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Niall corría con todas sus fuerzas, no pensaba en sus acciones, sino que en Louis y en Harry. Los dos. Besándose.

Su cuerpo no se cansaba y su mente tampoco. Recordaba perfectamente la escena, y no la creía cierta, o al menos no quería creerla.

- ¡NIALL! –escuchó una voz notoriamente cansada desde atrás.

Corrió con más fuerzas, cruzando las calles sin ver si venía un automóvil. No podía controlarse, sentía mucha adrenalina en sus venas. Toda la gente le miraba extrañado, pero no le importaba, solo quería escapar.

De repente algo impacto en su cuerpo. No sabía que era. Algo pasaba por arriba de él, vio dos delgadas ruedas que luego retrocedieron, impactando en su pecho, gimió de dolor y seguidamente se mordió el labio. Vio como una persona se acercaba mirándole.

- ¿Estás bien? –le preguntó la persona desconocida.

Era una chica que se estaba limpiando las piernas, su calza estaba rota y por ella salía un poco se sangre.

- ¿Ah? –contestó desconcertado.

- ¡NIALL! –gritó otra persona.

Se sentó en el suelo, alguna gente le miraban extrañados. Louis corría a toda velocidad a su dirección, en cuanto llegó, se arrodilló a su lado.

- ¿Estás bien, Ni? –le preguntó.

- Uhm… disculpe, yo solo venía y él se cruzó, yo n-no sabía… -dijo la chica algo desesperada.

Louis asintió.

- No te preocupes. –le sonrió.

- Lo siento. –dijo.

- Puedes irte, yo… me encargaré de él.

- Yo de verdad lo siento, yo… -dijo la chica.

La chica parecía de solo 14 años, Louis comprendió lo asustada que estaba. Ella se fue en su bicicleta y Louis tomó a Niall, quién estaba adolorido, no quería hablarle.

Llegó en varios minutos hasta su auto y lo subió con cuidado.

- Niall, te pudo haber pasado algo peor. Me asustaste. –dijo Louis seriamente.

El rubio solo suspiró y se tocó el pecho, el cual lo tenía fuertemente adolorido. Evitó una mueca y solo esperó hasta que llegaron al departamento. El castaño con rapidez rodeó el auto y le ayudó a bajarse. Una vez en el departamento, Niall se iba a tirar en el sofá, pero Louis le obligó a caminar hasta la cama.

- Quítate la remera, Ni… -le susurró calmadamente, mordiéndose los labios.

Niall obedeció, quitándosela con mucha vergüenza, su rostro colocándose rojo al igual que su cuello. Se podía ver como en su pecho estaba un gran rasmillón de color rojo, salía un poco de sangre de ella, y en su brazo izquierdo estaba el mismo tipo de herida.

El más pequeño se mordió el labio al ver su herida, le dolía demasiado.

Louis mientras tanto caminaba hacia su baño a sacar una botella de alcohol, un algodón, gasa y tela adhesiva. Lo llevó todo con cuidado hasta donde estaba Niall. Llevó la silla de su escritorio hasta un lado de la cama. Luego le echó un poco de alcohol al algodón, bajo la atenta mirada de Niall.

Un pequeño roce bastó para que Niall diera un pequeño gemido de dolor.

- ¡Arg! ¡Me duele! –gritó.

- Niall… -susurró Louis.

Su mano desocupada afirmó la de Niall, apretándola y mirándole. Los dos se sonrojaron y desviaron miradas. Niall miró como el algodón se acercaba a su herida. Maldijo internamente por correr sin pensar, esa bicicleta le había dado duro. Apretó la mano de Louis con demasiada fuerza al sentir el alcohol impactar en su piel, gimió en su garganta y se mordió los labios, sus ojos estaban cerrados.

Vicio [Ziall]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora