Los rayos de sol se entrometieron en la sala de la mansión Agreste, la iluminación natural lentamente empezó a despertar a nuestro querido diseñador, quien se giro sobre si mismo y hundió su cabeza en el mueble para evitar despertarse por completo, pero fue en vano, dos voces empezaron a entrar por sus tímpanos, anunciando que alguien pronto le haría compañía.
Las puertas se abrieron, el hombre pudo diferenciar la voz de Adrien, pero por más que se esforzará no podía decifrar quien lo acompañaba.
─¿Discutieron otra vez?─ preguntó la misteriosa voz, Gabriel se gira chocando miradas con una joven un poco más baja que su hijo, vestimentas sencillas pero que no parecían de ninguna marca, cabello azul atado en dos coletas y unos hermosos ojos azules ─Buenos días Gabriel─ saludo amigablemente
─¿Hola?─ saludo confundido
─¿Se encuentra bien o aún sigue dormido?, suele saludarme con más alegria─ ríe sentándose con su novio frente a este, el hombre se sienta
─Disculpame pero. . .¿tu eres?.
─La novia de tu hijo─ replicó una voz desde el otro lado de la sala, no importaba dónde, ni cuando, podría reconocer ese timbre de voz siempre, su asistente estaba aquí ─Disculpalo Mari, no se que le pasó en Los Ángeles volvió siendo otro─ atraviesa la sala y saluda a ambos jóvenes
─Que lo hagas dormir en un sillón no va a ayudar─ se cruza de brazos
─Para mí si ayuda, ponlo en práctica, te servirá en el futuro. . .
─No le des ideas─ intervino el rubio, los tres rieron
─¿Desayunamos?─ preguntó la pelinegra
─Te agradezco Nathalie, pasaba a decirles que está noche tenemos una cena en mí casa, solo eso el tiempo nos corre hoy tenemos un examen importante─ se levanta
─Suerte entonces y no esperen mas─ la mujer se levanta, ambas se abrazan, luego la adulta abraza al rubio y la pareja mira al diseñador
─Nos vemos Gabriel, hoy al fin podrás ver la colección─ menciono la chica y salió, su hijo meneo su mano y siguió a la joven
─Parece que nos llevamos bien. . .
─Les encanta diseñar, la pasión los une, aunque tu no lo sepas o aprecies─ suspira ─Te pido un solo favor, resiste hasta esta noche, después de la cena te diré todo lo que quieras y puedes volver a tu tiempo, esto es importante para ellos y ahora que te vieron aquí tienes que estar presente
─Dime, me iré y mí yo puede asistir sin problemas.
─Olvidaba lo egoísta que eras, vete entonces, pero yo no te diré nada─ intenta salir pero este se levanta rápidamente y la toma de un brazo
─Dime tu no eres así, ¿que te ocurrió?.
─Digamos que ser la señora Agreste me volvió un poco petulante, aunque creo que soy así por estar más tiempo a tu lado del que debo─ da un jalón y se suelta ─Ya no soy tu perro obediente Gabriel, si quieres algo de mí ahora tendrás que jugar con mis términos
─Odio esto─ se quejo
Nathalie lo ignoro y salió de la sala, para ir al comedor, desayunar y empezar con su día, un poco aletargado llego Gabriel, sentándose a un lado de ella, Joseline trajo las infusiones y las dejo al lado de cada uno.
─¿Eres feliz?─ preguntó de la nada llamando la atención de la mujer
─Buen intento─ bebé café
─Lo preguntó enserio, no intento nada─ ella suspira, el toma un bocadillo, arándanos pensó apenas sintió sabor, era su fruta favorita, no pregunten cómo lo sabe
─Soy muy feliz─ confesó ─Nunca antes había sido tan feliz
─¿Por qué yo?.
─Porque eres el hombre más increíble que conocí en mí corta vida, haces arte con tus manos y darías lo que fuera por las personas que amas─ se ruboriza un poco
─No di lo que fuera, me rendí─ desvía la mirada ─Soy un cobarde. . .
─Piensas muy diferente al Gabriel que conozco, algún día te volverás el y entenderás todo; pero mientras la tengas a ella en tu corazón nunca verás con claridad.
─¿Que debo ver?.
─Que no la necesitas para ser feliz, hay personas dispuestas a dar la vida por ti y aún no te das cuenta.
─¿Tu?─ susurra
─No solo yo, Adrien, Marinette, tus amigos.
Unos pasos se sienten desde el exterior en dirección al comedor, Nathalie fija su vista en la entrada, intenta levantarse para evitar que alguien pase, pero fue muy tarde, la inmensa puerta se abrió mostrando a un chica rubia de ojos grises con uniforme escolar, adentrandose en el lugar.
─¿Papá?─ cuestionó atónita al ver al diseñador, antes de que esté pueda hablar, la niña corrió a él y lo abrazó fuertemente ─¡Volviste!─ mira a su madre ─Si me hubieras dicho no me habría quedado en casa de Flora─ bufo haciendo un puchero, la joven tenía nueve años e iba al preescolar, tenía la impronta de Nathalie pero la actitud de su presunto padre
─Perdon cariño, pero tu padre regreso antes de lo previsto y me tomo por sorpresa─ se acerca a ella y le hace una seña para que suelte al hombre y se acerqué ─¿Cómo la pasaste con Flora?
─Muy bien, su mamá nos cocino algo llamado quesadillas, estuvo riquísimo, planeamos vernos la próxima semana─ sonríe, Gabriel a todo esto estaba sin habla
─Si te portas bien y traes buenas calificaciones, estoy segura de que no habrá problema─ sonrió la de mecha roja, la niña rápidamente mira a su papá fijamente
─¿No dirás nada, estás de acuerdo papá?─ el suele estar en contra de estas reuniones pero ahora estaba más callado que una tumba
─Si tu madre lo dice está bien para mi─ se animó a decir
─Eres el mejor─ salta hasta el y lo abraza
Otros pasos se sienten, ahora era Joseline la que aparecía por la puerta, la ejecutiva se acercó a los adultos le informo que la niña ya estaba en horas de entrar a clases, la pequeña se despidió y ambas salieron sin reprochar.
─¿Por qué no me dijiste que tenemos?.
─No era necesario─ replicó rápidamente sin dejarlo terminar
─Si es necesario.
─No─ se levanta con la taza de café en mano ─Planeas cambiar todo esto cuando vuelvas, ella ya no va a importar─ se va
Gabriel la mira irse pensando en lo que había dicho, ahora las cosas cambiaban un poco, el iba a tener una niña, que a pesar de no conocerla, se notaba que era la niña más hermosa y dulce del planeta, ahora con esto no sabía que hacer cuando regrese al pasado, todo sería muy difícil.
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Miraculous: Oracle.
FanfictionHarto de perder a Gabriel se le ocurre la idea de akumatizar otra vez a Nathalie, pero hoy Catalyst no vería la luz del sol, en su lugar traería a Oráculo, una leal seguidora con la habilidad de abrir un portal al futuro, ¿se arrepentirá Gabriel de...