17 BLACK (l.s) español

capítulo 24

Harry

Me quedé dormido fácilmente con Louis abrazándome, olvidándome de Ivy y el restaurante y en lugar de eso me pregunté cómo entrabamos los dos en el pequeño colchón de Louis. Mis piernas colgaban un poco pero no me importaba.

Después de que le había contado mis pensamientos sobre los cuentos de hadas, me besó en la cabeza y me dijo que él pensaba lo mismo y que yo debería dormir. Me resultaba irónico cómo era yo el que está acurrucado contra él cuando era el más grande, pero él no pareció darse cuenta.

Me quedé dormido poco después de eso, mi mente se fue quedando dormida lentamente. Soñé con Louis Tomlinson y su talento para hacer que la gente se sintiera mejor. Cualquier persona normal solo intentaría hablar sobre lo que había pasado, pero Louis no lo hizo, solo me ofreció chocolate caliente y un sitio en su cama. A estas alturas ya sabía que Louis no era una persona normal. En mi mente, al menos. Era más grande y genial que eso.

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Me desperté solo y me quejé por la ausencia de Louis. Siempre se había ido cuando me despertaba.

Olía a café y escuché una máquina de café moler los granos. Me acerqué a él y me quejé de nuevo. Oí el arrastrar de unos pies y el colchón cedió.

Inmediatamente agarré a Louis y le atraje hacia mí. Él se rió.

"Estoy aquí Haz, dios, ¿has pensado que me iba a ir? Vivo aquí"

Suspiré y le miré. Llevaba gafas negras grandes y tenía un ordenador en las manos. Estaba adorable. Sonreí para mí mismo y me senté, frotándome los ojos con sueño. Estaba un poco desorientado.

"Qué actitud" le di una gran sonrisa.

Me miró de arriba abajo y tragó saliva. Entonces me di cuenta de que solo estaba en ropa interior.

"¿Por qué te has levantado?"

Louis me devolvió la sonrisa y cruzó las piernas.

"Estaba comprobando el tiempo. Hoy voy a jugar un partido de fútbol"

"¿Juegas al fútbol? Eso es caliente"

"De hecho, hoy va a hacer mucho frío" se rió de su broma bien interpretada.

Me recosté.

"Eres un jovencito, Louis"

Louis metió su dedo mojado en mi oído. Grité y me alejé de la cama.

"Mi jovencito" agregué pensativamente.

Louis se inclinó y besó mi cabeza.

"Eso está mejor"

Se levantó y se acercó a la máquina de café, sacando la jarra y se colocó a mi lado.

"No sabía que usabas gafas"

Louis se encogió de hombros.

"Me han dicho que me hacen ver como un jovencito"

Me reí.

"¿Estoy invitado a ese partido de fútbol tuyo?" me senté de nuevo, todavía mirando a Louis.

"No pensaba que querrías ir, pero claro que sí" no sabía por qué había pensado que yo no querría ir.

Louis desapareció de la vista.

"Te he hecho tortitas. Sin mantequilla ni sirope. Y antes de que me preguntes, normalmente no estoy acostumbrado a alimentar a la gente"

"Louis, ¿puedo preguntarte algo personal?"

"Tengo tampones extra en el baño, si estás en tus días". Louis se rió. Me sonrojé por su franqueza y también me reí.

"No, se trata de tu trastorno alimentario" Louis escupió su café a mitad de trago y se atragantó un poco.

"Si no quieres hablar de eso, no pasa nada. Solo tenía curiosidad y quería saber más sobre ti" agregué.

Louis suspiró.

"Está bien. Prepara palomitas de maíz"

Louis

"Fue hace cinco años. No era un niño normal, supongo. En lugar de salir de fiesta como todos mis amigos, me quedaba en casa con mi madre, ayudándole con las cosas de casa, cuando ella estaba en casa. Lo que no era frecuente. Siempre tuve esa punzada de culpa en mi pecho por no haberla tratado bien. Lo intenté, honestamente lo hice, pero siempre estaba fuera de su alcance"

"Empecé a fumar a los diecisiete. Me quitaba el dolor, aunque solo fuera por un rato. No era adicto a fumar, era adicto a la sensación de no sentir nada"

"Me aceptaron en un grupo diferente de personas cuando empecé a fumar. Ya sabes, los drogadictos y la gente con tatuajes y piercings. Todo el mundo les temía, pero yo no. Les veía como gente corriente"

"Conocí a un chico de ese grupo. Su nombre era Curtis. Curtis Morgan. Fue mi primer chico"

"Pensaba que me haría mejor, pero después de un tiempo empecé a darme cuenta de que solo quería hacerme daño. Le di todo. Realmente creí que me quería. Yo le quería. Con todo mi corazón"

"Realmente nunca pensé que estaba gordo, simplemente nunca tenía hambre. Fumaba más de lo que respiraba aire fresco y la necesidad de comer disminuyó lentamente. Pasé una semana sin comer y Will empezó a notarlo"

"Pillé a Curtis en un trío con mi mejor amigo. Estaba triste en ese momento, pero ahora estoy enfadado conmigo mismo porque en realidad me creí toda la mierda que me decía"

"Will se enteró de esto. Él ya era más grande que la mayoría de las personas de mi curso, así que encontró a cada uno de ellos mientras estaban solos y les dio una paliza"

"No aprobé eso, pero estaba demasiado desconsolado para pensar en ese momento. Me saltaba las clases y fumaba en el espacio que había detrás de mi casa. Decir que fue una época oscura para mí sería quedarse corto"

"Poco a poco empecé a volver al instituto, pero no pensaba mucho en ello"

"Mi madre no sabía todo esto, pero sabía lo suficiente para saber que necesitaba ayuda. Nos mudamos de esa ciudad y vinimos aquí. Consiguió un trabajo como vendedora y aunque no ganaba mucho, era suficiente para mantenernos. Conoció a un hombre, se enamoraron y se casaron al cabo de un año de estar juntos"

"Mi vida mejoró después de eso. Dejé de fumar e intenté ser un mejor modelo para Will. Le llevaba al cine y a conciertos. Conseguí un trabajo después de graduarme. Y ahora aquí estoy"

Me quedé en silencio y también Harry durante los siguientes minutos. Me negaba a llorar. Sin embargo, era más fácil decirlo que hacerlo y me mordí el labio para intentar contener las lágrimas.

Harry se puso de pie y se inclinó contra el mostrador, sus bóxers colgando sueltos de su cintura.

"¿Quieres un abrazo?" ofreció. Asentí y le di la bienvenida a su abrazo "Gracias por contármelo" murmuró. Apreté los dientes y apoyé la cabeza en su hombro. Harry acarició mi espalda suavemente.

Empezó a balancearse de un lado a otro y puso su mano en la mía.

"¿Qué estás haciendo?" pregunté.

"Bailar" respondió como si fuera la cosa más natural del mundo.

Harry nos separó e hizo girar mi brazo, haciéndome girar también. Sonreí levemente.

Me empujó hacia su pecho y empezó a guiarme hacia un tango lento. Me reí y Harry besó mi cabeza.

"Realmente no sabes bailar, Harry"

Harry giró en círculo y me sumergió. Me reí.

"No" se rió "No, a menos que haya un palo involucrado"

Sabía que era demasiado pronto para decirlo, pero creo que me estaba enamorando de Harry. Mientras bailábamos en mi pequeña cocina, podía sentir una calidez familiar en mi corazón. Y, si pudiera elegir a alguien a quien entregarle mi corazón, sería a Harry.