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Narra Misa:
Ya habían pasado los cuatro días en mi estancia en Tokyo para gravar el comercial de la agencia LoP, me encontré con un nuevo modelo de esa agencia llamado Shion.
Flashback:
Ya era el día dos y me encontraba bajando de el taxi al lado de mi manager, ambos sumidos en un silencio incómodo, mientras yo de ves en cuando me quedaba mirando asombrada la gran cantidad de colores y luces que adornaban el lugar.
Al entrar al inminente edificio de la agencia, me encontraba algo nerviosa, pero confiaba en mi profesionalismo. Al entrar muchas personas se me quedaban viendo al asombradas, pero como no hacerlo mi llegada fue de imprevisto, al llegar al Set de grabación se encontraban muchas personas y una gran tela de color verde y objetos para grabar el comercial. En medio de esa tela se encontraba un chico de pelo anaranjado y ojos negruzcos y pequeños, su ropa consistía en un atuendo simple, una camisa color blanco, una chaqueta verde y unos pantalones marrones oscuro, acompañado de unos zapatos negros brillantes.
Tenía estilo.
Pensé, antes de hacer una reverencia para ir al camerino y cambiar mi ropa. Mi vestido me llegaba poco más arriba de mis rodillas con un poco de vuelo haciendo que tenga una forma de princesa, tenia piedreria en el escote y al final del vestido color verde, acompañado de unos zapatos blancos.
Me senté en el tocador que se encontraba ahí esperando a que las maquillistas entran acompañadas de peluqueras y comiencen a arreglarme.
Al terminar todo me miré en el espejo. Me veía muy bien, pero ahora me sentía extraña, tenía un mal presentimiento pero ahora lo único que tenía que hacer es vender ese perfume que había pagado una buena suma de dinero para que estemos ambos juntos en este comercial. Al salir se encontraban todos esperándome, me sentía algo incomoda, los anuncios de esta marca de perfumes suelen ser algo sexuales y extraños algo típico en una marca así.
—¡Muy bien comenzamos! — gritó el director de el anuncio dando comienzo a mi trabajo.
La primera parte era yo acercándome a una puerta con mirada melancólica mientras mi mano se extendía hacia ella. Después de eso el director pidió que nos acercáramos mientras él pasaba mis manos por mis hombros hasta llegar a mis codos, una escena del todo sexual. Después de eso un plano de nuestras manos juntas encima de una cama que se encontraba en una esquina de la pantalla verde. Esto se me hace muy incómodo.
Al terminar el comercial me acerqué rápidamente hacia mi camerino a cambiar mi ropa. Al terminar me deje el maquillaje ya que no tenía ninguna intención de desmaquillarme. Al mirarme me sentía extraña, algo no estaba bien, no ahora.
Salgo de esa habitación para irme lo más rápido que mis tacones me permitían. Al girar en uno de esos pasillos tenebrosos y desolados sentí un apretón suave en mi mano. Me asusté y trate de gritar pero su mano ya se encontraba en mis labios. Sentía el pánico recorrer por cada una de mis venas, tal vez este era mi mal presentimiento.
