"-¡Salve Sarah Gutiérrez, hija de Adhara, la diosa de los héroes, el terror, el sufrimiento y los malaventurados"
"Salve la Diosa Adhara, diosa de los héroes, el terror, el sufrimiento y patrona de los malaventurados"
Adhara está escondía entre los...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Marzo había pasado, y detrás de él, abril y luego mayo hasta finalmente llegar a junio.
Los campistas empezaron a llegar,
Y las cabañas a llenar
Y con mi flow te regalo un pan
Mi cabaña no estaba muy llena, todos nos las apañabamos bien.
Al parecer, cuándo construí la cabaña, había pensado. Era muy cómodo. Nadie peleaba.
Las cosas en el Campamento Mestizo se pusieron tensas, oías a los sátiros murmurar sobre algo que habían robado.
Nadie sabía nada.
Era de noche y estaba lloviendo a mares. Me encontraba mordiendo una manzana y mirando al horizonte con nerviosismo.
¿Qué era lo que habían robado?
Estaba segura de que habían robado algo de mi padre, Zeus, pero no sabía que.
¿Recuerdas que malamente sabía leer y escribir? Pues gracias a los hijos de Atenea y a Ricardo, uno de mis hijos que estaba en la facultad de letras, pude atender lo que se aprendí a en seis años de primaria y unos cuantos de secundaria en unos pocos meses.
Sabía lo que todo ciudadano estadounidense deberías saber a la edad de doce años.
Algunos vagos recuerdos de mi vida como diosa del Olimpo llegaban a veces en mis sueños.
Un gran mujido, cómo el de una tor-
Un hombre toro perseguía a una mujer, un chico y un sátiro.
Me quité la pulsera y presión el sol. Se transformó en un bello arco dorado con detalles en negro y blanco.
Tensé el hilo del arco y apareció una flecha. Disparé.
El minotauro empezó a mirarme, intentaba pasar la barrera pero no podía, yo tenía miedo de que la rompiera.
Convertí mi arco en una espada y salí de los límites de propiedad.
Me abalancé sobre el hijo de Pasífae pero sólo logré que me lanzara a un lado y volviera a prestar atención al chico.
El minotacto agarró a la madre del chico y empezó a ahogarla. Se convirtió en un destella dorado y la mujer se desvaneció.
Me toqué la cabeza. Un líquido dorado espeso salía de una herida, pasé un dedo por ella y me lo metí a la boca, si siquiera sabía a sangre.
Mis ojos se cerraron lentamente haciendo que perdiera el control sobre mi cuerpo
La ropa que usaba Sarah/Adhara
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
