𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟭𝟬

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—Podemos escapar usando los conductos de las vía del tren.

Taehyung señalaba el mapa en el suelo mientras Jungkook observaba en su posición de flor de loto, aún seguían sonando las alarmas en minutos y Taehyung sentía mas presión, el tiempo que pasaba era peligroso porque los soldados restantes llegarían y los rodearían, así que debía tener prisa.

—Aún no te he dicho que quiero ir contigo.

Taehyung suspiró alzando su vista hacia él, Jungkook parecía querer verse serio pero en realidad estaba tenso. Él no tenía idea a donde podían ir y a que se debía el escape que debía procesar.

—Quiero ir contigo lejos de aquí, Jungkook. Lo que sufriremos aquí si se enteran de nosotros es-

—¿Nosotros? No parecía existir un ''nosotros'' cuando te largabas de mi vida.

—Jungkook, en verdad quiero explicarte todo cuando estemos solos.

Jungkook apretó sus puños pero logro relajarse y suspirar entonces indeciso ¿Estaría bien dejar todo su éxito de la nada? No quería vivir como un vagabundo nuevamente, anhelaba aún comer de la deliciosa comida que siempre preparaban en las ciudades, usar la ropa mas linda, dormir en una cama ¿Sería posible confiar en él? Esos pensamientos fueron sostenidos hasta que sintió de las manos de Taehyung tomar su rostro y besar sus labios con cariño y dándole esa paciencia que necesitaba, Jungkook correspondió con amor mientras buscaba su mano para entrelazar sus dedos hasta que se separaron por falta de aire.

—Jungkook... En verdad quiero que estés conmigo, suena estúpido pero para mí, un ser que nunca conoció este sentimiento con nadie, quiero que sigas haciéndome sentir bien.

Taehyung intentó formular bien lo que quería decir pero fue suficiente para que Jungkook sonriera embobado, aún así sentía un mal presentimiento.

—Iré contigo.

Dijo Jungkook sin importar qué, los ojos de Taehyung fueron hacia él nuevamente con emoción, así que volvió a tomar cosas para ahora cargar de su mochila y Jungkook llevaría otra con objetos que quizá podrían usar, pero Taehyung lo hizo más que nada para que no recibiera ningún daño por la espalda, además de colocarle un casco a su tamaño, ambos estaban listos pero el sonido de la puerta del Bunker los alarmó, Taehyung tomó del mapa para ir corriendo con prisa con Jungkook; ninguno hablaba, sólo se concentraban en huir pronto.

Jungkook, quien abandonó a su Dios, nuevamente le imploró en sus pensamientos que lo ayudara a salir a salvo con Taehyung, que ambos pudieran ir a un lugar sanos y salvos, cumpliendo su pequeño sueño de estar juntos porque sabía que iban a tener cosas más grandes.

Una vez que llegaron a las vías del tren se sintieron mas aliviados y Jungkook cerró la compuerta antes de seguir avanzando.

—Recuerda ir atrás de mí.

Dijo Taehyung y el azabache obedeció, Taehyung pronto sacó su arma mientras seguía el camino. Había demasiado silencio, tanto que Jungkook le llegaba a poner nervioso. Hace años presenció el bombardeo que lo dejaba sordo de sus oídos e incluso sin notar los gritos de las personas mientras alemanes gritaban venir en busca de justicia.

—Nos culpan de los pecados de nuestros superiores o ancestros...

Taehyung volteó un poco a verlo confundido.

—¿De qué hablas?

—Hablo de los Nazis ¿Por qué deben atacar a nuestro pueblo quien solo vive de la gente buena? Hasta tú los conociste, Tae...

Quedó callado entonces, la salida estaba cerca por lo que tomó la mano de Jungkook, asomaba su rostro para poder identificar un camino mas corto pero oculto para ellos. Jungkook señaló el lado derecho donde parecía cubierto de arbustos y árboles grandes.

𝑳𝒂 𝒎𝒆𝒍𝒐𝒅𝒊𝒂 𝒅𝒆 𝑱𝒆𝒐𝒏 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora