Capítulo Trece

919 50 9
                                    

Su cuerpo descansaba sobre el pecho desnudo del chico, sus respiraciones se habían calmado luego de estar erráticas. Él daba caricias a su hombro desnudó mientras miraba por la ventana como la luz de la luna se colaba por esta iluminando ciertas partes de su habitación, sonrió, tenia a la mujer mas maravillosa entre sus brazos. Ninguno había dicho algo luego de hacer el amor, las palabras sobraban, solo con verse o con un gesto demostraban cuanto se querían sin necesidad de decirlo.

¿En qué tanto piensas? ─la castaña lo saco de sus pensamientos haciendo su volteara a verla.

En que me gusta estar así contigo ─ella sonrió.

A mi también ─volvió a colocar su cabeza en el pecho del chico, volviendo a escuchar los latidos calmados de su corazón aquello la calmaba tanto.

Sabes, eh estado pensando algo desde hace días ─ella respondió con un sonido gutural para que el chico continuara ─. Escapemos ─soltó de golpe haciendo que una vez mas ella lo mirase esta vez con el ceño fruncido, creía que su novio le estaba jugando alguna broma, así que río suavemente pero él no lo hizo haciendo que la castaña parara de reír y lo mirara igual que el la miraba a ella, con la mirada seria pero llena de cariño.

─ ¿L-lo dices en serio? ─él asintió y llevó su mano hasta la mejilla de ella dándole una suave caricia─. ¿Y a dónde se supone que iremos?, ¿con qué dinero?.

Lejos, lejos de este pueblo, y por el dinero no te preocupes, tengo algo ahorrado, seremos felices tu y yo, mi Joonie.

Pero pese a tanto amor y cariño, las cosas nunca salen como deberían de ser o fueron planeadas, a veces las promesas se rompen y no porque quien las prometió las rompa, hay circunstancias que impiden dichas promesas, de que todas formas terminan doliendo igual.

Te quiero, JoonHee, te quiero tanto.

Aquellas palabras se quedaron clavadas en su cabeza por varios años, tal vez aquella noche no fue la ultima vez que se las dijo, pero aquella se podría considerar la mas especial para ella, o para ambos.





JoonHee abrió sus ojos, la televisión seguía encendida y Taehyung también había quedado dormido viéndola, sonrió al ver al piel canela dormido en el reposa brazos del sofá.

Había pasado casi un mes desde que ambos se confesaron, han estado conviviendo mucho, salen de vez en cuando a citas, nada lujoso, un par de cafés o un helado en el parque, o noches de película, como ahora, pero la mayoría del tiempo ambos se quedaban dormidos en el sofá, no era nada oficial, mas sin embargo parecían toda una pareja.

A Taehyung pocos días atrás le habían quitado el yeso de su brazo, ya estaba mejor, pero el doctor recomendó que no forzara mucho este.

Pero algo seguía pendiente para JoonHee, todavía no le decía la verdad, aquello la martirizaba día y noche, quitándole el sueño en algunas ocasiones más sin embargo eso no le impedía darle amor al piel canela, le estaba tomando tanto cariño.

La rubia se levantó con cuidado del sofá tratando de no despertar al piel canela que dormía plácidamente, cuando logro su cometido apago la televisión y se dispuso a recoger los platos de comida y chucherías que habían estado comiendo hasta que quedaron en un profundo sueño. JoonHee llevo todo al lavadero empezando a lavar los platos.

─ ¿Puedo ayudarte? ─ella sonrió y unas manos se colaron por su cintura. Taehyung recargo su mentón en el hombro de la chica.

─ Creí que estabas dormido ─dejo de hacer lo que hacia y recostó su cabeza en el pecho de Taehyung.

『 fuck me | K.th』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora