Capitulo 26

1.9K 137 19
                                    

Podéis seguirme en
Ig: itsanacg02
Tiktok: itsanxcg02 🥰🥰
16/10/2020
Eric

Hanna tuvo una especie de crisis epiléptica, los médicos no saben explicar la razón exacta, pero al parecer su mente ha estado sometida a mucho estrés por que lo más probable es que esté luchando por despertar. Esto hizo que su mente "cortocircuitara" por así decirlo.
Han pasado ya cinco días desde que le ocurrió y aún no ha despertado, parece que su actividad cerebral es menos intensa que los últimos días, pero los médicos nos insisten en que no nos preocupemos.

Aún así yo sigo hablándole, por si acaso me escucha, yo tengo la esperanza de que lo hace.

— Señor, el bebé se encuentra en buen estado, su esposa está estable pero necesitamos tenerla controlada, usted debe ir a casa, dormir en una cama en condiciones por más de cuatro horas y comer algo decente.

— No puedo dejarla sola... menos ahora.

— No queremos que usted también se enferme, vaya a casa y descanse.

Después de mucho insistir, Chad entra en la sala y me insiste aún más, asegurándome que el velará a Hanna esta noche, que cualquier cosa me llamarán.

Subo al coche que lleva aquí aparcado tantos días y el simple hecho de sentarme en otro asiento que no fuera el de la habitación me hace sentir bien. Tengo el cuerpo entero adolorido.

Después de un corto viaje llego a casa, y el hecho de saber que Hanna no me está esperando dentro hace que mi corazón se estremezca. Quiero que despierte para poder volver a casa y descansar juntos.
No puedo evitar querer darme la vuelta y volver al hospital junto a ella.

El sonido de mi teléfono me saca del trance, es una llamada de mi padre.

— ¿Que quieres?

— Veo que no estás en el hospital...

— Vete de allí...

— Tranquilo, no estoy yo, si no mi guardaespaldas.

— Me da igual, nada que tenga que ver contigo debería estar allí.

— Tu tienes que ver conmigo...

—... sabes perfectamente que si pudiera no tendría nada que ver

— Pero ya estás dentro, al principio no pusiste resistencia.

— Fue antes de todo.

— Tienes razón Eric, eres un desgraciado... te acogieron en su casa como a un hijo, y así se lo pagas.

— Cállate...

— Pero enhorabuena hijo mío, me has hecho abuelo.

— Este bebe no tendrá nada que ver contigo.

— Claro que lo tendrá...

>>>

17/10/2020   3:00am
Aunque me costo conseguí dormir, aún así a las 3 am sonó mi teléfono.
No consigo llegar a tiempo a cogerle el teléfono a Chad. Automáticamente me asusto y comienzo a llamar a diestro y siniestro, pero no me contesta las llamadas.

— Mierda Chad...

— ¿Ocurre algo, Eric?

— Tranquila Maia vuelve a dormirte, saldré hacia el hospital.

— ¿Hanna está bien?

— Eso quiero averiguar, te llamaré.

Cojo la chaqueta del perchero que hay en el recibidor, las llaves y la cartera y corro hacia el coche. Mi corazón está acelerado, no que que esperarme. Quiero pensar que Hanna ha despertado pero no quiero llevarme una desilusión.

Corro por la carretera, que a estas horas está vacía y llego relativamente rápido al hospital.

— Chad, ¿Que paso?

— Perdona que no te volviera a llamar, me han robado el teléfono, Hanna tuvo otro ataque, ya está estable al parecer. Los médicos la tienen controlada.

— Gracias por llamarme, ¿Puedo pasar?

— Si, en nada saldrá la doctora, habla con ella.

— Gracias, averiguare que ocurrió con tu móvil.

La doctora me explica todo lo ocurrido, creen que este ataque ha sido más leve que el anterior, pero aún así hay que tener a Hanna bien monitorizada. Llamo a sus padres para que estén al tanto de la situación y ellos deciden venir al hospital.

Me adentro en la habitación de mi esposa y al verla postrada de nuevo mi corazón se estremece aún más. Las lágrimas se amontonan en mis ojos pero no les permito salir. Permanezco en silencio mirandola, aún en esa situación... se ve tan hermosa.
¿Como es posible que me haya enamorado tanto de ella? De una persona que hace unos meses jamás hubiera imaginado que sería mi tipo, una mujer que va a ser mi perdición.

— Hanna... por favor, tienes que despertar.— Las lágrimas se siguen juntando, y me cuenta contenerlas.— ¿Puedes creer que es la primera vez en diez años que suelto una lagrima?— Digo soltando una pequeña risa lastimosa.— y es por ti... porque me tienes totalmente enredado en ti... No se como lo has hecho, pero has conseguido que me enamore perdidamente de ti. Se que no he sido la mejor persona, y se que nunca lo seré, que igual no soy el hombre con el que soñabas de pequeña, pero quiero hacerte feliz, porque tú, de alguna forma, has conseguido abrirte paso en mi corazón. Ahora no te puedo dejar ir, no ahora que estoy locamente enamorado. No ahora que llevas a nuestro hijo, o hija, quien sabe. Siempre y cuando tú quieras seguir adelante con este embarazo cuando despiertes...

Mil dudas me asaltan en un solo instante.
¿Por que Hanna querría que fuera el padre de sus hijos? No soy un buen ejemplo, ni una buena persona. Ni siquiera se si Hanna está realmente enamorada de mi, tanto como yo.

— Saldré un momento para dejarte descansar Preciosa.

Llamo al teléfono de Chad para ver si se le ha caído al suelo o que ha ocurrido con el, voy avanzando por los pasillos por los que se que ha podido estar y comienzo a escuchar un teléfono. Sigo avanzando a medida que el sonido se hace más fuerte, voy mirando al suelo a ver si lo veo cuando, al fin, escucho el teléfono a mi lado, voy siguiendo con la mirada el suelo hasta que me topo con unos zapatos de tacón, color rojo carmesí, que solo pueden ser de cierta rubia.

— Katerina...

— Eric, me alegra verte.

— Me preguntó qué haces aquí y porque tienes el móvil de Chad.

— Da la casualidad de que lo he encontrado por ahí.

— Ya, claro...

— ¿Por que lo buscas? ¿Hay alguna noticia importante que no has recibido?

— Tú...

— Bueno, menos mal que a tú Preciosa mujer no le ha pasado nada, enhorabuena por el bebé, por cierto, que suerte que después de tanto siga fuerte como un roble.

El sarcasmo en su voz hace que me entren ganas de vomitar, la cantidad de ponzoña que llevan sus palabras.

— No tengo tiempo para lidiar contigo...

— No te preocupes Eric, ya lo tendrás... cuando Hanna descubra todo.

— ¡Eric!— Me llama Chad desde el otro lado del pasillo. — Deberías venir.

Corro hacia la habitación de Hanna con miedo a que este mal de nuevo. Abro la puerta y varios médicos se encuentran al rededor de su cama.

— Señor, su mujer despertó.

HOLAAAA!!
Como estáis? Os ha gustado este capítulo?
Se que he tardado pero ya tenéis capítulo, estoy intentando remontar y tardar menos en publicar, espero que os esté gustando esta historia🥰🥰🥰
Gracias por todo vuestro apoyo, os adoro muchísimo❤️❤️❤️
Comenten💬y voten ⭐️
Gracias por leer❤️❤️❤️
Lifefighter ❤️❤️❤️

El hijo del socio de papáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora