Cap. 36: Hagamos eso

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Pasados unos días, por fin, Izuku y Ochako pudieron ir a la piscina del gimnasio para poder nadar y refrescarse un rato. Estaba siendo un día bastante caluroso. Era obvio que iba a hacer bastante calor al ser principios de agosto. Al salir de los vestuarios masculinos, el peliverde se quedó esperando a su pareja sentado en el bordillo, con las piernas metidas en el agua.

Cuando salió del vestuario de las chicas, caminó sigilosamente a las espaldas de Midoriya y le dio un empujón en la espalda con la planta del pie, tirándolo al agua con una traviesa sonrisa. Se pegó un gran susto por aquello y no puedo evitar echarle agua con una expresión de falsa molestia.

- ¿Por qué has hecho eso?

- Porque quería ver cómo reaccionabas - respondió ella para dar un salto y caer al agua hecha una bola.

La onda expansiva del impacto no tardó en salpicar al peliverde, que la miraba, aún fingiendo estar molesto.

- Bueno - dijo - Cuanto antes empecemos mejor.

- Estoy de acuerdo - afirmó ella con una dulce sonrisa y un notable sonrojo en las mejillas.

Izuku fue el primero en comenzar a nadar. Ochako no tardó en seguirlo e intentar adelantarlo. Cuando este se dio cuenta, comenzó a acelerar más y más hasta tener que activar el One for All al 5% para que no le pisase los talones.

« Será mala persona » pensó la castaña un poco molesta.

Decidió dejar de nadar y sólo intentar obstaculizarle el trayecto, abrazándose a sus piernas. Aunque no pudo hacer demasiado cuando subió al 8%. Tuvo que soltarlo o iba a terminar vomitando de tanta sacudida.

Al cabo de unos minutos, Izuku se detuvo para descansar un poco. Miró a Ochako con una diabólica sonrisa en el rostro y se dejó echar agua por ella para así poder jugar unos minutos de aquella forma. Después volvieron a nadar, esta vez en serio, y al cabo de una hora de no parar, salieron del agua.

El peliverde se tumbó en el suelo, apoyando la cabeza sobre sus manos, y la castaña se tumbó de tal forma que apoyó su cabeza sobre el pecho de su novio y cerró los ojos con una dulce y algo cansa sonrisa. Los dos estaban bastante sonrojados y nerviosos por aquella situación, pero querían estar así. Se quedaron hablando mientras miraban al cielo.

- ¿Qué haremos hoy? - preguntó ella.

- Deberíamos pasarnos a ver si ya están nuestros trajes. Todoroki me dijo que quizás tendríamos una misión en cooperación con otras agencias por la tarde y... No sé qué más podríamos hacer hoy.

- Ya veo. Tal vez se nos ocurra algo a lo largo del día.

- Podríamos también ir a la granja. Aunque ya recogimos la cosecha.

« Se me acaba de ocurrir una cosa, pero... ¿Querrá hacerlo si se lo pregunto? » pensó Izuku teniendo un sonrojo mucho más intenso que antes. « Yo creo que estamos preparados, ¿no?

- Bueno - dijo Ochako incorporándose y sentándose a su lado. - Será mejor irnos ya y preguntarle a Mei si tiene los trajes, ¿o pensabas que fuéramos más tarde?

- No, no. Está bien. Vayamos ahora.

Los dos terminaron por levantarse e ir a sus respectivos vestuarios para cambiarse de ropa y luego ir juntos al taller, donde estaba Hatsume y Akira, otra vez. Al peliverde le sorprendía que estuviese por allí constantemente.

- ¡Llegáis en el momento justo! - exclamó la estudiante con una enérgica y emocionada sonrisa. - Vuestros trajes están listos.

- ¡Genial! - exclamó la pareja al mismo tiempo.

My Hero Academia: The Rebirth Of The Heroes [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora