Capítulo 14 (Ashley)

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Lizzy siempre fue inteligente, nos dijo que hiciéramos lo que hacíamos cuando queríamos que nuestros padres nos prestaran atención, o sea gritar, romper y desordenar todo. A mi me encanta cantar pero para que nos escuchen tenía que ser algo molesto y ruidoso lo primero que pensé fue en una canción infantil que me gustaba de pequeña solo tenía que desafinar mucho, busqué algo que me acompañe, y recordé haber visto un par de cucharones que estaban en la cocina, fui por ellos y volví a la sala; "se escuchan unos pasos" entonces comencé a golpear la mesa que estaba enfrente como si fuera un tambor para hacer más ruido.

Damon: ¿se puede saber qué demonios están haciendo?

"Este sujeto es realmente aterrador, siento que puede matarme con la mirada"

Lizzy: nos estamos entreteniendo ya que no nos dan comida y tenemos hambre

"No se como Lizzy hace para no temer, sus peleas dan más miedo" Mientras ellos discuten Dylan me sacó de la sala en donde estábamos.

Ashley: ¡oye que te pasa! ¿por qué me sacas del cuarto?

Dylan: solo no quiero que otro te pruebe primero

Ashley: ¿qué?

Dylan: te me haces familiar por una extraña razón, cuando llegué mi primo terminara de sacarme la duda, como sea toma esto-me entrega un collar- tu hermana y tu son parecidas y no quiero confundirme

Ashley: ajá y que te hace pensar que quiero algo tuyo, olvídalo yo no lo voy a usar -se me acerca- ¿Qué haces?

Dylan: no pregunté -me lo coloco el collar- volvamos antes de que hablen

Ashley: "que raro es este sujeto"-volvimos y Lizzy me alejó de él

Lizzy: Ashley, ¿estas bien? ¿no te hizo nada ese tal Dylan?

Ashley: estoy bien, aunque es raro, luego te cuento

Lizzy: también tengo algo que decirles, es sobre el convento

Pensamos que ahora que Denis y Dylan se habían ido podríamos irnos, después de todo Damon no nos quiere en su casa.

Damon: no se muevan de este cuarto hasta que ellos vuelvan con su comida -se fue dejándonos a las tres solas

Maxín: deberíamos aprovechar ahora que no hay nadie para salir

Lizzy: por supuesto, no pienso hacerle caso, solo no hay que hacer ningún ruido

Ashley: ok, salgamos por atrás

Y es lo que hicimos, llenamos un par de botellas con agua esperamos un rato y luego fuimos por la puerta de atrás, con una llave que encontramos y guardamos, no tuvimos problemas para abrir la puerta.

Lizzy: miren manzanas, llevemos para el camino

Maxín: con eso no me lleno -_-

Ashley: a nada, también hay frutillas "si tienen fruta ¿por qué no tienen comida adentro?"

Juntamos lo necesario para irnos, todas estuvimos de acuerdo en no volver al convento y comenzamos a caminar hacia el otro lado, lejos del pueblo y esa casa de raros caníbales. Ya según nosotras estábamos lejos de su casa y aprovechamos para contarle todo lo que sabíamos con respecto a nuestro Padres a Maxín. Al principio se la veía confundida y triste, temía por su reacción impulsiva pero se controló bastante. Las horas pasaban, oscurecería dentro de poco y no tenemos dónde dormir.

Lizzy: sigamos avanzando

Ashley: okey, deja que yo llevé el agua ahora así no se te hace tan pesado

Luna RojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora