ᴏᴛʀᴏ ᴅᴇꜱᴀꜱᴛʀᴇ: ᴠᴀᴍᴏꜱ ᴅᴇ ɴᴜᴇᴠᴏ | ꜱᴛʀᴀʏ ᴋɪᴅꜱ ²

◤capítulo seis◢

― ¡Estoy harta!

Gritó Youngmi alejándose de Dylan.

― ¿Y qué quieres hacer ahora? ―pregunto mirándole frustrada por todo lo que sucedía.

―No podemos seguir callándonos, hay que decirles a nuestros padres que somos novios. ―el pelirrubio trago en seco al escuchar aquellas palabras.

― ¿Estás segura? ―ella asintió.

―Creo que nunca he estado tan segura en mi vida. ―camino de nuevo hasta su novio para mirarle mejor―. Y lo que explote que lo haga. ―finalizo.

―De acuerdo, va siendo hora. ―la chica sonrió agradeciendo la misma postura.

Este fin de semana seria la fiesta de Youngmi, muchos estarían invitados, Hyunjin se encargó de hacerle, una vez más, una fiesta en grande como la princesa de papá que es como dice él.

Estuvieron un rato más hablando y quedaron en que lo dirían primero a sus respectivas madres para que el peso sea un poco menos. Estaban más preocupados por sus padres que por sus madres. Comienzan a considerar las opciones de reacciones que se han venido a sus cabezas así que prefieren tratar de prevenir algo grande.

Pero estaban conscientes de que con su relación hecha pública haría también publica la razón por la cual sus padres habían reaccionado de forma singular a lo que Jisung había dicho. No se les olvidaba y no se les olvidaría, querían saber la verdad, la razón.

Solo que no estaban conscientes de las sorpresas.

Al caer la noche y estar cenando en familia, los Hwang estaban cenando de manera tranquila y silenciosa después de haber platicado sobre sus días en el trabajo y escuela. Jay soltó un estornudo muy tierno y ___ sonrió mirando a su bebé, Youngmi carraspeo su garganta para atraer la atención de sus padres.

― ¿Pasa algo cariño? ―la joven negó a medias.

―No es nada delicado papá, todo está bien en realidad, solo quería saber si ya le has dado la invitación a mi tío Chan. ―las dos mujeres miraron al castaño quien se hizo pequeño en su lugar.

― ¿No se la has dado? ―él negó―, ¿y por qué?

―Lo he olvidado, mañana se la doy. ―se excusó.

―No te preocupes, de todas formas, ya le dije a Dylan y vendrán pasado mañana a mi fiesta. ―eso no le había caído nada bien a Hyunjin, pero supo disimularlo.

Terminando la cena Hyunjin decidió irse a jugar con sus mellizos a su habitación mientras Youngmi ayudaba a ___ con los platos de la cena. Las dos mujeres estaban calladas, lo único que se escuchaba era el chorro del agua caer y los platos de porcelana chocar de igual manera al momento de acomodarlos.

Todo iba normal, como siempre, hasta que Youngmi decidió romper el silencio.

―Mamá. ―cerro la llave del fregadero y miro a su hija.

― ¿Qué te pasa? ―una madre conoce muy bien las miradas que los hijos dan y ella sabía que algo le pasaba.

―Es que hay algo que te quiero decir. ―trago saliva y se dejó caer en una de las sillas del comedor.

―No te detengas, me estas asustando, ¿qué paso? ―tomo asiento a lado suyo para mirarla, estaba comenzando a preocuparse.

―Es que Dylan y yo es-... ―no termino de decirlo por la interrupción que Hyunjin dio al gritar desde arriba.

Su trabajo en esa hora era enseñar a Jay a ir al baño porque era un remilgoso para dejar el pañal a pesar de ya tener año y medio, no avisaba a tiempo cuando quería hacer del baño y Hyunjin tenía problemas en ello ya que debía enseñarle a hacerlo correctamente.

Y es por eso que nuestro dramático gritó, Jay se había batido por completo al no avisar a tiempo ¿y adivinen quien olvido ponerle el pañalito al bebé? Sí exacto, Hyunjin.

―Iré a ayudar a tu padre, mañana me cuentas, ve con Yeonhee por favor. ―acomodo la silla y subió casi corriendo al baño seguida de Youngmi quien agradeció al de arriba por haberle salvado.

[···]

―Mamá, debo decirte algo. ―Sana le miro preocupada, le pidió a su hijo que se sentara y este tomo asiento después de su madre.

―No me asustes cariño, ¿qué sucede? ―el joven pelirrubio miro por unos cortos segundos a Sana antes de hablar.

―Tengo novia. ―la chica se sorprendió al escuchar eso.

Definitivamente no creía que su bebé había crecido tan rápido. Parecía que fue ayer cuando le cambiaba los pañales, pero ya saben cómo son las madres de sentimentales cuando se llega a esa edad.

―Cariño que feliz me siento, ¿quién es la afortunada joven? ―y esa era la pregunta que le daba cosa contestar a Dylan―, ¿la conocemos? ―él asintió―, ¿es acaso Youngmi?

Miro a Sana sorprendido, no esperaba que ese nombre fuera la primera opción de su mamá. Pero ya tenemos que saber que las madres tienen un sexto sentido que les hace darse cuenta de absolutamente todo. Parecen brujas que tienen conexiones con el más allá, pero mucho más allá porque en serio que a veces asustan.

En fin, ya volvamos a la historia.

― ¿Cómo sabes que es ella? ―le sonrió cálidamente tomando sus manos, Sana guardaba la ternura para su copito de nieve, como le decía.

―Eres muy obvio Dylan, eres igual que Chris, él tampoco sabe disimular sus sentimientos para conmigo, era pésimo en eso en el pasado, ―rio bajito al recordarle―, por eso es que Hyu-... ―se interrumpió a sí misma.

― ¿Ibas a mencionar a mi tío Hyunjin? ―ella negó varias veces―, mamá, ¿hay algo que no sepamos?

―A su debido tiempo. ―con esa contestación se retiró no sin antes felicitar una vez más a su hijo.

Ahora él también comprobaba que Sana sabía y debía obtener esa información. Tenía teorías e ideas, pero no diría nada para no meter la pata, necesitaba estar seguro que lo que sospechaba era verdad.