4💚

3.1K 216 3
                                    

Corrió. Sus pies se movían frenéticamente, sin parar, en una aceleración constante. Corrió lo más rápido que podía, volteando su rostro para todos lados. No estaba ni ahí, ni por allá. No lo encontraba en ningún lugar. Paró y posó sus manos sobre sus rodillas, tratando de descansar, intentando que el aire regresara a sus pulmones.

¿A dónde había ido?

Estaba a casi nada de tener un ataque de pánico. Su ansiedad de separación había crecido con el tiempo que pasó junto a él. Y era malo, era muy malo. Cerró fuertemente los ojos, y tapo con sus dos manos sus oídos. Trató de ordenar sus pensamientos. Pero le era algo imposible.

Suspiró cansinamente, y siguió corriendo. Esta vez trató de ir más rápido, pues tenía que encontrarle. Lo más antes posible. Vio los ventanales de la cafetería en donde siempre compraban café, tampoco estaba ahí. Se dio la vuelta, y siguió corriendo. Sus pies nunca se volvieron a detener hasta que lo vio, lejos, junto a otra persona. Frunció el entrecejo.

¿Por qué estaba ahí?

Caminó despacio hacia donde él estaba, sus pies temerosos de su destino incierto. No sabía que estaba pasando. La única cosa que le hacía sentir mejor, era que ahora sabía dónde estaba.

Al acercarse pudo escuchar con más claridad la conversación. Tratando de entender que era lo que decían, pues él se veía inmutable, pero la otra persona tenía un semblante burlesco, sonrisas egocéntricas, y eso no le gustaba. Todo empezaba a parecer pura mierda.

-Eres un inútil, nadie te va a querer así-. Río.

-¿Te afecta?-. Preguntó, sin inmutarse.

-No, pero mírate, eres una vergüenza para todo. No sé ni siquiera como la gente te soporta-. Sonrió-. Soy mil veces mejor que tu-.

-Okay...¿Te afecta?-. Volvió a preguntar, con rostro serio.

Yibo se acercó a paso lento, colocándose al lado de Zhan, viendo con suspicacia al chico enfrente de él. Zhan vio de reojo de quien se trataba, y su rostro se endureció. No quería que él viera esto.

-Yibo...esperame en otro lugar-. Susurró.

-Pero el te está diciendo cosas malas-. Frunció el ceño.

-No tienen importancia-. Sonrió-. Vete, esperame allá-. Señaló un lugar alejado.

-Hey, inútil, porque no dejas que esta escoria escuche lo vergonzoso y estúpido que eres-. Soltó una carcajada.

El rostro de Zhan que se mantuvo serio todo el tiempo, ahora se veía enfurecido. Tomó aire e hizo sus manos un puño.

-A mi me puedes ofender todo lo que quieras, pero no a él-. Sus ojos mostraban toda la furia contenida que estaba sintiendo.

-Zhan-ge, no importa, vamonos-. Tomo su antebrazo, tratando de tranquilizarlo.

-Sueltame-. Demandó, pero Yibo no lo soltó-. ¡Sueltame!-. Gritó enojado, Yibo se asustó por tan repentino acto, por lo que dio dos pasos atrás, alejándose de Zhan.

-Ja, no te importa lo que te digan a ti...¿Pero si ofendo a esta...cosa-. Dijo refiriéndose a Yibo-.... Te pones como la gran chingada-. Sonrió socarronamente.

-A mi me puedes decir cualquier mierda, pero a él no. Es simple, no creo que sea tan difícil de comprender-. Habló, Yibo volvió a tomar su mano, sabía que Zhan podía hacer cualquier cosa con tal de defenderlo. Pero no quería que su reputación se manchara debido a algo tan estúpido.

-Déjenlo ahí, Zhan, vamonos-. Yibo murmuró por lo bajo.

-Cállate maldito, no es contigo-. Respondió el chico.

Xiao Zhan dejó salir toda la furia que estaba soportando, haciendo su mano un puño y dirigiendolo a la mejilla del chico que había estado insultandolos. Yibo al ver la acción hecha toma la muñeca de Zhan y con fuerza lo hace colocarse atrás suyo.

-Zhan, escúchame. No vale la pena, vamonos-. Dice desesperado, también nota como el otro chico se levanta recuperándose de el golpe, por lo que Yibo se da la vuelta y lo ve cara a cara.

-Hijo de puta-. Susurra, acercándose a Xiao Zhan, pero Yibo no lo permitió.

-Déjalo-. Lo retó.

-Quítate, no es contigo-. Hizo su mano un puño preparado para lanzarlo a Zhan.

-Déjalo-. Repitió.

-¿O qué?-. Por fin accedió.

-¿Quieres terminar en el hospital? ¿No crees que eso sería lamentable?-. Sus ojos que antes parecían ansiosos, ahora desbordaban enojo.

-Cállate, el único lamentable aquí es él-. Señaló a Zhan.

-Bueno, por lo menos el tiene una vida, deberías empezar a considerar hacerte comediante, capaz así haces dinero para vivir-. Sonrió, el otro chico enfureció e intento darle un golpe a Yibo, pero Zhan agarró su muñeca antes de que el puño impactará en el rostro del menor.

-Vete mierda, nada de esto te imcumbe-. Dijo con voz grave Xiao Zhan, torciendo con fuerza su brazo.

-Y-ya-. Hizo una mueca de dolor-. Lo siento ¡lo siento! ¿Okay? No fue m-mi intención-. Dijo quejándose del dolor.

-¿ahora si? Vete a la mierda Zhong-. Escupió enojado, empujándolo, al momento de soltarlo Zhong salió corriendo de ahí.

Zhan aún tenía su mirada fija en el chico que huía de ese lugar. Se había enfadado, Yibo lo sabía, se notaba. Pero no quizo acercarse, tan solo tomó su mano y lo guió al auto. En silencio. Completo y sepulcral silencio.

Wang Yibo no sabía porque su pareja se había enfadado de esa forma. Otras veces que haters o gente que se creía su fan le insultaban, tan solo ignoraba esas cosas. Pero esta vez fue distinto. Zhong era en su tiempo, un gran amigo de Xiao Zhan, ¿por qué llegaron a pelearse de esa forma?

-Zhan-. Susurro Yibo, ya estando en el auto.

-Silencio-. Habló, con notoria furia en su voz.

-No, escúchame-. Volteo su vista al chico de su lado.

Zhan suspiró, y centró sus ojos en el castaño, que tomó las manos ajenas entre las de él.

-entiendo que te enfades, pero Zhong...el era tu amigo, ¿por qué estaban hablando mal el uno del otro?-. Acarició con su pulgar la mano de Zhan.

-El...hace tiempo habló sobre ti, pero...era de una forma asquerosa, ya sabes-. Rio irónicamente-. Que te quería follar-. Murmuró esas palabras, al mismo tiempo que bajaba su vista-. Y como ya me conoces, no sería yo mismo si no le diera una buena golpiza-.

-Hey, sabes que no me importa lo que la gente quiera hacer conmigo, de todos modos, ¿a quién no he mandado a la mierda por esas cosas?-. Tomo su mejilla entre sus manos.

-Es cierto, pero...fue asqueroso-. Cerró sus ojos disfrutando de la suave caricia.

Yibo sonrió, no le gustaba que su novio se enfadara por cosas como esas, cuando el mismo podía arreglarlas. Pero le gustaba el sentimiento de tener a alguien que se preocupe de esa forma por el, que lo ame incondicionalmente, y que siempre lo respete sea donde sea que esté. Zhan siempre lo ha amado, y Yibo siempre ha amado a Zhan. Y eso nunca cambiaría.



A Week With YiZhan/Wangxian Donde viven las historias. Descúbrelo ahora