10: « Tensión »

443 62 60
                                    

Michael estaba ilusionado, ansioso, eufórico. No es que la fiesta hubiese sido una asombrosa que destacara entre las demás, más bien era una fiesta promedio, sin embargo, Michael quería probar lo que había aprendido con Luke, quería excitarse, quería llegar al orgasmo con otra persona, demostrar que él también podía llegar al placer al igual que todos los presentes.

Tal como cada noche, coqueteó con chicos y chicas, besó a las personas con las que bailaba cuando la música era demasiado intensa. Aquellos besos, Michael los denominaba como 'parte de la coreografía', no tenían ningún significado y ningún compromiso, solamente eran condicionados por el momento. Así que disfrutó, con su lata de cerveza o con su vaso rojo con alguna mezcla de destilados que le haría pésimo al estómago.

Así que, para ser responsable, aquella noche no se tomaría sus fármacos porque sería más químicos en su estómago y no lo quería irritado, sobre todo porque algo importante tenía que hacer al siguiente día. En aquel momento no recuerda que es exactamente, pero sabe que es importante, así que debe cuidarse.

Y besándose de forma bastante candente, Michael ve una pareja al final de la pista y piensa que es su oportunidad. Tiene un condón, espera poder lograrlo, además porque aquella pareja prácticamente tenía pegado un papel en la frente que decía 'buscamos tener un trío' y Michael no podía sentirse más curioso y emocionado por aquello.

La pareja se alejó y comenzaron a bailar, restregándose contra otras personas. La chica, una muchacha pelinegra, estaba meciendo sus caderas en la pelvis de un chico pelinegro, no con quien se besaba, mientras que el chico anterior que estaba con la pelinegra, estaba poniendo en su lengua lo que Michael reconocía como 'lsd'

«Mañana tienes algo importante. No alucinógenos. »

Michael se acercó danzante a ellos y la pelinegra, al verlo acercarse, sonrió y entre movimientos, se acercó a él.

Los 3 solían estar en todas las fiestas, eran conocidos, sabían a lo que se dedicaban. No había intereses en común más allá de compartir el mismo espacio todos los viernes.

—Michael, ¿cómo estás? —saludó la muchacha, abrazando por el cuello al adolescente que sonrió. Sus labios estaban rojos e hinchados, se notaba que ella estaba pasándola bastante bien.

—Excelente Everly. Veo que la estás pasando bien, pero me pregunto, ¿realmente la estás pasando como pensabas? —consultó el pelinegro adolescente de ojos verdes. La mujer sonrió y aún con sus manos enredadas en el cuello de Michael, elevó su dedo índice y con él, llamó a su novio, quien se acercó a ellos con una sonrisa.

—Oliver, mira quien quiere unírsenos —celebró Everly y su novio sonrió en celebración.— ¿Crees que algún baño esté disponible, Michael?

—Por favor, acompáñenme —invitó el ojiverde, separándose de Everly para enredar sus dedos con los de ella, además de Oliver, mientras los arrastraba escaleras arriba. Buscó con la mirada a Beatrix y la vio jugando junto a Ashton bearpong. La muchacha de inmediato notó su mirada, le sonrió y asintió, deseándose suerte.

Sería una buena noche.

🃏🃏 

Michael gruñó apenas salió de su estado inconsciente. Su cabeza lo mataba, parecía que en cualquier momento estallaría y mancharía las paredes de su habitación. Poco a poco, abrió los ojos mientras bostezaba, maldiciendo al Michael del pasado por no dejar las cortinas cerradas cuando llegó la noche anterior. Se estiró en la cama, sintiendo como su espalda se destensaba. Amaba esa sensación.

Y luego recordó lo sucedido la noche anterior.

—Ay no.

Los colores rápidamente llegaron a su rostro y se cubrió con una almohada por la vergüenza, para luego soltar un grito en esta, descargando su frustración.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 28, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

How to sin?  » MukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora