Cap. 34: Un pequeño regalo

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A la tarde, Ochako y Tsuyu emprendieron su camino hacia la agencia de Ryukyu, Eijirô fue a la de Fatgum y Fumikage a la de Hawks. El resto no tenía misiones y decidieron hacer cada uno lo que quisiera. Izuku, por su parte, fue a la residencia de los padres para pedirle ayuda a su madre con el regalo que quería hacerle a la castaña. Algunos de sus compañeros estaban comentándolo en el salón como un cotilleo.

- ¿Qué pensáis que le está planeando hacer a Uraraka? - preguntó Momo mirando a sus compañeras.

- Seguro que es alguna prenda de ropa con la que se vea sexy - mencionó Minoru con una perversa expresión en su rostro.

Kyôka le metió sus jack por las orejas para llamarle la atención por aquello que acababs de decir.

- Yo creo que será algo con lo que se vea linda - mencionó Mina con una tierna sonrisa. - Aunque... Seguro que es algo que haga referencia a All Might.

- Es muy probable - dijeron todos con una expresión ensombrecida por el disgusto.

- Después de que se fuese Uraraka, lo vi con unas manoplas rde color chicle - dijo Rikido.

- Seguramente sean las que usa Uraraka para dormir - afirmó Jirô. - Será que quiere modificarlas para algo relacionado con All Might.

- Es lo más probable - respondieron todos de nuevo con el rostro ensombrecido.

- Pero bueno - mencionó Ashido para cambiar de tema. - Hay algo que me gustaría decir. Voy a declararme a Kirishima.

- ¿¡Qué!? - exclamaron los demás.

- Así es - respondió la pelirrosa con las mejillas intensamente rojas. - Me he decidido a hacerlo. Me sabía mal hacerlo cuando Uraraka estaba mal por lo de Midoriya, pero ya que ha vuelto... Voy a hacerlo.

- Eso es genial - dijo Momo.

Todos dieron la aprobación a esa idea con alegría. Estaban felices de que empezase a surgir el amor entre algunos alumnos de su clase. Sabían que pronto surgirían más parejas si todos seguía así de bien.

Mientras tanto, Izuku ya había llegado a la residencia de ellos padres de su clase y se encontraba explicándole a su madre lo que quería hacer.

- Así que... Quieres aprender a coser para hacerle unos guantes a Uraraka, ¿no?

- Sí. También quiero aprender a bordar.

- Eso ya es un poco más complicado, pero seguro que aprendes rápido. Iré a por las cosas de costura.

Cuando su madre se fue, los padres de la castaña se acercaron a él para saludarle. Además, el padre quería hablar seriamente con él respecto a lo que hizo.

- No me andaré con muchos rodeos, Midoriya. Estoy muy decepcionado contigo. Le hiciste mucho daño a Ochako cuando te fuiste. Ella te habrá perdonado, pero yo no. No puedo olvidar las veces que nos llamaba por la noche porque no podía dormir. No tengo muchas detalles de por qué te marchante un tiempo. Ella tampoco nos ha contado mucho, pero... Si de verdad es tu novia y la amas, no le hagas daño. Nunca más o será cuando yo intervenga. ¿Queda claro?

Izuku se quedó en silencio sin poder responder. No sabía que responder. Solo su madre conocía toda la verdad. Pasados un par de minutos, se aventuró a responder a aquel sermón. Su expresión estaba un poco ensombrecida y estaba luchando por aguantar las ganas de llorar.

- Señor Uraraka, yo... - comenzó a decir. - Sé muy bien lo que hice. Pensé que protegería a todos mis seres queridos, abandonando la UA y alejándome de todo. Pensaba que el único que sufriría sería yo, pero... Me equivoqué. Pasé por alto que Ochako no estuviese destrozada. Me arrepiento mucho de lo que hice. Sobretodo cuando yo y mis compañeros estamos tomando el camino de convertirnos en héroes. La primera vez que me encontré con Ochako lo entendí. Vi mi error, pero no sabía muy bien lo que hacer, así que decidí seguir viéndome con ella de vez en cuando, pero ocurrió la pelea en la que luchamos juntos y fue lo que me motivó después a aceptar la invitación de mis compañeros de volver.

My Hero Academia: The Rebirth Of The Heroes [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora