Ya era sábado, y desperté solo recordando al joven del sueño, ¿sera real o solo fue... un sueño?
Esas eran las palabras que rondaban por mi cabeza.
Me levanté y fui directamente al baño para ducharme para prepararme en la tarde. En cuanto menos me di cuenta, el espejo se empaño, entre y solo sentía agua, se que es raro, claro todos sentimos el agua, pero solo pasaba pero no la sentía del todo, estaba perdida. Me duche rápidamente y salí, me aliste, seque mi cabello, lo solté y salimos de mi casa. En el camino yo estaba callado solo mirando por la ventana. Al llegar a la casa de mis abuelitos me di cuenta de que había algo diferente, solo lo sentía, subí las escaleras y el espejo dio un destello que al parecer solo yo vi. Me quede ahí parada y pude ver el reflejo de un bosque que se mostró rápidamente, y vi a ese joven en el espejo, después de verlo pestañie y me alejé, habían preparado una comida para mi la cual estuvo deliciosa y yo solo pensaba en aquel joven. Y así fue todo mi día. Por la tarde llegamos a mi casa y devidi recostarme. Sonó mi celular y conteste.
-¿hola?- pregunté al teléfono
-¿hola? Him, soy yo, Isa.
-ah, hola, ¿que pasa?
-queria hablar contigo, mira, el viernes te vi muy rara, no eras la misma Himmel, ¿paso algo?
-la verdad es que si. No estoy convencida con Arturo, ya no es el mismo y ahora no se, es como, la verad no se bien.
-Mmm. Bueno, hablamos el lunes Him, adiós.
- Si, adiós.- me despedí y colgué.
Deje mi celular en la mesa de no cuarto, me quite todo lo que tenia puesto y me puse la pajama. Eran las 4:38 de la tarde y yo no quería hacer nada, fui a la cocina y agarre una manzana y la mordi.
-¿tan temprano en pijama?- pregunto mi mama y yo solo la miré -¿te pasa algo?
-no, solo tengo sueño.
-Deacuerdo, duerme pues.- acentí -¿dormiras con la manzana?
-Dormire con la manzana en la boca esperando a que alguien me cocine y me coma como cerdo- le dije mientras me dirijia a mi habitación.
Entre y me recoste en mi cama, estaba aburrida así que puse musica, me coloque los audífonos. No dejaba de pensar en el joven del sueño, era tan lindo como para ser de verdad, al pensar en el, sentía como me sonrojaba y sonreía, en eso pensé en Arturo y mi sonrisa desapareció, y una lágrima salio, cerré mía ojos y comencé a llorar, solo le había dado una mordida a la manzana, por un momento me sentí la princesa Blanca Nieves, de tanto llorar sin motivo que valiera la pena la manzana calló de mis manos y mis ojos se crearon del todo y dormí por tanto llorar.
∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞∞
-Despierta- dijo una voz- vamos, no te dejare aquí.
-ya desperte- dije con los ojos abriendoce y ahora completamente estaba segura de que era un sueño de fantasía u otro mundo, creo mas en la primera, quien me había despertado era el joven del otro sueño -Tu... eres..- dije tartamudeando.
-¿soy quien? Bueno no importa, rapido, el atardecer nos espera- dijo el mientras me daba la mano para levantarme, el lugar donde estaba era diferente, no era el bosque, era un campo, estaba bajo un árbol, tenia el mismo atuendo, vestido negro, malla cafe, botas y cinturón de cuero. -toma- dijo dándome una rea de caballo, era de una yegua negra hermosa, la tome y solo la mire. -vamos, sube, ni que fuera desconocida-dijo el montandoce en su potro blanco, yo la monte y solo galopamos.
- entonces... esta yegua es mía.
- si, no la reconoces o que
- te sonara raro pero no se donde estoy, quien es la yegua, ni quien eres tu ni quien soy yo aqui.- en cuanto termine de decirlo el se detuvo y se quedo en cilencio mirando al frente.
- no te juzgare, pero te diré todo lo que quieras y necesites saber- dijo mirándome dulcemente y seguimos galopando- así que... dime, ¿que quieres saber?
-primeramente dime quien soy.
-tu nombre es Himmel Grimmie, hija de los bondadosos del pueblo Tyler y Nereida Grimmie.-esos son los nombres de mis padres.
-¿bondadosos?
-si, así es, ellos nos ayudan cuando pueden, son los que ven por el bien le los demás.
-deacuerdo... dime... ¿quien eres tu?- dio un suspiro.
-la verdad, en el pueblo no soy nadie, soy solo el hijo de los leñadores, nadie importante en verdad, pero los que me notan me llaman Esteban, como tu.- dijo en una sonrisa.
-¿como nos conocimos?
-es algo rara y larga la historia pero te diré. Un día iba caminando por el bosque en camino al río y te vi desmayada en el, así que te recoji y mire que estubieras bien, cuando me acerque a ti para acomodarte me di cuenta de que eras Himmel Grimmie, ese día vimos el atardecer y te quedaste dormida en mi hombro y yo te lleve a casa, le conté a tus padres lo que pasó, al parecer me tomaron confianza.- fue lo que paso en el otro sueño.
-y... ¿hace cuanto fue eso?
-hace un mes.
-y...- no era capaz de preguntarle si teniamos algo de relacion- ¿somos amigos?- sonrió para si mismo.
-la verdad algo mas que amigos, tus padres me fueron conociendo mas y fue cuando me regalaron el potro.- sospechaba que tenia un significado eso.
-y que significa?
-que ellos me dieron la oportunidad de estar a tu lado y yo tendría que cuidar al caballo y según como ellos vieras que lo cuidaba se darían cuenta de como cuidaría a una esposa y cuando cumplieras tu 18 años ellos mirarían mi trabajo y decidirían si tomaba tu mano y tu accediste completamente- ¿que, Estoy comprometida? Oh por Dios.
-bueno... ahora ya se quien soy, quien eres pero ¿donde estoy?
-estas en los campos de libertad, sin dueño ni nadie, no ha habido guerra ni lucha en este lugar- parecía un lugar de en sueño, oh, lo olvidaba, es un sueño.
-bueno, Esteban...
-¿si?
-cabalguemos hasta el anochecer.
Los dos cabalgamos hasta la cima de las costas bajando la colina y contemplamos otro atardecer.
-sabes, no quiero despertar.- dije cerrando los ojos.
-Si.. un momento, ¿que? ¿despertar?...
∞∞∞∞∞∞
Volví a la realidad.
¿Esto era mi sueño, mi realidad o que era?
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Desde 0. La historia de una Venista (Pausada)
Teen Fiction¿soy yo solo yo la que comprende? tal vez si, tal vez no, son mis sentimientos pero aveces ni yo misma los comprendo. he decidido comenzar de cero, reiniciarme, olvidar el pasado y seguir adelante, lo que yodo el mundo hacer, pero no estoy segura de...