Somos Primos

No entiendo

Repetimos historias, nada nuevo. 

Después de aquel ataque de pasión llegamos a casa, estaba bastante agotada por nuestra previa acción – nena ¿quieres comer? – realmente moría de hambre y ni siquiera lo había notado – Si amor-

- ¿Ash tienes la píldora? – diablos había olvidado la vendita píldora. Desde nuestra primera vez Kev se ha preocupado por evitar todo tipo de embarazó indeseado – no Kev, pero ahora voy a la farmacia-

- Nada de eso nena, voy yo, si quieres recuéstate, estas agotada, iré por la pastilla y ¿quieres una hamburguesa? – Kev siempre es muy atento y sabe lo que me gusta, me conoce totalmente – si mi niño –

- ¿sabías que amo que me digas así? – me tomo de las caderas pegándome a su cuerpo, quedando frente a frente – no sabía - -pues me encanta que me digas eso – dejo un pequeño beso en mis labios y luego tomo sus llaves para ir a comprar las cosas.

Decidí ordenar un poco la casa, puse música y comencé a bailar mientras hacia algunos deberes, note que Kev dejo su celular en la mesa del comedor y por alguna extraña razón no paraban de llegarle mensajes y eran de ¿Jean? No quería ser entrometida, pero pude ver que Jean amenazaba a Kev con decir la verdad, pero ¿la verdad de qué? No entendía nada y no quería preguntarle a kev pues pensaría que soy una chismosa y que no confió en él, solo espero que no sea nada malo.

Sigo haciendo mis deberes cuando siento unas manos en mi cadera - ¿sabes lo linda que te ves bailando? – amo cada uno de esos pequeño detalles - ¿te gusta? –

-me encanta- me dio un largo beso y comenzó a descender por mi cuello – ni sueñes, quiero comer- lo amo, pero mi comida va primero; después de comer ambos comenzamos hacer deberes del instituto –Nena ya terminé –

- yo igual, bueno me falta una lectura, pero solo eso-

- vamos a nadar ¿sí? – era imposible negarme a su petición, se ve muy lindo cuando pone cara de inocente – está bien, me cambio y voy – tome un bañador negro y blanco de dos piezas y baje, antes de ir afuera decidí ir por algo de beber y tome un poco de jugo y salí – ¿amor no quieres nada de tomar? – cuando kev me vio no dijo nada, solo salió de la piscina y se dirigió a mí – te ves más que hermosa – sus manos se colocaron en mi cintura – pero ya me habías visto –

- siempre es un placer ver lo hermosa que estas- antes de que pudiera responder eso me levanto y me tiro a la piscina – ¡¡Kev!! –

-mm sí, mojada te ves aún mejor- comenzó a reír y se tiro a la piscina salpicándome – ¿ya terminaste de mojarme? -

- sí, creo que si – nadamos un buen rato, el tiempo a su lado pasa tan rápido; antes de dormir nos dimos una ducha y nos acostamos, estaba por dormirme cuando sentí que kev me presionaba contra su cuerpo y comenzaba hacerme cariños – Te amo nena, eres lo mejor que me paso, por favor no me dejes al enterarte de todo- no entendía nada y no intente ni entenderlo, el sueño me mataba.