My Hero Academia: The Rebirth Of The Heroes [FINALIZADA]

Cap. 3: Sensación de Peligro

El rostro ensombrecido por el dolor de Izuku se descompuso aún más al ver, junto a Uraraka, como de la nada había aparecido un gigantesco robot.

Aguantando aquel insoportable dolor de cabeza, el peliverde comenzó a buscar estrategias en su cabeza para derrotar a aquel monstruo, pero lo único que se le vino a la mente era usar un Detroit Smash al 100% como en el examen de admisión.

« Podría hacerlo, pero no puedo permitirme destrozar mi brazo para un entrenamiento y menos con este límite » pensó fruenciendo exageradamente el ceño mientras apretaba sus dientes con fuerza.

- Deku, ¿qué te ocurre? - preguntó Uraraka, volviendo a mirar a su amigo.

- Es el don del cuarto portador... - susurró Izuku entre dientes y con una voz débil. - Mi cabeza me está matando...

- Tenemos que salir de aquí - mencionó Uraraka, sujetando a su amigo. - No estás en condiciones de continuar.

A los pocos segundos, Izuku volvió a quedarse inconsciente, volviéndose a despertar y desmayar, pero cada vez el tiempo que permanecía inconsciente aumentaba.

Uraraka lo cargó en su espalda, sujetándolo por los muslos y salió corriendo lo más rápido que pudo hacia la puerta de acceso.

Los dos profesores supervisaban el estado de Izuku por la cámara que los enfocaba a él y a Uraraka. Ectoplasm creó un clon suyo para que avisase a Recovery Girl, mientras llegaban los robots de salvamento a por el peliverde.

Al mismo tiempo, Todoroki observó a sus dos amigos preocupación mientras los veía irse, mientras creaba un muro de hielo que logró atravesar el armazón de acero del robot gigante, al cual logró destruir de un solo ataque.

Una vez todos vieron que el robot había sido destruído, volvieron a ponerse en marcha para buscar otros robots de menor nivel.

Por desgracia, aunque la presencia del robot hubiese desaparecido, Izuku no había despertado. Uraraka acompañó a los robots de salvamento con bastante preocupación y mostrando una angustiosa expresión de pesar.

All Might decidió ir a ver el estado de Izuku y dejó a Ectoplasm al mando del entrenamiento. Estaba preocupado por el estado de su alumno.

Cuando llegó a la enfermería, vió a Uraraka sentada sobre una silla, abrazando sus rodillas. Tenía quitadas sus botas para que no obstaculizasen su postura.

A su lado se encontraba tumbado sobre la cama el joven Izuku. Tenía los guantes y las botas quitadas y sobre su frente descansaba un paño húmedo.

Al sentir su presencia, la castaña volteó la cabeza para mirar a su profesor, aún mostrándose preocupada.

- All Might - dijo disimulando una amable sonrisa.

- Joven Uraraka, ¿cómo se encuentra el joven Midoriya?