Camine exactamente a la misma dirección que otro joven que había dejado el departamento al mismo tiempo que yo, como era de esperarse, fue incómodo. Por eso el joven caminó rápido tomando la delantera. No quería perder, por supuesto que lo alcancé.
Camine exactamente a la misma dirección que otro joven que había dejado el departamento al mismo tiempo que yo, como era de esperarse, fue incómodo. Por eso el joven caminó rápido tomando la delantera. No quería perder, por supuesto que lo alcancé.