Como te veo

7 - Después

Hola, el día de hoy fue un poco dificl para gran parte del fandom así que, ay vá otro capitulito a ver se nos alegramos.

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Cuando Luisita abrió los ojos estaba sola en la cama, las sabanas a su lado ya frías pero el aroma de café llenaba la habitación, en una silla había una sudadera y unas braguitas aún con etiqueta dobladas perfectamente. Su aroma, totalmente Amelia.

Se puso la ropa y siguió el sonido de la voz melódica de la morena hasta la cocina, donde estaba vestida en una bata negra de satín, balanceando las caderas mientras cantaba un single popero.

Luisita le abrazó por detrás, encajando completamente sus cuerpos.

-Buenos días guapa. – Amelia le dejo un beso en la mejilla.

-Buenos días morena. Me dejaste sola...

-Iría a despertarte con el desayuno, pero te adelantaste. – Amelia apagó el fuego y colocó una sartén con huevos revueltos en la mesa. Le dio un beso en los labios. – Anda, a comer que me muero de hambre.

Desayunaran juntas y se volvieran a la cama. Era sábado y ninguna tenía trabajo entonces se dispusieran a hablar un sinfín de cosas, conocer a sus historias de pequeñas y de la facultad. Amelia le conto a Luisita sobre su primer beso con un chico, a los doce y también lo primer beso con una chica a los catorce. Luisita le contó que beso primero a una chica, Lorena, su mejor amiga, para Lore fue una práctica porque a quien quería besar realmente era a Lucas, pero para Luisi fue el beso que sello todas sus dudas, tenía catorce también.

Por la tarde discutireron sobre comer sano o pedir una lasaña y por fin decidieron por una lasaña, pero vegana. Se tirarán la siesta juntas, pero esta vez con Amelia haciendo la cucharita a Luisita, mientras esta jugaba con sus dedos.

Al despertar el deseo pedía permiso otra vez y como en la madrugada anterior se reconocieran en sus cuerpos , descubrieron juntas como dar placer una a la otra y se conectaron de nuevas formas. Amelia saco unas cuantas fotos de Luisita. Luisita con la cabeza reposada en su abdomen, Luisita liando un cigarro y después fumando con toda la delicadeza del mundo, Luisita mirándole con cara enfada por tantas fotos, Luisita sobre la cama con la sabana sobre ella dejando al aire el pezón derecho.

-Deja de sacarme fotos Amelia. Que soy malísima posando.

-Pues para mí eres la modelo más guapa que ha visto mi cámara.

Cuando llego la noche Luisita se dio una ducha y tomo prestada una ropa de Amelia, llamo a un Uber, mismo tras las solicitaciones de Amelia para que se quedara una noche más. Pero tenía comida familiar en el domingo y no tenía una ropa que usar.

- ¿Me avisas cuando llegues a casa? Mejor, comparte el viaje conmigo que te voy acompañando desde aquí.

Luisi reía de la morena abrazada a su cintura. – Amelia, te aviso. Prometido.

-Vaale

-Anda dueña Amelia. Que el motorista me va a matar por retrasarlo.

Se besaron dos veces más, saboreando los labios y la despedida.

-Hasta luego guapa. – De esta vez fue Amelia quién se bajó hasta la ventanilla para besar a su rubia.

-Hasta luego morena. – Un beso más y Luisita se fue.

Amelia:

Drive/folders/169987004/guapa.com

Luisita abrió el link y se deparo con un ensayo completo de ella misma, fotos que Amelia le había sacado aquella tarde y unas otras de la reunión que tuvieran con las chicas del Atómica.