Daniel había dormido como nunca, abría los ojos para encontrarse con unos ojos azules mirándolo con ternura y una sonrisa se formó en sus labios.
- Buenos días Johnny- decía Larusso tapando su cara roja con las sabanas del rubio.
- Buenos días Daniel - el rubio se sentía como un tonto enamorado otra vez, no podía creer lo que había pasado la noche anterior.
Daniel le había dicho que tenía miedo, y pudo haberlo golpeado para sacarlo de ese trance pero lo había besado, no podía creer que fuera correspondido a pesar de todo lo que han pasado.
Y aún así tenia al pelinegro acostado a su lado, la noche anterior se habían quedado dormidos después de hablar sobre el pasado de Daniel y como conoció al tal Silver, todo era una locura pero no cambiaría nada de ese día, pues pudo ver que su hijo no estaba perdido del todo y que Daniel lo quería.
- Dormiste bien?- preguntó el rubio quitando la sabana para ver que el pelinegro tenía los ojos cerrados pero con una sonrisa de oreja a oreja - Eso es un si.
- Cuánto tiempo dormimos? Debemos ir al dojo - dijo Daniel rompiendo su silencio y sentándose en la cama.
- No sé, pero les dije a los chicos que estaban a cargo hoy - Johnny se levantó de la cama caminando al baño - así que pensé que podíamos salir.
- Salir? - preguntó Daniel sin obtener respuesta - No podemos, debemos quedarnos y estar con ellos...
Daniel caminaba al baño cuando escuchó que el rubio abría la regadera "Rayos, quería entrar al baño" pensaba el pelinegro con miedo de abrir la puerta y ver a Johnny desnudo, le gustaba y no podía mirarlo sin camisa sin que su cuerpo no se alterara, al menos no después de recordar la noche de su primera cita.
-Te vas a tardar mucho Johnny?- preguntaba el pelinegro mientras caminaba en círculos fuera de la puerta.
- Quieres acompañarme? - la voz del rubio sonaba coqueta y burlona al mismo tiempo, Daniel solo sonreía ahí estaba, el Johnny Lawrence que conocía y que tanto había odiado de joven, ahora parecía el ser más atractivo del mundo.
- No, solo quiero ir al baño.
- Ya casi termino, me pasas la toalla que está en el cuarto?
Daniel fue al cuarto viendo el desorden que había, latas de cerveza en una esquina, revistas de karate y palomitas arriba de la mesa de noche, "donde esta la toalla?" veía a todos lados buscando con la mirada la dichosa toalla encontrando ropa por todos lados y más desorden.
- Está en el armario! - gritó el rubio desde el baño viendo que Daniel no había vuelto.
El pelinegro se dirigió al armario y la vio, pero le llamó más la atención una chaqueta roja que le hizo recordar el pasado, Johnny se veía apuesto con ella puesta, recordó la primera vez que se vieron y que pelearon. Aún le molestaba esa actitud superior que tenía el rubio, pero ya no lo odiaba.
- Daniel?- preguntaba Johnny asomando su cabeza del baño -sigues ahí?
- Si- contestó el pelinegro saliendo del cuarto llevando puesta la chaqueta.
- Me gusta como se te ve - dijo el rubio mientras tomaba la toalla y cerraba la puerta, no tardó mucho para abrirla dejando ver su cabello mojado, torso descubierto y la toalla tapando solo la parte baja de él.
Daniel estaba admirando al hombre enfrente de él, se lamió los labios inconscientemente y bajó la mirada por la pena que estaba sintiendo ahora, eran unas ganas intensas de besarlo y perderse en ese cuerpo semi desnudo.
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Send it to the internet- LawRusso
FanfictionDaniel y Johnny todavía no se llevan bien, cualquier pequeña diferencia y quieren empezar una pelea haciendo que los niños de sus dojos elijan un bando. Pero esto cambia cuando Johnny ve una foto de hace años que le hace recordar que no siempre La...