Sam desde que era pequeño creció a lado de su mejor amigo Luke, ambos formaron un lazo de amistad irremplazable pero al mismo tiempo con sentimientos encontrados, lo único que los hacia distintos era que Sam era Omega y Luke, un Alfa.
A sus 20 años...
Paso 1 mes después de que Luke se fue, algunos me preguntaron sobre lo que había pasado entre nosotros y para evitarme problemas decidí decir que todo seguía bien entre nosotros.
Aunque en realidad no tuviera idea de cómo estaba nuestra amistad ahora, estaba seguro de que deseaba olvidarme de el y decidí seguir con mi vida, en mi escuela y con mis amigos, aunque sintiera que algo me faltará.
Poco a poco comencé a acostumbrarme a no tener su presencia, a no estar en su casa ya que después de lo que me dijo su padre aquel día, sabía que yo nunca podría estar con el, ni si quiera en mis sueños.
Llegué a salir a comer varias veces con Liz y los demás, y está vez no era la excepción.
— ¿A dónde les gustaría ir a comer chicos? — pregunto Clear
— Vamos a Hims — dijo emocionado Mike
— La vez pasada fuimos a Hims idiota vayamos a otro lugar — habló Jay dándole un pequeño golpe en la cabeza a Mike
Ellos iban muy a su forma y como casi nunca opinaba está vez se me había ocurrido algo — Oigan
— ¿Qué pasa Sam? — todos me voltearon a ver
— ¿Y si vamos a ese restaurante que tiene el pollo relleno de queso al que solíamos ir de chicos? — Cuando éramos niños, solíamos ir los fines de semana a comer ese pollo por qué además de rico era accesible para nosotros
— ¡Oh! Que buena idea Sam — grito Jay
— ¡Si! Yo también quiero regresar a ese lugar
Después de un rato de haber llegado, ordenado y comido todos me miraban extraño mientras seguía comiendo un helado de chocolate
— ¿Pasa algo? — ya habían terminado ellos su comida estando satisfechos
— Nos preguntábamos, ¿Por qué elegiste este lugar? — dijo Clear hablando sincera
— Bueno, solo se me antojo
— También además del pollo veo que se te antojo la sopa, aquella pasta y helado de chocolate — decían mientras veían todos mis trastes "limpios" en la mesa
— Bueno, han sido días agotadores supongo que tenía hambre hoy
Después de un buen día terminé llegando a casa completamente satisfecho, me tiré en la cama y simplemente me quede dormido.
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