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Cuando te encuentras en real estado de peligro, dicen que tú cerebro da marcha atrás. No es el presente lo que vives, sino los eventos anteriores a lo ocurrido. Cuando te cortas un dedo, sueles pensar en eso que hacías antes de herirte; es alguna clase de método de supervivencia que te mantiene alejado del peligro, lesión, o trauma que sufriste.

Grito. Golpe. Caída. Sangre.

Moonbyul cayó con la rodilla derecha al suelo, y se reincorporo inmediatamente, corriendo hacia su agresor. Los empolvados pasillos del edificio parecían una pista de atletismo, dónde solo se escuchaban los jadeos, los pasos acelerados, y los goteos de la sangre caer al suelo.

Era una escena graciosamente similar a uno de sus grandes recuerdos de la adolescencia; cuando hacía sus pruebas de atletismo, mientras en las gradas una muy joven Wheein agitaba la mano para saludarla y hacerse ver.

Luego todo paso a negro. Sus piernas temblaron y fallaron, y cayó con ambas palmas apoyadas al suelo, descubriendo entonces como el origen del goteo sanguinolento era su propio abdomen.

24 horas antes

Busan.
Moonbyul salió del su asiento, sobándose la nuca y estirando la espalda; el viaje no había sido tan largo como esperaba, pero no había dormido lo suficientemente bien... O comido... O siquiera descansado lo suficiente durante el viaje, ya que se negó a ser relevada por Yongsun en todo momento.

-Aun me queda te por aquí -Menciono Hyejin saliendo del auto
-Yo quiero -Yongsun estiró el brazo y le saco la botella de la mano
-Sabes que tendremos que detenernos para que vayas al baño pronto si lo bebes todo
-No nos detendremos, puede orinar en la botella si quiere- Le dijo Moonbyul viéndola con una sonrisa sobre el hombro
-Bueno, nos quedan 30 minutos de trayecto, es poco
-¿Tienen los números de emergencia del área?
-Los tenemos, pero ante la mínima señal de la policía, se irán, y ya no sabremos hacia donde, debemos ir con cuidado
-Acorrarlarlos en el mismo lugar en que estén, luego llamar a la policía -Sugirio Hyejin
-Suponiendo que lleguen a tiempo, claro- Agrego Yongsun
-Supongo que usar la violencia no es una opción -Propuso la menor
-Pff... La más alta de nosotras, o sea yo, mide 1.63. Seguramente todos ellos sean más grandes, ese no es nuestro fuerte -Le respondió Moonbyul -Pero podemos intentar negociar
-¿Con que?
-Dejenme eso a mí... ¿Quieren ir ahora?

Yongsun y Hyejin compartieron una mirada seria. Asintieron volviendo a entrar al auto.
El sitio en cuestión era un edificio de tres pisos construido con el fin de albergar oficinas, unas bastante antiguas que parecían estar en desuso hace muchos años. El primero con una puerta corriente cuya pantalla de código estaba rota de forma muy conveniente.

-Bien, iré yo- Moonbyul las miro a las dos -Que el auto permanezca encendido. Si todo sale bien solo tengo que hacer un trato con ellos, y me iré de ahí caminando. Pero si me tardo más de 30 minutos, llamen a la policía

Ambas asintieron y se metieron al auto y Moonbyul entro. Subió hacia el segundo piso, encontrando que ese lugar se encontraba más mantenido y adecuado de lo que el primer piso estaba; hacia el fondo del pasillo se llevaba a cabo una conversación a 3 flancos; voces masculinas. Ella sacó su teléfono y empezó a grabar toda la conversación, atenta de alguna esquina a través de la cual se pudiera asomar sin ser descubierta.

-No pedimos demasiado, solo una firma aquí, y todos ganamos  -Esa voz la distinguía bien. ¿Acaso era EunJin? Ay no, no pintaba bien
-50 años de prisión, o cadena perpetua no suena buen trato para nadie  -¿Con quién se supone que hablaba?
-Wheein, tu hija. Su madre, y la vida de ambas esta perdida, gracias a lo que han hecho ustedes

Hubo silencio en la habitación. El ruido de papeles moverse fue lo único que se escuchó del otro lado.

-Nada de esto asegura mi libertad
-Asegura la libertad de Wheein

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