a llorar desconsoladamente y el rubio lo abrazó, a pesar de lo enojado que estaba no le gustaba nada ver a Daniel de esa forma, LaRusso siempre parecía tener la vida perfecta, siempre tenía felicidad y paz, pero ahora se daba cuenta que no era así y que, como todos, necesitaba ayuda.
- Quieres que te lleve a tu casa?- preguntó Johnny viendo como se estaba tranquilizando poco a poco Daniel.
- No, puedo ir yo solo.
-Jaja, ni de broma...Daniel- el pelinegro volteó a ver a Johnny, había escuchado bien???, lo llamó por su nombre?
- No quiero llegar y estar solo- respondió cortante LaRusso.
- Entonces mi sofá es tu mejor opción - dijo el rubio mientras lo invitaba con la mano a pasar a su departamento.
Daniel se limpió las lagrimas que seguían en su rostro y se acercó a la puerta.
Dato curioso del capitulo: En mi idea original Daniel iba a decir "eres un idiota" y después llorar sobre el pecho de Johnny, pero me pareció que era más estilo de Daniel reconocer que se había equivocado :)
