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Oráculo estaba aburrida, ya habían pasado varias horas desde que Gabriel se fue por el portal, se estaba impacientando bastante, en un momento quiso salir pero su Sentimonstruo se lo impidió, el hambre y la desesperación empezaron a invadirla pero esa criatura no iba a dejarla salir a menos que Gabriel regrese o ella vaya por el.

─¿Debería?.

Se cuestionaba viendo la ciudad desde el gran ventanal que tenía la guarida, Gabriel no le dio otra instrucción que no sea aguardar por el, era muy buena siguiendo órdenes, pero cuando la preocupación se apoderaba de ella, aveces no pensaba con claridad.

De repente la habitación se iluminó por completó, Oráculo miro al techo y vio como un portal se creo, de el cayó Gabriel quedando tumbado en el suelo y viendo hacía el techo, rápidamente ella corrió hasta el.

─Señor, ¿está bien, que ocurrió?─ preguntó desesperada, el hombre seguía quieto ─¡Gabriel!─ lo abofetea, este reacciona

─¿Oráculo?─ ella asiente ─Dios mío, Oráculo─ la abraza ─Que bueno que eres tu, no respondías a mí llamada, casi me vuelvo loco allí

─¿Tan malo es el futuro?─ corresponde ─¿O te envié muy lejos?

─No es malo, y solo fui diez años─ se levanta, y rápidamente se transforma, chasquea sus dedos y libera a la asistente del poder que se le otorgó

─¿Ganaste?─ preguntó acercándose a el, este hace silencio y se quita el traje ─¿Perdiste?

─Mucho peor.

─¿¡Moriste!?─ dice espantada

─No, no, tranquila, solo me rendí.

─Casi me matas del susto─ se anima a golpearlo ─No haga cosas asi─ se cruza de brazos ─¿Por qué lo hiciste, que cambio?

─Eso no importa, no me voy a rendir nunca, voy a seguir peleando y algún día obtendré esos miraculous─ dijo firme

─¿Almenos sabes por que te rendiste, como o cuando?.

─No, pero lo que se es suficiente.

─¿Que sabes?.

─No hace falta que lo sepas, gracias por tu ayuda, ¿volvemos arriba?.

─Claro.

Gabriel se da vuelta y sale, ella lo sigue, ambos se ponen espalda con espalda y suben por el ascensor que dar al atelier, allí el platinado se pone a diseñar, ella camina lentamente y con poca fuerza se deja caer sobre el escritorio al otro lado de la sala, el diseñador se acerca para ver cómo estaba.

─Estoy bien, solo me sentí cansada─ suspira

─Le diré a Gorrila que te ayude─ sale de la habitación

Nathalie no puede creerlo, en otra ocasión el la habría cargado personalmente hasta la habitación, pero ahora decidió ir por el guardaespaldas, en ese segundo que tardo se preguntó que fue lo que vio en el futuro para cambiar de actitud, ¿sería la frustración por enterarse que se rindió la razón de ser así?.

Ahora Gorrila la llevaba en brazos hasta su habítacion, este la sostenía con el mayor de los cuidados, evitando tocarla por demás, como si fuera frágil o algo por el estilo, entendía que se sentía incómodo, y no lo culpaba, era un hombre sumamente respetuoso, al contrario de Gabriel, quien la cargaba sin preocupación alguna.

─Gracias Gregory─ musitó una vez este la acostó, el sonrió únicamente ─¿Podrías hacer un último favor por mí?─ el confirma alegre ─Ve a la panadería Dupain-Cheng y tráeme un muffin de chocolate negro al 70% relleno de jalea de arándanos─ se estira abre su cajón y toma dinero de el ─Y un capuchino─ le entrega el dinero

Miraculous: Oracle.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora